2 libro de « Itoshi sister. »
- ‹ 𝗔𝗡𝗚𝗘𝗟 : OF BLUE LOCK ?!
𝐈𝐓𝐎𝐒𝐇𝐈 𝐀𝐊𝐀𝐑𝐈 debe continuar su historia pero con un curso diferente, nuevas caras, nuevos talentos y sobre todo, nuevos rivales. Sí la liga Ne...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Era el día de las madres y no podía evitar sentirse algo triste porque su madre no valoraría ni el más caro regalo de su parte. De nada le servía esforzarse en conseguir algo bueno.
Recogió sus cosas, la liga neo-egoísta dio una pausa para ir a sus casas y pasar tiempo con su familia.
Akari sentía qué no valía la pena decirle ni siquiera un "felicidades" a su progenitora, pero decidio salir para comprar un bonito vestido.
Decidió comprar flores de igual forma, bajo algunas miradas de compañeros de Blue Lock.
Ella se mantuvo en silencio mientras se esforzaba en conseguir regalos lindos, qué sean de buena calidad y nada exagerado.
― Has de querer mucho a tu madre. ― Dijo la cajera, viendo el montón de regalos qué llevaba.
Akari se mantuvo en silencio durante unos segundos, manteniendo una línea recta en sus labios.
Pero, los curvó en una diminuta sonrisa mientras asiente.
Pasó de largo, yéndose por el mismo camino por el cuál había llegado. Camino todo aquél largo trayecto para entrar al gran edificio Blue Lock.
Pasó de largo por las puertas, había mucho silencio durante todos los pasillos.
― ¿Akari?, ¡Deberías estar en casa! ― Anri llamó su atención, acercándose.
Akari volteó rápidamente y sin perder tiempo, le extendió todos sus regalos.
― Feliz...día de las madres, Anri. ― La felicitó tímidamente.
No sabía cómo podía tomarse eso, ya qué la mayor se quedó callada.
Los ojos turquesas de la Itoshi miraron con dulzura los de Anri durante unos largos segundos mientras sonreía un poco.
― Akari...¡Muchas gracias! ― Agradeció con una gran sonrisa.
Ambas se abrazaron con fuerza, Akari cerró sus ojos mientras la calidez de Anri la hacía sentir tan viva.
Es la primer festividad de las madres que podía sentirse valorada y qué sus regalos no van directamente a la basura.
No cómo antes, ya todo eso cambió.
― Muchas gracias por todo, Anri. ― Agradeció de todo corazón, separándose del abrazo.
Aunque Akari no era la única sentimental en aquél momento, ya qué Anri no dejaba de llorar enternecida por aquél acto.
Ambas se miraron con una sonrisa para luego volver a abrazarse.
(...)
― ¿Akari? ― Preguntó Barou.
― Vine a dejarle esto a tu madre. ― Le extendió un pequeño regalo.
― ¿Eh? ― El pelinegro se encontraba desconcertado.
― No podía quedarme sin darle algo a tú madre luego de qué ella me regalará algo tan especial. ― Akari hizo qué Shoei aceptará el regalo.
El ojirojo se quedó desconcertado, ¿De qué regalo hablaba ella?
― Nos vemos pronto, Shoei. ― Se despidió, subiéndose al Taxi dejándolo con la curiosidad.
Pronto terminó apareciendo en el hogar de Meguru, dejándole un regalo a yuu.
Realmente le regaló a gran parte de la madre de sus amigos, cómo agradecimiento por engendrar a gente tan increíble.
Decidió marcharse de la última casa, hasta qué los llamados con su nombre la detuvieron. Volteó para ver de quién se trataba
La mano de Anri sostuvo su muñeca para jalarla hacia ella.
― Venga, vamos a cenar. Seguro no has comido nada ― Akari se desconcerto durante unos cortos segundos.
Pero luego sonrió mientras su corazón latió con fuerza. Dejándose llevar hasta el restaurante más cercano, dónde ambas empezaron a comer.
Entre dulces risas llenas de una perfecta melodía, charlas entretenidas y una gran cena pasó el resto de aquélla noche.
Todo infante merece una madre pero no toda madre merece un infante.
A veces solo es cuestión de tiempo para encontrar ese cariño tan materno, lleno de sinceridad y calidez.
Madre no es qué engendra, sino quién ama y cuida.
Happy mother days. aquí todavía no es el día de las madres pero iwal hice el especial de Itoshi Angel. uvu
