El País De Las Perversiones

Termino el día de Alicia

Jimin

Cuando me di cuenta de que no eran las Alicias si no los conejos deje de chillar.

-¡¿Donde están las Alicias?!-

- Wonho no chilles-

Le dijo el profesor, los Dodos pasaron tristes por la puerta.

-¿Que ha pasado? ¿Por qué esas caras-

-No nos han dejado ir a ver a los Tweedles-

-Bueno a nosotros no nos han dejado ayudar a las orugas a encontrar su seta-

-Supongo que luego podremos verlo desde lejos-

Respondí un poco apenado me hubiera gustado ver también a los hermanos.

-¿Que le habéis hecho a Know? ¿Por qué tienes esa cara?-

Comenzamos a reír cuando vimos su cara.

-No te preocupes una mera duda existencial sobre su rol-

-¿Que? ¿Por qué? ¿Know dime qué te han hecho?-

-Nada déjalo, solo que tengo cosas que pensar-

Nuestras risas se escuchaban más fuerte. El hombre disfrazado de lagartija volvió de nuevo.

-Los señores Dodos deben acompañarme a esconderse entre los árboles hasta que les toque su turno por favor-

-Jiminie te sabes tu parte-

-Si si si-

-Me voy a memorizar los diálogos para mañana yo también quiero hacerlo-

Los chillidos de unos niños se empezaron a oír.

-Hay que darse prisa por favor salgan por la puerta trasera-

-Me voy, me voy, me voy, me voy, me voy-

Se fue corriendo J-hope delante de todos y los demás le siguieron.

Un montón de niños empezaron a llegar al claro y Jungkook y los demás tenían cogidos a varios de las manos con grandes sonrisas en su caras.

Cruce miradas con el y su dulce sonrisa de conejito salió mientras subía sus hombros. Era hora de empezar.

-¡MARIANA! ¡MARIANA!-

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Namjoon

Estábamos nerviosos ya habíamos inspeccionado todo a nuestro alrededor, algo empezó a moverse entre los arbustos y allí entre ellos salió mi worldwide handsome quitando cosas de su pelo y maldiciendo entre dientes.

-Te dije que deberíamos seguir por la izquierda pero la liebre loca decía por la derecha-

- Tú fuiste quien nos perdió saliendo corriendo sin escuchar las indicaciones y yo te seguí-

Los mirábamos esperando que dejaran de pelear, pero seguían.

- ¿Queréis un té?-

- Gracias cariño con dos azucarillos y tú Tae-

-Siempre igual que tú-

-Espera de me olvida algo importante-

-¿Puede ser lo que traes en las manos?-

Miró sus manos y parece que recordó el motivo por el que vino.

-¿Se puede saber por qué no llevas tú traje de oruga?-

-No quería que me vinieran con el en la universidad me hace muy gordo-

-Debe ser así y lo sabes-

-Ten cambiate y Yea-ji me ha dicho que si recuerdas la obra de teatro-