8. REVELACIONES

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Kyle

—Ese coche… ¿De quién es ese coche, Emma? —a Styles le han suministrado algunos calmantes para el dolor y se ha quedado dormido casi al instante. Muevo las piernas inquieto, sin ser capaz de mirar a la chica que está sentada a mi lado en este enorme y blanco pasillo. Odio los hospitales. Me traen demasiados malos recuerdos.

Emma no responde. 

—¿De quién… de quién es… ese coche? —formulo de nuevo la pregunta pero ningún sonido sale de sus labios.

Tengo la cabeza ardiendo. Me levanto de un salto, la ansiedad hirviendo en mis venas. Maldigo en voz baja, la palabra sale como un gruñido gutural. Recorro a grandes zancadas el interminable pasillo, el eco de mis pasos resuena en la quietud del hospital. Las paredes blancas, tan asépticas y frías, me oprimen. Camino hacia el baño y por el camino me choco con un hombre que sale limpiando sus gafas. Estas caen al suelo y uno de los cristales se rompe. Levanto la mirada y con un hilo de voz me disculpo. Le devuelvo las gafas y me marcho de ahí. Me encierro en el cubículo del fondo.

No entiendo por qué ha pasado esto, ese coche que nos seguía, que Emma dijo no conocer… sacando a Styles de la carretera. Suena tan surrealista… Respiro hondo y después de unos minutos salgo del baño. Camino a paso decidido hasta la habitación de Styles, tratando de no mirar a la chica que me observa con lágrimas en los ojos. Me siento en una de las sillas y ella imita mi acción manteniendo las distancias, cosa que agradezco. Saco el teléfono y abro el chat de Emma. Sin pensar empiezo a escribir.

"¿Por qué me mentiste? Ese día en la cafetería te pregunté si conocías el coche que nos estaba siguiendo. Te pregunté más de una vez qué era lo que estaba pasando y decidiste ignorarme. Te pregunté más de una vez, de qué conocías a Aiden y evadiste la pregunta. No aguanto más está situación, Emma. Yo he sido sincero contigo cada día desde que nos conocimos. No entiendo por qué tú no puedes ser sincera conmigo."

Por el rabillo del ojo veo su expresión al leer el mensaje. Me mira y abre la boca para hablar, sin embargo, al momento rompe a llorar. Mi corazón se encoje al ver sus bellos ojos verdes oscurecerse ante la tristeza. Lucho contra el impulso de estrecharla entre mis brazos. Necesito información, necesito las respuestas que ella no me está dando.

Lentamente su respiración recupera la normalidad y con las mejillas coloradas y llenas de lágrimas empieza a escribir. Sus dedos tiemblan mientras teclea en el teléfono. Ella levanta la vista, y en sus ojos veo el reflejo de mi propia confusión.

 Los minutos pasan y no deja de escribir y escribir. Me levanto de la incómoda silla azul aún con el móvil en la mano y empiezo a andar de un lado a otro intentando con todas mis fuerzas ser paciente. Ella empieza de nuevo a llorar cuando levanto el teléfono y entro en su chat sintiendo el miedo inundando mi corazón. 

"Lo siento muchísimo, yo no quería que pasase nada de esto, solo intentaba protegeros de mi estúpido ex novio. Me amenazó con haceros daño a tí y a los que te rodean, si no ponía distancia entre tú y yo. Si no me alejaba yo, él haría que te alejaras tú. Por eso me distancié así. Nunca quise ignorarte, se me rompía el corazón cada vez que te veía, pero tenía miedo. Tenía mucho miedo, Kyle.”

Levanto la vista al techo y trago saliva. Aprieto la mandíbula antes de seguir leyendo.

“Luego, con lo de Aiden… yo… lo conocí cuando empecé a ir a terapia grupal hace unos meses, no te lo quería contar porque cuando descubrí que era tu hermano pensé que no debía inmiscuirme o que te sentirías mal al respecto, no sé. Tampoco quería hablar de la razón por la que empecé a ir, ni siquiera se lo he dicho a mi mejor amiga. Aiden… Él no hablaba mucho sobre sí mismo, lo único que sé es que se arrepentía de no haber estado ahí para alguien. No concretó más. Se arrepentía de no haber protegido a esa persona. Decía que cada segundo del día sentía no merecer seguir respirando. Nunca dijo más. Nos volvimos algo así como amigos y voy a visitarle de vez en cuando para ver cómo se encuentra y ese tipo de cosas. Yo no quería mentirte con todo esto y muchísimo menos hacerte daño. Espero que puedas perdonarme algún día." 

El Nirvana De KyleDonde viven las historias. Descúbrelo ahora