Close As strangers - JIMSU

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Soobin tenía mucho miedo, como cuando Dongsuk llegaba ebrio a su casa y tenía que hacer de todo para no hacer ningún tipo de ruido o como cuando Lalosa llegaba drogada y tenía que ponerle seguro a la puerta para que no lo tocará.

Tenía mucho miedo porque había escuchado la llamada que había recibido Yoongi y conocía esa voz, esa horrible voz que le perseguía en sueños y en sus terribles pesadillas.

Dongsuk era el hombre que su "madre" había metido a su casa,el hombre que le dejo heridas horribles en la espalda, que lo golpeó hasta dejarlo desmayado y que lo abandono aquella noche de frío. Dongsuk era el hombre más horrible que había conocido en su corta vida y tenía miedo de lo que le podría hacer a su hermanita.

Se puso de pie limpiando sus lágrimas y se acercó al clóset para sacar una mochila, guardo solo una camisa y un suéter y busco su pequeña cajita en donde guardaba el dinero que Yoongi le daba.

Miró la pequeña foto que yacía en su buró, una foto de Yoongi, Sana y él, su familia.

Sorbe su nariz mientras toma la fotografía y la mete en su mochila , sale de la habitación y se asoma a la sala para ver a los hombres en sus computadoras y a Yoongi haciendo llamadas.

Siempre iba a estar agradecido con ese hombre por brindarle un poco de amor incluso cuando el se había negado a irse a vivir con él las primeras veces.

Salió de la casa por la parte trasera, por suerte todos estaban distraídos así que comenzo a alejarse de esa bonita casa que fue su hogar por algunos meses.

Llegó hasta una parada de autobús y se sentó mientras esperaba a que esté llegará.

Miraba sus manos sintiendo la culpa y limpiaba las lágrimas que comenzaban a deslizarse por sus mejillas y no se da cuenta de que alguien se sienta a su lado.

— ¿A donde vas, Soobin?. — el menor levanta su mirada de golpe encontrándose con la mirada de Jimin. — ¿Puedo acompañarte?.

Soobin niega mientras abraza su mochila. — Es mi culpa. — solloza.

— ¿Que es tú culpa, pequeño?. — pregunta con delicadeza mientras se pone de cuclillas para estar frente al menor.

— No quiero que le haga daño, tengo que ayudarla.

— ¿De que hablas, Mmh? — le mira. — Puedes confiar en mí.

— Él, él quiere hacerme daño a mi. Tengo que ir a buscar a Sana.

— La buscaremos juntos. — trata de confortarlo pero Soobin niega.

— No podemos esperar. — llora y Jimin se pone de pie para abrazarlo.

— ¿Quién te quiere hacer daño?

— Él, Dongsuk, m-mi padre. — alza la mirada con los ojos llenos de temor y Jimin limpia sus lágrimas.

— Lo que haremos será volver a casa y ...

— ¡No! Tengo que ir por Sana...

— Soobinie, escúchame. — toma del rostro al menor. —  Sé que tienes miedo, también tengo miedo, Papá Yoongi también tiene miedo y se que estás siendo valiente para lo que quieres hacer ahora, pero te has puesto a pensar en como Yoongi se va a sentir? Ha perdido a Sana y si te pierdes a ti, Yoongi no lo va a soportar.

— Pero ..  — solloza.

— Los adultos aquí solo nosotros binie, nosotros tenemos que buscar soluciones, no tú. — lo abraza. — tú no tienes la culpa de nada, ese hombre no es tu padre pequeño, Yoongi es tú padre Mmh? Y le rompería mucho el corazón si lo dejas. — le acaricia la cabeza mientras el menor solloza.

— ¡SOOBIN!. — ambos escuchan el fuerte grito de Yoongi y Jimin ve como el pálido está buscando por todos lados hasta que los ve.

Yoongi corre a ellos y atrae a Soobin a sus brazos. — ¿Dónde estabas?. — dice entre lágrimas. — Te estuve buscando en casa bebé. — mira el rostro del chico y limpia sus lágrimas.

— Lo siento mucho. — Soobin solloza y Yoongi niega para abrazarlo.

— No mi amor, no te disculpes. — besa la cabeza del chico. — Vamos a casa amor, te haré el almuerzo ¿Si?

— Papá. — dice a lo bajito.

— Dime, mi amor. — acomoda el cabello del menor quien mira a Jimin lo ve asentir para mirar a Yoongi de nuevo. — Sé dónde está Sana.

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Los tres vuelven a casa, Soobin está muy alterado mientras les cuenta a Yoongi y a los policías que reconoció la voz del hombre de la llamada. Yoongi lo abraza mientras llora con el menor, él es una de las pocas personas que saben por todo lo que Soobin tuvo que pasar en esa horrible casa con esas horribles personas.

Soobin se siente culpable y Yoongi trata de calmarlo, porque nada es su culpa.

El menor termina quedándose dormido reposando su cabeza en el regazo de Yoongi quien acaricia su cabello con delicadeza y Jimin está sentado en el piso frente a ellos.

— Soobin ha tenido una vida difícil. — dice bajito para que Jimin pueda escuchar. — ese hombre le hizo mucho, mucho daño. — limpia una lágrima. — Sufrió de todos los tipos de abusos por culpa de ellos, la última vez el hombre le dio una brutal paliza, por eso lo traje conmigo. — su voz se quiebra. —  Lo vez con una sonrisa, pero el siempre tiene pesadillas, el siempre tiene miedo. Q-quisimos hacer algo, pero la policía no procedió, entonces supimos que el hombre tiene amigos dentro.

Jimin toma la mano desocupada del pálido y deja un beso en el dorso. — Voy a hacer todo lo posible porque tengan una vida feliz, yo me encargo de eso. Nadie más va a volver a molestarlos jamás.

— Jimin ...

— No estás solo nunca más, estoy aquí para ti. Sé que la cagué en nuestro matrimonio, se que hice cosas sin pensar pero no volveré a cometer los mismos errores Yoon, estoy aquí, para ti, soy tuyo. — vuelve a dejar otro beso en el dorso y le sonríe.

— ¿Siempre?. — sujeta la mano de Jimin.

— Siempre. — sonríe.

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