Capítulo Especial 1

28 2 3
                                    

Narra Julián

Eran cerca de las 21hrs cuando pasé a casa de Gianna por ella. Se veía hermosa. Su cabello semi ondulado con un broche rosado pastel que hacía juego con un hermoso vestido sin hombros y hasta un poco más arriba de las rodillas, todo acompañado de unos zapatos bajos del mismo tono que su vestuario.

–Wow –fue el único sonido que pude emitir–.

–Te ves muy bien, Julián –en ese momento llevaba un traje negro con camisa blanca–.

–Si se pudiera medir la belleza en segundos, tú serías toda la eternidad.

–Te llaman Romeo –rió su amiga apareciendo por la puerta del departamento–. Váyanse, tortolitos. Hey –se dirigió a mí– la quiero en casa antes de medianoche, cuídala y no se te vaya a ocurrir... ya sabes... en cualquier parte, es un tesorito.

–Como diga, suegri.

Gia me tomó del brazo hasta que llegamos al estacionamiento del edificio, le abrí la puerta del vehículo y ella entró.

–Te noto nervioso, amor, ¿pasa algo?

–N-no, nada. ¿Te parece si pongo música?

–Sí, me encantaría.

Busqué "imagination" de Shawn Mendes en mi playlist de esta noche.

–Yo te dedicaba esta canción –sonreí recordando aquellos tiempos–.

–¿Por?

–Me recuerda aquellos días en que te veía pasar frente a mi casa, cuando ibas al colegio y me ignorabas por completo.

Conversamos todo el trayecto sobre distintos temas, por ejemplo, de nuestra primera relación, cuando éramos amigos, de trabajo, entre otros. Cuando me desvié de la carretera y doblé hacia un camino rural, Gianna se puso en alerta.

–¿A dónde vamos?

–¿Confías en mí?

–Depende –rió–, ¿a dónde vamos?

–Ya verás.

Continué manejando. Ya estaba oscuro. Era una noche preciosa, la luna brillaba muy hermosa en el cielo y estaba acompañada de numerosas estrellas.

–La luna está hermosa –dijo Dani–.

–Siempre lo es, pero hoy brilla mucho –respondí y ella hizo una mueca triste–. ¿Qué pasó?

–Nada –respondió cortante. Ya la cagué, pero ¿qué hice? –.

Tras una larga pausa, ella dijo:

–¿Falta mucho?

–Nop, ya llegamos.

–Estamos en medio de la nada, Julián.

–¿Recuerdas aquella cita que tuvimos en un cerro y de pronto comenzó a llover? –Sonrió por primera vez en mucho tiempo–.

–Sí. ¿Estamos allí? –asentí– Wow, si fuera de día se apreciaría más, ¿no crees? –dijo intentando disimular que estaba molesta, pero no funcionó–.

No dije nada y bajé del auto, di la vuelta y abrí su puerta. La tomé de la mano y, con ayuda de la linterna del celular, caminamos entre los matorrales. Le cubrí los ojos y rodeamos un gigantesco árbol, para por fin llegar al lugar que Felipe me había ayudado a preparar.

–Me llego a caer y no la cuentas, Julián –dijo amenazándome–. ¿Por qué no me dijiste donde veníamos? ¡Me hubiese vestido más adecuada para escalar un cerro de noche! Mejor dicho, si hubiese sabido dónde veníamos, no acepto la invitación, yo...

–Llegamos –le descubrí los ojos y pudo ver el lugar–.

Espero que le guste, estuve demasiado tiempo planeando esta sorpresa y espero que esta noche sea especial e inolvidable.

Narra Gianna

Ganas de matar a Julián no me faltaban después de lo que respondió a mi comentario de "la luna está hermosa", esa frase es como decir "te amo" o "me gustas", al responder "siempre lo es" está rechazando mi confesión, quizás sea absurdo enojarse por eso, pero creí que recordaba cuando le había explicado el significado años atrás. Sin embargo, olvidé todo enojo cuando vi lo que había preparado. El lugar estaba realmente magnífico: el suelo iluminado sutilmente con pequeños farolitos de luz amarilla y una cadena de luces del mismo tono colgando del árbol; sobre el pasto había un mantel blanco y rojo con varias rosas, chocolates sobre él y algunas magnolias blancas hermosísimas.

–¿Qué es...?

–Falta algo aún.

-¿Más? -Pregunté riendo-.

Buscó algo en su celular y comenzó a sonar la parte instrumental de una canción que no conocía.

–Hey, mira

Hoy el cielo entero bajé para ti

Mi vida

Hay algo importante que intento decir

Deja que me ponga

De rodillas para ti

Dime qué respondes

A un siempre juntos

Sin dejar de cantar, se arrodilló, sacó una caja azul de terciopelo y la abrió, pude ver un anillo muy hermoso de plata con un corazón brillante elevado.

–Dame esta noche tu mano

No quiero pasar un día sin ti

Quiero que sea en tus brazos

Donde vea llegar mis días al fin

¿Quisieras casarte conmigo?

Hey

Hey, mira

Somos uno solo, no sé dividir

Mi vida, ¿Qué opinas?

Si a partir de hoy soy tu almohada al dormir

Deja que me ponga

De rodillas para ti

Dime que respondes

A un siempre juntos

Dame esta noche tu mano

Que ya no quiero estar un día sin ti

Quiero que sea en tus brazos

Donde vea llegar mis días al fin

¿Quisieras quedarte conmigo?

¿Pasar una vida conmigo?

Hey, mira

Hoy el cielo entero bajé para ti.

A pesar del tiempoWhere stories live. Discover now