Siete vampiros...
Una cazadora...
La muerte de un ser amado...
Jinx esta acostumbrada a romper las reglas, a seguir su camino según su creencia. Fuerte capaz de valerse por su propia cuenta.
Jinx se acaba de mudar al pueblo más introvertido que ha...
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"Capítulo 16"
La muerte es parte de la vida, es algo con lo que tenemos que lidiar desde que nacemos. En esta vida nacemos, crecemos nos reproducimos y al final morimos. La muerte no es otra cosa más que el fin de un ciclo, el fin de un cuerpo. Puede ser apacible, silenciosa, pero eso no significa que deba ser desastrosa, porque al final solo es un proceso de transformación.
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- Maldito hijo de puta... - vocifero el vampiro. Lo había tomado con fuerza por el cuello mientras Izaac, enterraba la daga de plata sobre su corazón.
- Estúpido chupasangre -. Le escupió. El Vampiro se esforzaba por soltarse de mi agarre. Pero esta vez fui más inteligente, rodeé su flácido cuerpo con mis piernas ejerciendo algo de presión y aunque eso seguramente no le dolió, al menos no podía safarzce de mí tan fácilmente
Despues de un forcejeo el vampiro comenzo a tambalearse, Zack le habia dejado una abertura desde el pecho hasta el abdomen. Casi me aplastaba sino fuera porque logré soltarme antes de que callara al suelo de espaldas. Se podía escuchar algunos quejidos saliendo de su boca. La sangre oscura que emanaba de su pecho cubrió por completo su delgado cuerpo. Un cuerpo escuálido, flacuchento y asqueroso. Al parecer no todos los vampiros poseen belleza. Y algunos sangraban mucho más que otros.
Nos aseguramos de que nadie nos viera y de inmediato encendimos fuego para quemar los restos. El alcohol me daba la adrenalina que requería para continuar con esto, me daba el valor que me incitaba arriesgarme a más. Estaba sintiendo una exquisita y deliciosa satisfacción al ver el cuerpo mutilado arder.
- Muere maldito perro... - lancé mientras pateaba la cabeza hacia las llamas del fuego en un acto de gloria.
Un grito agudo salió del interior del fuego, el cuerpo se retorcía de la misma manera que el de la chica Vampiro que Namjoon quemo la noche anterior.
Tomé la botella de cerveza que había dejado cerca del auto de Izaac y le di un trago, sentí mi garganta refrescarse. Me disponía a tomar un trago más cuando algo golpeó mi cabeza fuertemente. El golpe me hizo caer de bruces al piso, a lo lejos escuché la voz de Izaac en un grito algo desesperado.
- Jinx...
Luego todo se torno extraño. Puse mis manos sobre la nuca, intentaba buscar el chichon en la cabeza, me sentí furiosa al no darme cuenta por donde llego el golpe. Como pude me levante pero antes de hacerlo un hombre de cuerpo corpulento me tomó del cuello casi dejándome sin aire. Me alzó tan alto como le permitio su fuerza y me dejó caer al piso con una brutalidad, de nuevo me retorci de dolor. Buscaba desesperadamente a Izaac, sin embargo mis ojos no lo encontraban en medio de aquel oscuro callejón. Abrace mi abdomen para contener el dolor que estaba sintiendo.
