Capítulo 50: Tu vida, no terminará como la mía, haré lo que tenga que hacer

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ADVERTENCIA: MUERTE DE PERSONAJE

No recordaba cómo era el mundo afuera de su encierro, todo era tan cuadrado y blanco, ordenado, limpio, aveces se aburría, pero no le dejaban decirlo demasiado para cuando algo nuevo llegaba a él para hacer.

Al inicio era divertido incluso, pero, día tras día crecía, se hacía más viejo, más alto, las horas pasaban en su celda dorada, donde tenía todas las comodidades que un adolecente podría querer, una cama cómoda, libros, juguetes, un patio interior que podía explorar, comida, y compañia de vez en cuando.

No debía quejarse, porque eso sería desagradecido con las personas que lo habían "salvado" o eso era lo que le decían constantemente, que lo habían rescatado de un horrible futuro, así que agradecía, cuando eres un niño dices gracias y porfavor, pero cuando empiezas a creer, ese punto entre la pubertad y la adolecencia empiezas a dudar de lo que los demás dicen, y crees que todos estan en tu contra, él no podía pensar en esas cosas porque ¿Y si lo abandonan? No recordaba nada afuera de la puerta de metal que se abría los Lunes, los miércoles, los viernes a las 4 de la tarde, pero estos últimos meses había sido diferente y nadie le decía nada.

Le dejaban solo por más días, y cuando entraron no era Fuyuka Kudo, era Michiya, hace tanto no le veía que se emocionó, se emocionó tanto que cumplió a la pie de la letra el juego, ese que siempre jugaba Fuyuka con él, pero, ahora el juego fue diferente;

"Esta vez no soltarás la lanza hasta que yo te diga"

Así que estaba ahí, mirando el tablero, sosteniendo la lanza con su mirada, sosteniendo su respiración, en silencio, solo le habían ido a alimentar, el juego se volvió pesado, cansado, quería levantarse ¿Porque no iban a decirle que soltará la lanza? No era divertido, quería dejarla caer ya, estaba agotado. Tanto que no escuchó el ruido atras suyo hasta que alguien se sentó a su espalda

–Tsurugi – Le saludaron, una voz que recordaba, sonrió, pero siguió mirando la lanza para no dejarla caer – No la dejes caer, la debes desaparecer, no la dejes caer, solo, muevela o deshazte de ella – le ordenaron y el asintió, haciendo lo pedido – Estas enorme... –

El menor se giró y alargó más su sonrisa al ver a su foco de admiración justo ahí, Goenji Shuuya había ido a visitarlo, no podía estar más contento, sin embargo...

–¿Qué hace aquí? – preguntó el niño confundido – Kudou-chan dijo que estaba en otro lugar – comentó lo poco que sabía

– No me dijeron que tu eras el caballero oscuro hasta hace unos días – le comentó, jalandolo en su dirección para abrazarlo, pegando al menor contra su pecho para que escuchara su corazón – Voy a sacarte de aquí – prometió

–Me gusta aquí... – mintió

–Bueno, aquí estas seguro de lo horrible que es la sociedad en la capital, pero, quiero llevarte con un amigo, para que los Kudo dejen de usarte como a un arma – el menor le abrazó de vuelta por ello – Lo que pasó con Tenma no fue tu culpa Tsurugi, nada de eso fue tu culpa, Fuyuka te estaba usando para matar personas que ellos no pueden controlar, pero tu solo eres un niño, no tienes porque hacer el trabajo de los adultos–

–Pero... ¿No es un camino para ser como usted? – preguntó levantando la mirada

–No serás como yo – informó, y pudo admirar como la carita del puberto cambió a cierta tristeza –Serás mejor – animó con una sonrisa, que le contagió al otro – No voy a permitir que Kudo Michiya y Yi te hagan lo que me hicieron a mi – Se levantó, cargando al menor.

–¿Lo prometes? – preguntó el pequeño de piel pálida por todo el tiempo lejos de la luz natural

–No más mapas donde tengas que matar a desconocidos con tu lanza – el otro alargó una sonrisa – No más paredes blancas con puertas siempre cerradas. Si no es tu deseo, no tendrás que dañar a nadie más ¿de acuerdo? –

Ingranazhe (Varias Parejas) INAZUMA ELEVEN FANFIC AU YAOIDonde viven las historias. Descúbrelo ahora