𝐖𝐓𝐌 | ❛ Cada sombra esconde un peligro, cada paso puede ser tu último suspiro. El asesino está entre nosotros. ❜
𝗗𝗼́𝗻𝗱𝗲... en un tranquilo pueblo, un grupo de amigos se ve envuelto en una pesadilla inimaginable cuando un asesino enmascarado...
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Elowen experimentaba sentimientos encontrados respecto a la universidad. A veces, sentía un profundo desagrado por la rutina académica. Para evitar caer en la desesperación y ausentarse de sus clases, se veía obligada a romantizar el estudiar en el extranjero. A diferencia de la preparatoria, donde contaba con un grupo estable de compañeros, en la universidad la situación era distinta. La falta de apuntes y la dificultad para obtener las tareas asignadas por los profesores la llevaban a estresarse con mayor facilidad, además de quitarle todas las ganas de faltar. Es por eso que, al día siguiente de su ataque se vio obligada a regresar a la universidad como cualquier otro día.
A pesar de su falta de apetito, su compañera de cuarto insistió en que desayunara algo, ofreciéndole unos deliciosos panqueques que Elowen siempre había disfrutado. Aunque inicialmente no tenía intenciones de comer, la insistencia de Sakura logró persuadirla. Sumergida en sus pensamientos y preocupaciones, Elowen se encontraba en su propio mundo, enfrentando los mismos dilemas que la atormentaron durante la noche anterior. Fue en ese momento, mientras se sumía en sus pensamientos, que su nombre resonó en la televisión, llamando su atención y sacándola brevemente de su nube.
────Elowen Leonhard, una joven extranjera que fue brutalmente atacada en dos ocasiones, anoche...-
Sakura apagó la televisión y ella le agradeció en silencio. Su caso se viralizó en los noticieros, generando gran controversia al distorsionar los hechos para captar la atención del público.
────El oficial Kim llamó esta mañana, al parecer Beomgyu fue liberado────la japonesa le apretó el hombro como apoyo y se sentó frente a ella. Elowen le sonrió levemente────Su celular no estaba registrado, él no hizo las llamadas. Dijo que estarían revisando los celulares de todos en Busan, específicamente las llamadas hechas a la casa de él. Tardará, pero lo encontrarán.
Un suspiro de alivio y preocupación escapó de sus labios. La culpa persistía, ¿pero quién no habría sospechado en su lugar? Ante la posibilidad de lo que podría haber sido, ahora lo tenía descartado por completo.
────¿Estás bien?────Sakura la miro con compasión.
────Ahora solo estoy preocupada por Beomgyu────apretó los labios fuertemente, evitando suspirar de nuevo────Debe odiarme después de lo que sucedió.
Elowen sabía que la culpa seguiría en su interior hasta que el chico la perdonara, pero veía ese perdón como algo lejano. Poniéndose en sus zapatos, ella no se perdonaría, consciente de su naturaleza rencorosa y temiendo que Beomgyu no la entendiera.
Después de eso, las dos amigas emprendieron el camino hacia la preparatoria, ubicada cerca de la residencia de chicas por razones evidentes. Al llegar a la entrada principal del colegio, todas las miradas se dirigieron de inmediato hacia la más joven como si fuera un imám. A pesar de la atención no deseada, ella optó por ignorar a quienes la observaban y se aferró al brazo de Sakura, su principal apoyo en ese momento. Sortear a los reporteros ávidos de sensacionalismo resultó ser una tarea complicada, pero lograron hacerlo con éxito.
