Había sido tan repentino, había sido una llamarada, la tensión entre ellos había explotado y simplemente no habían podido resistirse a ella.
No se conocían del todo, realmente eran 2 desconocidos ardiendo en pasión cuando sus labios se tocaron por primera vez, cuando las manos buscaron desesperadas liberarse del deseo que por días les había robado la atención y el sueño.
El equipo de teatro de Hyunjin había estado buscando donde practicar para su siguiente presentación y Felix solo necesitaba un pequeño rincón para hacer sus tareas mientras llegaba la hora de tomar la siguiente clase.
Ninguno creyó que la presencia del otro sería un problema, mucho menos cuando el chico Brownie comenzó a llevarles bocadillos cada que se topaba con ellos en el aula vacía que ahora compartían por necesidad.
Las semanas lograron que, de solo oírlos, Felix aprendiera los diálogos de la pequeña obra que querían presentar. Era sencillo porque ellos eran solo 4 y la puesta era simple, la presentación apostaba sobre todo la interpretación de los chicos, por lo que los diálogos no eran demasiados.
Algunas veces, cuando se sentía saturado de sus tareas, se sentaba para ver la representación y aunque la sabía de memoria, nunca dejaban de sorprenderle la pasión que ponían en sus actuaciones, sobre todo Hyunjin, el más callado de ellos.
En esa ocasión una de las chicas había faltado y cuando Felix escuchó que cancelarían el ensayo a causa de ello, se ofreció sin dudarlo, quería ayudarlos aun cuando no se lo habían pedido. Sin encontrar ningún inconveniente en ello, mucho menos cuando demostró realmente haber aprendido los diálogos correspondientes, realizaron su ensayo, con el rubio siendo la pareja del Hyunjin en su papel de Luna, la amante del protagonista.
Fue gratificante poder estar en la piel de alguien más, pudo sentirlo pronto el chico, emociones que jamás se permitiría en la realidad eran posibles en ese momento, la confianza y la seguridad de la fémina que representaba se sentía tan bien y pronto no solo repitió los diálogos, se encontró a si mismo representando la sensualidad de la mujer que buscaba en el hombre casado algo más que una relación fugaz.
Creyó que eran parte del papel las emociones que el otro chico provocaban en él, sus ojos que se perdían en los carnosos labios, los suspiros que abandonaban su boca cuando Hyunjin rozaba su mejilla en la escena de su despedida, su cuerpo estremeciéndose cuando el otro le miraba, como si pudiera ver dentro de él...
No obstante, conforme los días pasaban y la chica no se presentaba, las cosas comenzaron a ser más difíciles para él.
Fueron 4 días, cuatro días que como nunca, comprendió a la mujer que interpretaba, la obsesión por aquel hombre, la necesidad, la locura unida al deseo, haciendo que odiara que solo fuera un ensayo, que no existiera la necesidad de actuar aquel beso mencionado.
Cuando la chica volvió, la odio más que nunca, y sin poder controlar sus emociones ese día, se fue del lugar para no tener que escuchar como Hyunjin decía aquellas frases a alguien más que no era él.
Los siguientes días siguió ahí, porque ahora no sabía estar tranquilo si no escuchaba su voz, y su ansiedad no mejoró cuando supo que pronto, dejarían de ir a practicar aquel lugar.
Por días, se quedó más tiempo del necesario, como si esperara que en los minutos que él y Hyunjin se quedaban a solas, algo simplemente pasara.
- Hyunjin... - le llamó en medio de la ansiedad, ese día el chico le daba nuevamente la espalda para salir, dejándole a solas con sus emociones.
El mayor se detuvo y se giró, mirándolo unos segundos antes de acercarse. No dijo palabra alguna, le miró de forma intensa, como cuando en los ensayos le decía en un susurró que lo suyo había terminado.
ESTÁS LEYENDO
Hyunlix - Inktober 2023
Fanfic31 historias independientes del Hyunlix para participar en el Inktober 2023