conexión - cap 8

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Valentina pov

Me giré y alguien me golpeó en la cabeza, mi cuerpo no respondía Pero yo estaba consciente de todo lo que estaba pasando a mi alrededor, la desesperación de no poder manejar mis movimientos me invadió. Entonces ví como se llevaban a Luiza que estaba desmayada, mi madre estaba parada enfrente mio, tenía un palo en su mano, no ella no podía ser quien me golpeó, tiro el palo cerca de mi cuerpo y se quedó mirando desde el cuelo la puerta, mamá no me dejes aquí, queria gritar pero las palabras no me salían. Cerro la puerta y todo se volvió oscuro en la habitación... Y me desperte asustada. Abrí los ojos y ahí estaba ella mirándome, mi corazón estaba súper acelerado y sentía el dolor de mis puños apretados.

- tranquila valen fue solo un sueño.
Ella acaricio mi rostro. Había Sido un maldito sueño, cerré mis ojos con fuerza.

- ¡mírame!
Su pedido era de una manera tierna, abrí mis ojos y la miré, me dió un beso en la mejilla, para luego volver a mirarme.
- fue solo un sueño, estamos bien.
No sabía si ella podía entenderme sin explicar nada o como era que sabía lo que estaba sintiendo.
- ven.
Se acomodo en la cama e hizo que yo vaya a abrazarla, me rodeo con sus brazos y coloqué mi cabeza en su pecho. El latido de su corazón era tranquilo y mi respiración se fue tranquilozando al igual que mis latidos.
Estar así entre sus brazos era algo inexplicable, jamás había sido abrazada de esta manera, sentido este cariño o la sensación de que alguien estaba preocupada por mi...

Flash back

- No puedes ser, no sirves para nada, no puedes si quiera vestirte bien. Pareces un maldito espantapájaros. Tienes 10 años y aún no sabes cómo hacerlo, no entiendo que tienes mal en tu cabeza, siempre has sido.
Cuando mi madre me hablaba así me sentía horrible. Me mire y yo si me sentía cómoda con lo que traía.
- Vete a cambiar, realmente no veo la hora de que vuelvas a ese internado.
La miré con rabia, no llegaba. A cumplir las 7 horas que estaba en casa y ella buscaba la manera de hacerme sentir que ya estorbaba. Yo también odiaba volver a casa y saber que me insultaba por todo.
- vamos vetr a cambiar que así no iras a ningún lado con nosotros.
Me apresuré al ir a mi habitación, la verdad no sabía que era lo que debía colocarme. Quizás si me ponía un vestido ella no tendría problema. Así que eso hice, me puse un vestido. Buscaría la forma al menos de ser casi invisible, porque quería pasar un tiempo en familia, hoy almorzaremos con igor y papá afuera y si quería que que me comprara algo rico para comer,
Sabía que pedirle, era otro asunto, pero ya no me trataría tan mal como cuando estamos solas. Corrí para bajar las escaleras, sabía que tampoco le gustaba que demoré.
Llegué a la sala, no estaba, fui a la cocina y no había nadie. Miré el porta llaves y no estaban las llaves, suspiré ella me había dejado otra vez. Suspiré en frustración no era algo que me sorprendiera, desde niña me hacía lo mismo, no es que ahora no lo sea. Pero eso jamás le importo. No iba a comer nada, así que fui a mi habitación o lo que quedaba de ella y me acosté en el colchón que estaba en el piso. Hoy tampoco sería un buen día...

Fin del flash back

Me di cuenta que estaban mojando la remera de luiza con mis lágrimas, me seque la cara rápido, no quería sentirme así. Me levante saliendo de sus brazos.
- no te preocupes, deja un poco de ser tan dura contigo. Ven quédate un poco más aquí.
Me volvió a acostar y enredar en sus brazos. Ahora comienzo a acariciar mi brazo. Ella era muy tierna, acomodó mi cabeza para mirar su rostro, ella tomó mi mentón y dejo un beso en mi nariz.
- eres realmente linda cuando te despiertas.
Sentí otra vez ese hormigueo en mi, no sabía si eran nervios o a qué aludía está sensación.
Tocó con su nariz la mía, para darme un beso, este beso era muy diferente a los demás que nos habíamos dado, era pausado, era más cariñoso, sus labios jugaban con los míos de una manera muy suave.

