CAPITULO 21

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Este día era muy especial para mí

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Este día era muy especial para mí. Me hice un corte de cabello, me compré ropa nueva y lustre mis zapatos dejándolos como espejos. Me miré y sonreí con el resultado. Sin pensarlo mucho, salí hacia la calle, me dirigía al centró de Gangnam, pues ahí vería a Bala. Quería ver el nuevo acuario de la ciudad, por lo que me dijo, le gustan los tiburones.

Admito que me dió miedo cuando la escuché por primera vez. Pero para gustos, hay de todo. Llegué y la busque con la mirada pero no la veía por ningún lugar, hasta que sentí como tocaron mi hombro e inmediatamente me gire y.... vaya.

Estaba demasiado hermosa, lucía un bonito vestido color azul pastel, descubierto de los hombros señido a lo caido, zapatos bajos cerradoscolor negros y su cabello era bastante largo y ondulado. En el se encontraba un moño del mismo color del vestido. Collar aperlado y con un tono natural en su rostro. Demasiado perfecta.

──¿M-... me veo mal Soobin?

Me di cuenta que la estuve mirando demasiado, así que desvíe la mirada y carraspe un poco. Frotando mi nuca con nerviosismo.

──Te vez.... muy bonita.

Fue inevitable no ver su leve sonrojó en sus mejillas. Ese color carmesí que le daba un toque más de ternura. La tome de la mano, haciendo que me mirara confundida y asustada diría yo.

──Es para no perderte──Dije de inmediato──La ciudad es muy grande.

Baje la mirada avergonzado, soy tan torpe. Por suerte, ella comprendió y nos fuimos caminando hacia el acuario, en todo el camino veíamos a todas las personas conviviendo en familia, lo cual me hizo recordarla. La tristeza me invadió y note que Bala se sentía igual. Por alguna razón, pasamos por un pequeño parque en el que yo y mi hermana jugábamos mucho.

Entonces recordé que en medio de ese parque, había un árbol gigantesco que aún seguía ahí. Pero ese terrible recuerdo me invadió. Fue cuando un perro agresivo iba a atacarme y en mi lugar, atacó a mi hermana, mordiendole una pierna. Recuerdo esa vez que fuimos a emergencias, ya que casi pierde la pierna por protegerme. Desde entonces, siento que tengo una gran deuda con mi pequeña bola de masa. Era tan regordeta.

Sonreí al recordar ese último apodo, tal vez es por eso que siento una gran conexión con Bala, por qué me recuerda a ella. Salí de mis pensamientos y observé que aún seguíamos ahí, mire a Bala y ella seguía mirando el gran árbol pero, no tenía ninguna reacción. Moví nuestras manos captando su atención.


──Vamonos, se nos hace tarde.

Solo asintió y nos dirigimos al eterno caminó hacia al acuario.



[...]



Por fin llegamos, primero fuimos a ver a los tiburones. Parecía una niña pequeña, su cara pegada contra el vidrio. No sé cómo ella lograba apreciar una belleza en esos animales, respeto la vida de cada ser que habita este planeta pero.... De verdad quería entenderla.

“Ellos son seres incomprendidos por la humanidad, son iguales a mi.”

Si, esa fue la única explicación que me dió. De ahí, fuimos a ver las orcas, después los cocodrilos y al final pasamos por un gran túnel donde nos rodeaban tortugas, peces de diferentes tamaños colores y especies. Al salir del acuario, había una cafetería, así que decidimos descansar ahí y tomar un poco de café helado.


──¿Te divertiste?.

──Todo es muy bonito Soobin, gracias por traerme a este lugar.──Me sonrió levemente──Jamás había venido a estos lugares.

¿Jamás?

──¿Por qué dices eso?.──Desvio la mirada y solo jugaba con el popote de su malteada──Bala... ¿dije algo malo?.

Negó y suspiró con frustración. De nuevo me miró y me sonrió pero sin mostrar los dientes. Bebimos lo que ordenamos y nos fuimos hacia el centro de Gangnam, todo el camino envuelto en un silencio fatídico, creo que está vez fui más entrometido de lo normal. Tome la mano de Bala a lo cual, me miró sin expresión.

──Se que fui imprudente y discúlpame.

Se soltó de mi mano y se acercó un poco más a mi, robando el espacio que había entre los dos, acortandola. Y sin esperarlo, me abrazó. Podía sentir sus pequeños y delgados brazos rodear mi cadera. Pegando su mejilla en mi pecho y pudiendo sentir su respiración.

Me quedé perplejo. Ya que no reaccionaba. Pero sin darme cuenta, yo la estaba rodeando con mis brazos. Era algo más que una conexión, podría jurar que mi corazón revoloteaba y mi adrenalina subía como loca. Ese calor que podría jurar emanaba de ambos.


──Eres tan cálido.

Y se aferró más al abrazó. Podía sentir sus emociones. Pero el momento no duró mucho, ya que un grito de rabia nos separó.


──¡Soobin!

Eunha. Estoy salado... Y colgado. Olvidé por completo la cita de hoy.



BALA || IMAGINA CON JEON JUNGKOOK Donde viven las historias. Descúbrelo ahora