Capítulo 12

205 35 4
                                    

"Itachi:

Hacía días que no escribía para ti. Días que no pude expresarte lo que me haces sentir. Días donde te vi sonreír constantemente con aquel hermoso brillo en tus ojos que tanto me encantan, donde hablaste más que en todo este tiempo que hemos sido compañeros. Días donde anhelaba pararme frente a ti y decirte cuanto me gustas, cuanto te amo.

Soy consciente de que la curiosidad te gana por saber quien soy.
También soy consciente de que tarde o temprano debo presentarme ante ti y decirte que yo soy el chico que te escribe las cartas, el que te mira cuando estás distraído o el que se pierde en sus pensamientos cuando me imagino peinando tu cabello, tomando tu mano o simplemente, besándote siempre que quiera.

Las cartas anteriores representaron bien mis sentimientos, pero espero con ansias el poder decírtelos frente a frente. Poder demostrártelos.

Siento que no hay mucho que pueda escribir, porque se que si digo algo de lo ocurrido durante estos días, no te tomará más de 5 segundos el deducir mi identidad. Porque hay muchas situaciones importantes que han sucedido y tú eres la clave. No diré más.

Solo espero poder mantenerme a tu lado cuando te diga la verdad. Espero poder haber logrado sentimientos a través de mis cartas y deseo que nada de todo esto haya sido en vano.

Atte: Anónimo".

Un suspiro escapó de sus labios al recordar la carta que encontró esa mañana. Si, había sentimientos, pero no estaba seguro con respecto a qué cuando no conocía a su remitente.

¿Era posible enamorarse de alguien que no se conoce?

Intentaba hacerse entender que la persona que su cabeza imaginaba al escribir las cartas y el remitente, no eran la misma. Porque su ilusión aumentaba cuando su imaginación volaba y no podía aferrarse a algo que solo era producto de su mente.

—¿Alguna vez te haz enamorado?—Pudo notar que la pregunta sorprendió a su compañero.

Naruto caminaba a su lado hacia la cafetería. El tiempo del descanso corría y no quería perderse la oportunidad de ingerir algo caliente para esas épocas de bajas temperaturas.

—¿A qué viene esa pregunta?

Itachi torció su boca.

—Bien, quizás la sientes muy personal.—Llevó su mano a su mentón y reformuló.— ¿Te gusta alguien?

El rubio frunció el ceño.

—Si, me gusta alguien.—Respondió mirando al frente. Su ceño fruncido cambió para dar paso a una sonrisa.— Estoy intentando gustarle, pero no estoy seguro de que esté funcionando.—Rio.— Al menos, se que su pensamiento con respecto a mi ha cambiado.

Sabía las posibilidades que existían de que Naruto contestara aquello.
Conocía la casi nula posibilidad de que él pudiera gustarle. Sabía que sus sentimientos extrañamente serían correspondidos.

Entonces, si era consciente de todo ello... ¿Por qué dolía tanto?

¿Por qué sus ojos ardían? ¿Qué tanto le podría gustar Naruto como para reaccionar de aquella manera?

Porque no puede decir que ese rubio fue el único chico que le gustó. Otros jóvenes le han gustado durante su adolescencia y a pesar de ello, siempre que los veía con alguna pareja poco le importaba, porque ya se hacía una idea de sus preferencias y de las posibles negativas que tendría si se confesara.

Cartas (NaruIta)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora