Siete vampiros...
Una cazadora...
La muerte de un ser amado...
Jinx esta acostumbrada a romper las reglas, a seguir su camino según su creencia. Fuerte capaz de valerse por su propia cuenta.
Jinx se acaba de mudar al pueblo más introvertido que ha...
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"Capítulo 18"
- Niño... - La voz de Amber atrae mi atención. Como siempre luce hermosa, con su despampanante cabello rojo, meneandose de un lado a otro. Lleva puesto un vestido en color guindo, el color hace resaltar su piel blanca. Sus labios delineados en un color oscuro y esos ojos grandes tupidos de pestañas brillan a la luz del día. Es fabulosa y bella, no cabe duda de que se ha conservado muy bien.
De inmediato la abrazo, huele tan bien, como de costumbre su rica fragancia entra por mis fosas nasales dejándome en absoluta tranquilidad. Le sonrió y ella me corresponde.
- Amber, cuanto tiempo - hace años que no la buscaba, desde la última batalla, dejé de buscarla. En parte porque tenía que olvidar, y porque deseaba volver a Corea.
Cos sus suaves dedos acaricia mi nuca, siempre fue tan calida, como una madre. Amorosa y protectora, nunca dejó de cuidarme -. Niño, que gusto verte... ¿dime que te trae por estos rumbos? - me observa un tanto confundida, pero a la vez con emoción -. ¿Y mi güero, dónde esta?
No es novedad que todos en la manada sabiamos sobre la relación que tuvo con Jimin, esa fue una relación muy extraña. Desde que los presente no se separaron ni un segundo. Era una atracción sexual bruta, teníamos que usar algún tipo de tapón en los oídos para no escuchar los gritos y gemidos sexuales que producían cada vez que tenían sexo.
- Si lo traía seguramente ustedes dos no saldrían de la habitación en un par de años... - esboce una media sonrisa y ella me dio un manotazo en el pecho.
- ¡Oye! ¿Porqué no me llamaste?
- No quise hacerlo, preferí venir a verte -. Le digo, mientras paso mi brazo por sus hombros para darle un abrazo tierno y afectivo.
- Sí claro, mucho amor he... - suelto una risita de burla -. Vamos a casa tenemos mucho de que hablar.
Caminamos por aquellas amplias calles de Londres, donde ahora todo es tan diferente, ahora la gente camina como si nada, hay enormes parques cubiertos de pasto, donde la gente suele sentarse hacer pigni. Las chicas ahora visten de manera liberal, un poco mas provocativas. Desde que llegue no he dejado de llamar la atención de todo tipo de mujeres. Sin embargo mi cabeza solo reproduce cada imagen grabada de Jinx. No la puedo sacar de mis pensamientos, y aunque intento, ella me persigue todos los días. Solo espero que Namjoon la esté protegiendo.
Llegamos a su casa, una residencia enorme. Esta situada en el centro de Londres. La casa tiene enormes patios con jardines verdes y muy hermosas flores. En medio de la entrada hay una fuente con una figura masculina, en una pose bastante peculiar. No me sorprende que Amber tenga eso en el centro de su casa, en realidad viniendo de ella, me puedo esperar cualquier cosa. No puedo evitar sorprenderme al ver lo lujosa que es su casa, con pisos de marmol y muebles contemporáneos. Muy elegante, como siempre le ha gustado. Seguimos por un pasillo que nos lleva a una habitación con amplias ventanas. Al parecer es un despacho. Esta lleno de libros y unos cuadros muy eróticos.
