Destinados a brillar

Momento incómodo

"Adiós Narel" me dicen los del equipo de Nathan, perdón Nat y yo les sonrío y les devuelvo el adiós. Estoy muy nerviosa no sé cuando va a salir Nathan y cuando salga no se que le voy a decir va a ser tan incómodo. Del vestuario salen James, Miguel y Nathan, es decir, Nat, bueno por lo menos no va a ser tan incómodo ya que no va solo.
-¡Hola rubia!-Me saluda James tan alegre como siempre
-Hola Narel- me saluda ahora con una sonrisa Miguel
-Hola chicos- les saludo con la mano
Miro de reojo a Nathan, Nat, está serio, muy serio y nunca le había visto tan serio, Nathan se da cuenta de que le estoy mirando
Para no darse cuenta si parece que estáis conectados
Nat me mira y vuelve a fruncir el ceño
-The has quitado la camisa- lo dice en un tono bajo pero suficiente para escucharle bien
Miro la camisa, la tengo en el brazo doblada
-Sí te la iba a devolver
-No, no hace falta quédatela
-¿Enserio?
-Si
-Pero es tuya- silencio incómodo Nathan, ósea Nat, iba a hablar cuando James le interrumpe y eso hace que ambos nos demos cuenta de que no estamos solos
-Bueeeeeno chicos, Miguel y yo nos vamos a ir os dejamos solos- comenta James dándose cuenta de que necesitamos privacidad
Miguel se acerca para darme un abrazo y James me choca los cinco
-Adiós tronco- dice Miguel mientras se hacen el saludo ese que hace la mayoría de los chicos
-Tío acompaño a Miguel a su casa y luego paso por la tuya
-Vale-responde Nat
Bien nos hemos quedado solitos, que bien, súper bien (por si no lo notas estoy siendo sarcástica). Y de nuevo silencio incómodo así que me apresuro y añado
-Toma- le doy la camiseta, él se queda mirándola unos segundos pero no la coge
Venga cógela para que podamos acabar con esto e irnos a nuestras casas
-Es tuya
-¿Qué?
-Si, es para ti
-Gracias
Momento incómodo, otra vez, universo haz algo
-Bueeeno me debería ir- vuelvo a hablar yo
-Si
-Si- otra vez silencio incómodo
Cuando voy a girarme para irme es cuando habla
-Te acompaño
-No, no hace falta puedo ir sola
-Ya pero quiero acompañarte
-Pero puedo ir sola, además no quiero causarte ninguna molestia
Ya suficiente te he causado
-No me causas ninguna molestia
¿Por qué no pilla la indirecta de que quiero ir sola? Además ¿Soy la única que se siente incómoda por lo de antes?
-Narel, ¿Entonces?-vuelvo a la realidad
Poco a poco me derrito
-Pero va a ir James a tu casa y tienes que estar para cuando llame al timbre
-Tranquila, James tiene llaves de mi casa
-¿Tiene llaves de tu casa?
-Si
-Bueno pues vamos entonces- Si el camino a mi casa es igual de incómodo va a ser muy largo
El resto del camino fue en silencio, ya estamos llegando ami portal cuando Nathan, Nat abre las galletas que le di
-¿Quieres una?
-No gracias son para ti- muerde una galleta- ¿Te gustan?
-Si, están bastante ricas
-Son parecidas a unas de mis galletas favoritas solo que las galletas de Carla es una receta modificada
-Pensaba que exagerabas- me da en el hombro y yo sonrío
-Ya ves que no, Nat
Él se para lo que hace que yo me paré, me mira a los ojos y ¿suena enfadado?
-¿Enserio?
-¿Qué?
-¿Ahora me llamas así?
-¿Cómo?
- Nat
-Ese es tu nombre
-No para ti
-¿Qué?
-Tú me llamas Nathan
-¿Y no puedo llamarte Nat?
-¿Quieres llamarme así?
No
Vuelve a hablar- ¿Qué te pasa?
-¿Estás enfadado?-vale por su reacción no se esperaba esa pregunta
-¿Qué?
-Sí, por lo de antes- su mirada se vuelve confusa- en los vestuarios- cae en la cuenta pero su mirada se vuelve aún más confusa- por haberme apartado cuando estabas a punto de- silencio- ya sabes- miro el suelo

Tú di que si, así como no vas a perder la poca dignidad que te queda

-Besarte- habla por fin
Sigo con la mirada fija en el suelo como si fuese lo más interesante, él se acerca a mi y me pone un dedo en el mentón para subir mi mirada a sus ojos y continúa hablando
-¿Es por eso por lo que estás distante?
-¿Qué?, noo- pongo un tono muy agudo
Nathan enarca una ceja
-Vaalee
Él niega con la cabeza dando a entender de que no está entendiendo el por qué, así que tengo que hablar de nuevo
-Querías hacerlo pero yo no...- intento buscar las palabras correctas sin decirle que no he besado a nadie en mi puñetera vida y sonar más ridícula de lo que sueno ahora- No, no, no
-Querías- termina por mi y se separa, ¡No se piensa que no me gusta!, bueno no me gusta (risa nerviosa)

Claro

Por donde vamos, ah si por intentar dejar mi orgullo a un lado, cada vez que lo intento dejar a un lado acaba fatal como cuando le escribí a Ignacio después de que él me dejará en visto y jamás contestarme, el día de los enamorados y luego el desgraciado me dejó en visto, cobarde, bueno ese no es el caso.
Como diría Jack Ross "mis traumas mis chistes"
-No, Nathan no es eso- vuelve a buscar mis palabras de nuevo
-¿Entonces?- dice confuso
-Me puse nerviosa, ¿Vale ?
-¿Nerviosa?
-Si, nerviosa- vuelvo a agachar la cabeza
-Oh, ya entiendo
-¿Lo entiendes?
-Si, ¿Nunca...?
-Nunca- le corto
Él sonríe divertido- Así que iba a ser el primero- sube y baja las cejas
Nunca pensé de que iba a estar hablando de mi nula vida amorosa con un chico que encima me gusta, quiero decir que no me gusta

Claro

Nathan es una mala influencia para mi conciencia

Puede ser

-¡Uf como te odio- le empujo por el pecho y él se ríe. Rápidamente me coge de las muñecas y me atrae hacia él y otra vez estamos tan cerca que siento su respiración. Dice serio
-Narel
-¿Si?
-No estaba enfadado- Ah eso casi se me había olvidado- Es más jamás me enfadaría por eso, si no querías no pasa nada, pasará cuando tenga que pasar- me acaricia con el pulgar la mejilla
Asiento con la mejilla mientras me muerdo el interior de la mejilla- Estúpido
Nathan se ríe- ¿Qué he hecho ahora?
-Todo eres perfecto- él se ríe y en el momento en que mis palabras han salido por la boca me he arrepentido al instante, Nathan sube las cejas
-Así que te parezco perfecto, eh
-Uf, eres insoportable- me separo de él aunque en realidad me encanta que me toque, de otra persona no me gustaría pero que Nathan lo haga me encanta.
-Pero admite que te gusta.
Yo sonrío de lado y niego con la cabeza divertida retándole con la mirada- Antes muerta Nathan- y abro la puerta del portal y entro, todo esto sin perderle de vista.
-Luego te llamo
-Uf, no sé voy a estar tan ocupada, pero podré hacer un hueco
Nathan se ríe y yo cierro la puerta y me meto en mi edificio