Capitulo 45

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Después del desayuno, tanto Lewin, como Matt y los otros niños fueron llamados de imprevisto hacia el espacio recreativo que tenían en una de las múltiples habitaciones

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Después del desayuno, tanto Lewin, como Matt y los otros niños fueron llamados de imprevisto hacia el espacio recreativo que tenían en una de las múltiples habitaciones. Un espacio que usaban la mayoría del tiempo para pasar el rato que tenían libres, estudiar, o simplemente cuando el clima fuera estaba demasiado horrible como para salir.

Una vez allí, todos los niños de la primera generación pudieron conocer un nuevo rostro no antes visto dentro del centro, quien había ido a visitarlos para llevarles una enorme sorpresa.

"Bien niños. Todos formen una fila frente al señor" Una de las guardias los organizó y mientras lo hacía, el señor anteriormente mencionado tomó al atrevimiento de presentarse ante todos

"Buenos días niños. Mi nombre es Víctor, y soy el dueño de la biblioteca que está ubicada en el centro de Sina." Expresó con total emoción y entusiasmo por estar ahí en ese día "Vine porque me permitieron traerles un par de libros que sé les van a gustar"

Víctor dio una cálida sonrisa y pronto, comenzó a repartir un par de libros a todos los pequeños. Eran cuentos, en su mayoría infantiles y aptos para sus edades. Algo que sabia no leían dentro de ese lugar.

Era la primera vez que hacían algo como eso, y solamente pudo suceder porque Víctor estuvo durante varios meses pidiéndole a todos los padres importantes de los niños permiso para poder hacerles ese tipo de presentes a sus hijos.

Algunos no aceptaban, simplemente no tomándole importancia, pero otros por su parte aceptaban con gusto, emocionados por saber que sus hijos recibieran un presente adicional del que ellos solían entregarles durante sus visitas.

Todos los niños de seis años aceptaron el presente, aparecieron unas pequeñas sonrisas en sus labios cuando miraban los dibujos animados pintados con acuarelas con sumo cuidado. Soltaban suspiros de sorpresa al mirar con atención a los detalles y saber que por primera vez miraban algo como eso.

"¿Les gusta?" Víctor no dudó en preguntarles. Algunos fueron hacia él sonrientes

"¿Usted los escribió, señor?" Pregunto uno de ellos.

Víctor rascó su nuca y soltó una carcajada "Lo hice de hecho. Me tomó bastante tiempo, pero ahora sé que valió la pena"

No mentía.

Durante todas las noches, de estos últimos años, Víctor estuvo con una meta en mente. Una de la cual sabia le serviría para lo que en realidad deseaba dentro de su corazón. Por lo que, sin descanso, durante muchas lunas el hombre escribía y dibujaba en aquellas hojas de papel, y así con el pasar del tiempo fue capaz de crear en total 100 libros infantiles totalmente diferentes. Con historias, y personajes originales.

Todos escritos y dibujados por sus propias manos.

Ver la sonrisa de todos los pequeños lo inundo de una calidez que supo ansiaba obtener en ese momento. Los presentes se sentaron uno con otros, leían y sorprendentemente comenzaban a reír imaginando a los personajes dentro del libro haciendo lo que las escrituras mencionaban. Cayéndose, saltando, corriendo, entre más cosas.

EXTINCION - 𝘌𝘳𝘶𝘳𝘪 𝘖𝘮𝘦𝘨𝘢𝘷𝘦𝘳𝘴𝘦Donde viven las historias. Descúbrelo ahora