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NarraJude.
Llegó al entrenamiento acompañado de mi madre, pues yo aún no tengo el carnet de conducir aunque ya va siendo hora de que me lo vaya sacando.
- te espero aquí a las dos - me dice mi madre antes de irse - que tengas buen entrenamiento hijo.
- gracias mamá - le agradezco con una sonrisa antes de cerrar la puerta del coche.
En la misma entrada me encuentro a Camavinga y a Brahim que me esperan para entrar los tres.
- haber cuando te sacas el carnet - me dice el malagueño.
- poco a poco - digo. - no me metáis prisa que las prisas nunca son buenas.
- aligerar el paso - nos grita Ancelotti.
Están la gran parte de nuestros compañeros ya en el medio del campo esperando para comenzar el entrenamiento.
El entrenamiento comienza y empezamos a dar unas vueltas corriendo.
- Jude, ¿cómo llevas las clases de español? - pregunta Lucas Vázquez mientras corremos.
- bien, poco a poco voy aprendiendo el idioma - respondo. - es algo complicado el español.
- te tienes que buscar una novia española y verás como te enseña rápido - habla Ceballos.
- estoy bien solo - digo frunciendo el ceño - ademas me gusta dar clases de español, es un idioma interesante.
El entramiento dura una hora y media pero parece que se hace más corto entre las bromas y risas que todos hacemos. Me siento muy augusto en este equipo y con mis compañeros, aunque todavía no controle el español a la perfección poco a poco me voy integrando más. Este equipo no es solo un equipo, sino que es una familia.
- Jude, ¿viene tú madre a recogerte o te vienes conmigo? - me pregunta Brahim haciéndome levantar la mirada del móvil.
En cuanto he acabado de ducharme y cambiarme, me he venido al parking ha esperar a mi madre.
- viene mi madre - le aviso - es más acaba de llegar - le indicó con el dedo señalando el coche de mi madre.
- ah genial, pues nos vemos mañana - se despide el malagueño.
- adiós.
Me monto en el coche y enseguida mi madre gira su cara mostrándome una dulce sonrisa.
- ¿cómo ha ido? - pregunta.
- muy bien aunque estoy algo cansado.
Tenemos muchos partidos seguidos y no nos da tiempo de descansar lo suficiente.
- esta tarde tengo que ir a recoger un par de cosas para la casa así que creo que llegaré tarde - me avisa y yo asiento.
- yo creo que daré una vuelta y volveré a casa a descansar - le digo y ella asiente.
- ¿has quedado con alguno de tus compañeros? - pregunta y yo niego.
- no pero le diré a alguno algo luego.
Llegamos a casa y mientras yo suelto todo en mi habitación mi madre se encarga de preparar la comida. No tardo mucho en bajar y ayudarla.
Después de comer mi madre se va a hacer unos recados y yo me quedo ordenando la cocina aunque a la hora aproximadamente me marcho con Brahim a la cafetería que fui el otro día.
- ¿por qué has insistido tanto en venir aquí? - pregunta él mirando a su alrededor - no digo que la cafetería sea fea ni nada por el estilo, al contrario es ideal pero hay algo que me estás ocultando.
Capullo como me ha pillado.
- yo no te estoy ocultando nada - trato de desviar el tema.
- Jude no te conozco desde hace mucho pero creo que sé cuando no estás siendo del todo claro - me debate.
- agh está bien, el día que tú me dejaste aquí plantado vi a una chica que me llamo la atención, volví unos días después y la vi, me acerqué a ella y conversamos un rato pero parece que a ella no le agradaba mi presencia.
- ¿me estás diciendo que te gusta una chica?
- ¿qué dices? No me gusta esa chica.
- ¿entonces? - pregunta mi amigo algo confundido.
- es simplemente que me genera curiosidad porque no parece ser una chica del montón. - explicó.
- ¿y esa chica está aquí hoy? - pregunta de nuevo.
Echo un vistazo por las mesas que hay en la cafetería pero por desgracia no está aquí sentada.
- no está - hago una mueca.
- ¿sabes su nombre? - me pregunta y yo niego.
- no me lo quiso decir. - hablo y Brahim se lleva las manos a la cara.
- ¿y así quieres conquistarla?
- que no me gusta Brahim - le digo frunciendo el ceño. - esa es su amiga - señaló a una chica que se encuentra con el ordenador.
La chica tiene el pelo rizado y es de color cobrizo, sus ojos azules están puestos en la pantalla del ordenador.
- vamos a acércanos a ella - habla Brahim poniéndose en pie.
- no - me niego.
Suspiro al ver como Brahim ya se ha acercado a ella y no me queda más remedio que ir detrás de mi amigo.
- mi amigo estaba buscando a una supuesta amiga tuya - le dice a la chica.
La mirada de ella se posa en mí y me analiza durante unos segundos.
- una chica morena de pelo ondulado y ojos pardos - explicó.
Ella sonríe y enseguida asiente.
- Olivia - me dice su nombre.
Alzó mis hombros dando a entender que no me sé su nombre y enseguida busca una foto de su amiga.
- si es ella - digo.
Así que se llama Olivia la chica misteriosa de la cafetería y los libros.
- ¿qué pasa con Olivia? - pregunta.
- a mi amigo le gusta - salta a decir Brahim y yo niego rápidamente.
- eso no es cierto, simplemente me genera curiosidad.
- déjame decirte que mi amiga es algo desconfiada con la gente - dice la chica.
- ¿queréis venir tú amiga y tú a nuestro próximo partido? - le ofrece Brahim.
- no es necesario, por cierto soy Gemma - se presenta.
- piénsatelo Gemma - le anima Brahim.
- está bien - suelta un suspiro.
- Gemma no le puedes decir a Olivia que estas entradas te la hemos regalado nosotros, que esto sea un secreto - le digo y ella asiente.
- vale, muchas gracias chicos.
Nos despedimos de Gemma y Brahim me acerca hasta mi casa.
- no te vayas a poner nervioso en este partido cuando veas a la chica que te gusta - se despide Brahim de mi.
- lo que tú digas - ruedo los ojos saliendo del coche. - hasta mañana.