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—Me gustaría vivir en Busan.

—¿Busan? — pregunto el pálido mientras acariciaba el cabello de Jimin mientras estaba sentado en el piso entre sus piernas.

— Es más relajado,  creo que nuestros hijos serían felices viviendo en un lugar así. ¿Me seguirías a Busan?

— Te seguiría al fin del mundo, Jimin.

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Cuando Yoongi abrió los ojos, se encontró con el blanco techo que odiaba, movió su mirada y se encontró con Hoseok recostado en el sofá cerca de su cama, estaba dormido.

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Cuando abrió los ojos de nuevo vio a la enfermera quien terminaba de escribir algo y luego le miró.

—Ha despertado. — la mujer sonrio y se acercó para revisar sus ojos con la luz.

—¿Que hora es?. — dijo con voz ronca y seca.

La mujer se acercó al vaso con agua y se acercó para darle un poco.

—Son las once de la mañana ¿Cómo se siente?.

—¿Once? Mi hija saldrá pronto del Jardín de niños. — intento ponerse de pie pero fue detenido.

—No, no se levante. — lo obligó a permanecer acostado.

—Necesito ir por mi hija. — se quejo cuando vio a Hoseok entrar, tenía el cabello revuelto y otra ropa.
—  Hoseok, necesito ir por Sana.

—Tranquilizate, Taehyung ha estado yendo por los niños. — se acercó y Yoongi frunció el ceño.— has estado aquí una semana Yoongi.

—¿Q-que?

— El médico dijo que sufriste un colapso, honestamente ni el supo explicarnos.

Jimin

Yoongi miró alrededor del lugar, unas bonitas margaritas adornaban la mesa a su lado y miró a Hoseok.

—¿El hombre que estaba contigo en el restaurante?

—Oh, Jimin?. — rasco su barbilla, solo hacia eso cuando estaba nervioso. — Bueno, nos tenías preocupados a todos. Ha estado viniendo todos los días, de hecho no tiene mucho que se fue.

—Ya veo. — asintió.

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Y

oongi fue dado de alta dos días después y apenas cruzó el marco de la puerta de su casa, Sana comenzó a llorar.

—¿Que sucede mi vida?. — se puso a la altura de su niña y la abrazo.

—Papi. — sollozo. — Creí que no me querías más. — decía entre hipidos.

—Mi pajarito, yo te amo. — besaba la cabeza y con ello la carita de la menor. — Perdón por irme así sin avisar, mi vida. No volverá a pasar. — limpio el rostro de su hija.

—¿Me lo prometes?.

—Te lo prometo, cariño. — la abrazo fuerte. — Si hubiera podido tenerte conmigo, te hubiera llevado, bebé.

—Te amo papi.

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Yoongi estuvo dos días en casa con su hija y esa mañana había regresado a sus deberes en el restaurante.

Estaba en su computadora trabajando en el Menú, iban a integrar nuevas comidas y Yoongi amaba hacer los diseños así que trabajaba en ello.

Estaba distraído hasta que su mirada se posó en una cabellera castaña que hablaba con Jungwoo en la entrada.

Su corazón se aceleró de sobremanera mientras miraba al hombre.

Por dios! Habían pasado cuatro años y Park Jimin seguía siendo tan hermoso como cuando lo conoció.

Volvió su mirada a la computadora cuando Jimin comenzó a mirar alrededor del lugar, no pasaron ni dos minutos cuando lo tuvo frente a él.

— Hola. — escucho la voz de Jimin y alzó su mirada para ver esos bonitos ojos color chocolate.

—Hola. — respondió.—¿Viene a comer?

—En realidad tengo una reunión, pero te vi y quise saludarte primero. ¿Cómo te sientes?.

—Me siento bien, gracias por preguntar. — miró en su computadora y luego a Jimin. —¿Es ahora su reunión? ¿Quiere sentarse?

—Puedes hablarme de tú, de todas formas eres mayor que yo. — hizo una ligera sonrisa.

— Entonces debes decirme Hyung.

"Entonces debes llamarme Hyung"

Ambos se miraron al tener el mismo recuerdo.

—Bien Hyung, me gustaría quedarme a platicar pero realmente es una reunión importante. — hizo una mueca y acomodó su cabello.

Yoongi vio el anillo de oro que adornaba su dedo anular.

— ¿Estás casado?. — pregunto de la nada, Jimin le miró confundido y Yoongi le señalo el anillo en su dedo.

—Oh. — vio como Jimin sonrió con tristeza, Yoongi conocía ese anillo. — Digamos que lo estuve.

—¿Y que sucedió?. — pregunto curioso por la respuesta.

— Es una historia muy larga. — lo vio jugar con el anillo.

—Supongo que no te gusta hablar de ello ...

—No es eso. — negó. — Es solo que... lo extraño. — hizo una media sonrisa para mirarle.

Yoongi sintió una punzada en su pecho, iba a decir algo pero fueron interrumpidos.

—¿Park Jimin?. — una bonita mujer se puso frente a ellos. — Si eres tú. — la chica sonrió para acercarse al rostro de Jimin y besar su mejilla.

Yoongi frunció el ceño pero vio como Jimin se alejo de la mujer y disimuladamente limpiaba donde la chica le había besado.

—Disculpame hyung, te parece si platicamos después?.

— Me gustaría, si. — asintió sonriéndole de regreso y lo vio alejarse con la mujer.

¿La vida le estaba dando otra oportunidad para mejorar lo que habían arruinado?

Si era así, Yoongi lo tomaría.

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  Close As strangers   - JIMSUDonde viven las historias. Descúbrelo ahora