INDIGO

ciudad de Rio- cap 2

Luiza pov

Había llegado a Rio de Janeiro hace unas horas, decidí acostarme un rato ya que el vuelo fue largo desde Japón y me dormí casi de inmediato.
Ahora estaba dando vueltas en la cama. Amaba el olor de la ciudad. Me levanté con una felicidad unica y abrí el ventanal que daba directo la vista a mi lugar favorito en el mundo... El mar.

- ¡¡No podría ser más afortunada, gracias mundo por darme este nuevo día!!
Me tendría que ir a ver a mi papi que como llegué de madrugada no lo había visto aún. Si chófer Roger fue a buscarme con su guardaespaldas Danilo, ese señor me daba un poco de miedo, si bien su aspecto era rudo, su facciones parecían querer matarme.
Bueno dejaría ese asunto de lado. Me di una ducha y arreglé antes de bajar. El calor de Rio ya no era tan fuerte como en enero o febrero, que parecía nos cocinamos a fuego lento. Pero aún así estaba bastante cálido aún para ser mayo. Decidí vestirme con un vestidito suelto. Hacerme una media cola en el cabello muy estilo princesa y agarré mi libro de coello, estaba en las últimas páginas. Era mi libro favorito, lo había leído unas mil veces. Pero es que esa sensación de buscar tu lugar en el mundo, me daba una sensación de alivio. Difícil de explicarlo.

Baje las escaleras y ví que papá no estaba allí, ni en la sala de estar, ni en la cocina, fui hasta el patio, el día era maravilloso, el cielo bien celeste con algunas nubes blancas que lo adornaban, los pájaros cantando, algo que es muy único aquí en Brasil es por esos cantos armoniosos...
Esa felicidad que da estar en este lugar era infinita, me gire a mirar el verde del césped bien cortado y el jardín de rosa de mi papá. y lo vi a Shalom, el es mi perrito, ya tenía 10 años con nosotros, era viejito pero mismo así saltaba y corría al verme con una alegría única. Dejé mi libro sobre una mesa y comencé a jugar con mi shalom hermoso...

Después de un rato escucho la voz de mi papi llamándome..
- hija ya que placer volver a verte mi amor.
Corro rápido para envolverme en un abrazo lleno de cariño. El que solo el me sabe dar.

- papi querido. Te he buscado y no te ví por ningún lado. Pensé no estabas en la casa.

- en realidad estaba en el despacho resolviendo unos asuntos.

- ¿hasta los sábados trabajarás nuevamente?
El de rio y me abrazo.

- ya te había prometido que no, solo estaba atendiendo un asunto importante. Bueno te espero en la sala. Quiero conozcas a alguien.
Me dió un beso en la frente e ingreso a la casa.
Yo busqué mis ojotas, ya que me las había sacado para poder sentir el pasto en mis pies. Tomé mi libro y me dirigí a la sala.

Valentina pov

Habiamos llegado hace 15 minutos del aeropuerto. Estábamos en medio del tráfico. Rio de Janeiro era un lugar tan desorganizado, la gente por todos lados, los autos como sumideros de hormigas, el clima estaba muy agradable, estaba viviendo hace más de 5 años en Washington y el clima era totalmente diferente a este lado del mundo, no solo el clima, el aire de sentía distinto, no voy a mentir, estaba bastante ansiosa desde que he llegado, saber que por respeto tendría q ir a saludar a mi madre, me ponía los pelos de punta. Me he enfrentado a Miles de situaciones, en las cuales la mayoría eran peligrosas, pero solo saber que volvería a tener enfrente a ella, era la que más me daba pavor...

Llegamos a la mansión, la verdad era un lugar con mucha naturaleza al rededor, bastante retirado de la ciudad. Está parte me agradaba, significaba que no escucharía el continuo ruido de tráfico y los aviones sobrevolando. Eso era una de las cosas que detestaba de Washington.

- buen día señorita Buiar, la espera el señor Mauricio en su despacho, sígame por favor.
Asentí y seguí a esa mujer mayor que parecía ser la ama de llaves de la casa.
Entramos a un despacho y ahí se encontraba el, se paró de su asiento con una mirada muy firme, como estudiando cada parte de mi.