Seo Changbin.
El sanguinario señor Seo Changbin que se ha ganado el miedo y respeto por donde sea que pase.
Aquel hombre que desde sus inicios ya causaba miedo, que ahora causaba terror.
Aquel que siempre, donde fuera que lo vieran siempre se tensaban con su mirada fulminante y su porte de seriedad.
Por los numerosos actos sádicos que ha ido cometiendo de diferentes maneras, cualquiera pensaría que ese hombre no siente más que risa al ver a un muerto.
Y hasta cierto punto así fue. Changbin era tal y como todos lo describían.
O eso fue hasta que Yang Jeongin entró en su vida.
No sabe cómo fue que se logró encariñar de una manera que no había sentido nunca con nadie más que con ella.
Y es relativamente poco tiempo para según él, desarrollar algún tipo de sentimiento por ella, de una forma tan intensa. Él sabe que ella piensa igual que él.
Pero sí. A pesar de que resalten más sus actos sexuales en la relación, no quita el hecho de que siempre hubo algo de por medio. Después de un castigo estaban los mimos; después de un oral estaban las palabras lindas que le dedicaba; después de llegar de negocios que Jeongin siempre lo estuviera esperando con una sesión de besos preparada y muchos 'te extrañé' de por medio...
A Changbin le empezaba a gustar Jeongin. Toda Jeongin. Su hermoso rostro, su bellísimo cuerpo, su amabilidad, sus besos, sus mejillitas cuando éstas se ponían rojas, su voz, su forma de tratarlo a él y a todo el mundo. Es como si realmente ella fuera una masita, un amor de persona, un ser de luz. Alguien perfecta de quién Changbin no pudo evitar enamorarse.
Pero también algo cambiaba, en todo de él. Sus prácticas sádicas no se detuvieron del todo, pero en sí mismo era el cambio. Porque ya no se comportaba como lo hacía antes con los demás. No los trataba a todos como la mierda desde que Jeongin un día lo había regañado cuando escuchó la manera en la que le hablaba a una mucama.
Claro que pensaba él mismo que no iba a hacerle caso, pero, ya cada que hablaba con alguien inferior a él, no lo hacía con la misma arrogancia de antes. No sabía por qué, simplemente era eso.
Y aunque todo pareciera bonito y mejor no lo era para Seo Changbin.
Él ha rechazado tantos tipos de afecto por años y años. Ahora que lo tenía de parte de Jeongin le era bastante raro. Su personalidad así se había desarrollado. Porque podría decirse que en cuanto al concepto del amor romántico no lo tiene bien en claro. Sus experiencias sólo han sido carnales. Aun así, no todo el "amor" que experimentado ha sido así, porque sí conoció el amor.
Creció de un padre que le enseñó sobre el negocio pero que realmente amaba a su esposa y había amor en él. Changbin también lo amaba mucho.
Él estaba rodeado de personas que lo amaban desde siempre, pero simplemente su personalidad fue volviéndose cada vez más seria. No era para menos, pues de las miles de experiencias que tuvo en sus primeras veces cómo tratos, negocios, etc. Aprendió que en ese mundo sólo sobrevivían los más fuertes luego de ser traicionado por alguien quien creía conocer.
Aquella persona fue la culpable de la muerte de su padre. Gracias a él fue que, cuando Changbin sintió la sangre de su padre entre sus manos y manchar su propia ropa supiera que portaba con muchas debilidades de las que hicieron que su padre tuviera que ir a salvarlo en medio de un tiroteo y a consecuencia terminar muriendo por su culpa.
Se quedó solo por mucho tiempo después de eso. Toda su familia había muerto o había perdido contacto con él. No volvió a confiar en nadie de la misma manera que antes y realmente el amor no era algo que cupiera en su apretada agenda. Más que sólo revolcones con prostitutas o con Sheila.
Se podría decir que con la última tenía una relación complicada.
Todo comenzó una noche que suponía sólo sería de negocios con la mujer; pero entre coqueteos poco sutiles de su parte, la habitación subió la temperatura y terminaron entre las sábanas de la casa de la mayor.
Changbin supuso que sería como siempre. Una sola noche, pero se equivocaba. Porque desde que se había ido de su casa sin volverse a aparecer, ella no lo paró de buscar por donde sea. Hasta que se hartó de cambiarse de casa cada mes porque siempre lo encontraba y decidió enfrentarse a ella.
Todo terminó igual que el primer encuentro, a diferencia que esta vez, Changbin sintió menos deseo por Sheila que la primera vez.
Pero no se podía negar a cogérsela cada vez que ella aparecía justo después de un día con mucho estrés. Era, según él, su Juguete Antiestrés.
Pero desde hacía mucho más tiempo que sus encuentros eran menos frecuentes que antes. Y justo cuando conoció a Yang Jeongin esos encuentros se volvieron inexistentes.
Changbin siempre quiso que así fuera. Porque ya no quería relacionarse con ella nunca más, desde el principio siempre sólo quería negocios y se lo dejó bastante claro la segunda vez de su encuentro, no habría nada más que eso. Nada de mimos después, nada de citas y nada de sentimientos. Regla que Sheila rompió después de poco. Pero no se había solo enamorado.
Después de que Changbin rechazara sus sentimientos mil y una veces se obsesionó con la idea de que no era cierto, que en el fondo sí la amaba como ella a él.
Se comenzaba a comportar como si fuera la pareja de él. Visitándolo muchas veces, haciendo muchos favores por él, siendo mucho más pegada a él y, sobre todo, matando y amenazando a cualquier mujer que se interpusiera en su camino o que mostrara el mísero interés en Changbin.
Y claro, una de las víctimas de una amenaza fue Yang Jeongin. Lo supo Changbin desde el primer momento en que ésta hizo una inesperada visita a su casa y la dejó "a solas" con la menor.
Listo, cumplí, por cierto, tengo una historia Changin en mi perfil, por si les interesa, nos vemos el sábado.
Créditos de la historia a Stephen_Kats
ESTÁS LEYENDO
𝔻𝕒𝕕𝕕𝕪! - ℂ𝕙𝕒𝕟𝕘𝕚𝕟
FanfictionDonde para saldar una deuda con un mafioso importante, los señores Yang deciden entregar a su hija de 16 años, Jeongin, a el gran y sanguinario señor Seo Changbin. • Adaptación. • La historia pertenece a @Stephen_Kats. • Historia corta. • Changbin...