Luiza pov

Estaba mirándola mientras dormía, su cara era de sufrimiento y iba en aumento
- mamá no me dejes aquí.
Una lágrima salió de sus ojos. Ella sufría en silencio, era tan dura y protectora. Y ahora se veía tan vulnerable durmiendo. Quería despertarla, pero no queria se asustara. Y de repente abrió sus ojos.
No quería me contara nada, solo quería que me deje abrazarla.
Sentí mi remera humedecerse. Tenía tantas ganas que me contara que le duele tanto. Pero ya viendo como es dejaría ella sola me lo diga.
Se limpio las lágrimas y levanté su carita para que me mirara, le di un pequeño beso en su precioss nariz.
- eres realmente linda cuando te despiertas.
Me atraía muchísimo y si mirada estaba distinta, como que se estaba permitiendo ser entendida. Acaricie su nariz con la mía y le di un beso. No iba a mentir besarla era una nueva puerta que se abría a mis sentimientos. Este beso era suave, tan sensible, parecía que estaba caminando en las nubes, su ternura y delicadeza me hacían ir a otro lugar. Termino dandome unos pequeños besos. Me sentía en una burbuja, dónde era solo mío y de ella el espacio.
Y mi estómago interrumpió el dulce momento, con su característico ruido. Ambas nos reímos.
- el también quiere participar.

- que dices, ¿podemos ir a almorzar. Quieres?

- dónde iríamos.

- vamos a la playa. Se que te gusta estar en ella.
Era tan atenta, yo buscando el amor por mucho tiempo y esperando que fuera como me lo contaron en los cuentos de hadas, para encontrarlo en una simple actitud.
Ella hasta modificó la manera de como comunicarme las cosas.
- ¿que paso?

- me encantaría si. Amo el mar.
Mi sonrisa era enorme. No iba a saber cómo borrarla. Se levantó de la cama y ya sentía la falta de su cuerpo cerca del mío, tomó de mi mano y me dejó el baño antes que ella.

- luiza no demoro ya regreso.
Me asusté, me acomode la ropa lo más rápido que pude y sali. Ella ya no estaba en el departamento.
Una angustia me invadió, no sabía ¿que hacer? ¿dónde fue, porque no me llevó?
¿Que debo hacer?
Fui hasta la ventana y no había ni rastro de ella. Me tomé de la cabeza, no esto no era posible, me había abandonado.
Se abrió la puerta. Me asusté y ella entro. Me puse a llorar, la situación me sobrepasó
- tranquila. Mírame. Tranquila.

- ¿porque me dejaste?

- disculpa, es que fui a comprarte unas gafas y una gorra para que no se te reconozca. Lo lamento vida, juró no volveré a hacerlo.
La abrace, no quería se alejará más de mi. Ella acaricio mi espalda.
- debí habértelo explicado. Fui una estúpida.

- no no lo eres. Solo quieres cuidarme. Pero yo si tú no estás muero de miedo. Debo intentar controlarme
Me levanto del suelo, limpio mis ojos, acaricio mi mejilla. Suspiró, busco la gorra.
- me gusta, ano las gorras
Sonrió preciosamente. Me dió las las lentes.

- debemos ir a comprar ropa mas larga. Porque fuera estás frío
Asentí.
- pero está vez solo iré contigo. Ya no volveré a alejarme de ti.
La abracé, ella volvía mi alma al cuerpo. Su mirada había cambiado, eso me produce más confianza en valen. Pero también me hablaba más.

INDIGODonde viven las historias. Descúbrelo ahora