Capítulo 12 ♤ Miedo

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¿Qué es mejor, el orgasmo o el camino que se atraviesa para llegar a él?

-Crowley

Aziraphale saltaba sobre el miembro de Crowley en busca de su propia satisfacción, estaba aferrado a su espalda sintiendo las manos de Crowley encajandose en sus muslos. Las notas terrosas y amaderadas de su perfume se mezclaban con el olor a cloro de la alberca, y el sonido de sus gemidos y jadeos quedaban tan bien con el canto de los pájaros, tiempo para degustar.

-Soy adicto a ti- murmuró Crowley muy cerquita de su oído -Solo quiero follarte a ti

-No te creo nada agh- jadeó Aziraphale con dificultad sintiendo el pene de Crowley entrar de una forma más agresiva.

-Amo que digas mi nombre. ¿Quieres hacerme un favor?

-Lo que sea

-Correte para mi, ¿sí? Dame la satisfacción de saber que eres solo mío

-Tuyo- gimió sintiéndose en la cúspide del placer, su cuerpo ardía en llamas, sentía que ni siquiera él agua fría en la que estaban sumergidos podría apagar el fuego sobre su piel. -Solo tuyo

Y entonces el tan anhelado orgasmo los alcanzó, primero a Aziraphale y muy poco después a Crowley, solo el sonido de sus respiraciones agitadas y el agua rompiendo contra los bordes de la alberca. Dos cuerpos, dos corazones, un ganador.

Aún permanecía aferrado a su cuerpo, sus manos en la espalda y su cara escondida en su cuello embriagandose de ese exquisito aroma que se le adhería a la piel, esperando a que su cuerpo se recuperara de alguna forma.

-Pero tu no eres mío- respondió Aziraphale en un susurro quedito con tono melancólico y resentido.

Crowley sintió de golpe el cambio de temperatura, de estar en la cima, cayó en picada cuesta abajo y se quebró en el suelo, se separó de Aziraphale sin darle la cara, se dio la vuelra y buscó sus cigarrillos en la orilla de la alberca para poder encender alguno mientras Aziraphale lo miraba con resentimiento y coraje, fingiendo que estaba arrepentido de lo que dijo.

-Lo siento. No debí decir eso

Crowley no le quiso dar mucha importancia, sentía su sangre hervir por el comentario, tomó el encendedor y prendió su cigarro aspirando para luego soltar el humo en la cara de Aziraphale.

-Háblame de ti

Aziraphale soltó una risita irónica, bajó la cabeza molesto por la manera en la que lo había ignorado. Quería que lo negara, pero su cordura aún era más fuerte que su sentido de pertenencia, después de todo es solo un juego, el perdedor es quien se enamora.

-¿De dónde vienes? ¿Tienes hermanos?

-Soy de Newport en Reino Unido, y sí, tengo dos hermanos

-¿Y te llevas bien con ellos?

-Claro, pero no los veo mucho, siempre ha sido así. Crecí es internados- soltó un gran suspiro, a veces se cuestionaba si realmente eso había sido lo mejor "para él" y no para Donald.

-¿Lo disfrutaste? La verdad suenas algo... pensativo cuando lo dices así

-Bueno, fue lo mejor, supongo, pero era prácticamente un niño y estaba muy lejos de mi casa, me perdí de muchas cosas no solo de mi familia... de vez en cuando pienso cómo hubiera sido todo si no me hubiera ido- una sonrisa triste apareció en su rostro- aunque haber estudiado en Oxford no es cualquier cosa

-Espera... ¿Dijiste Oxford? No puede ser, yo también estudié ahí- fue como si una chispa de emoción inundara a Crowley -Yo fui una leyenda en esa escuela ¿cómo fue que nunca me topé contigo?

Obsesión y Lujuria {AziraCrow}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora