Abril Adrinette.

Familia encontrada.

—Me encanta venir a tu casa, Mari —dijo Adrien mientras dejaba las galletas en el horno —. Amo pasar tiempo contigo y tú familia y amo cocinar, o bueno: aprender —soltó una leve risa a la cual Marinette se unió,  eso hizo que el rubio se sonrojara.

—No te pongas así, no eras tan malo.

—¿Qué no era tan malo? —Adrien rodó sus ojos —, la primera vez que hice galletas, parecía que había hecho un monstruo, ¡la masa se veía horrible! Y aún así tú querías probarlas.

—Se veían mal, pero podían saber bien.

—O podían darte una indigestión, no podíamos arriesgarnos.

Marinette rió y besó la mejilla de su novio con ternura.

Después de eso, salieron de la cocina y fueron a la Panadería. Ayudaron un rato y después se sentaron para estudiar, las clases ya habían iniciado y aunque ahora estuvieran en salones distintos, ellos seguían estudiando juntos.

—Batidos para los estudiantes aplicados —Tom dejo dos batidos en la mesa. Ambos agradecieron, estudiar siempre daba mucha sed —. ¿Necesitan ayuda con algún tema? —preguntó antes de irse —, ¿ven los mismos temas o cosas distintas?

—Por suerte son los mismos temas, solo que no tenemos el mismo horario, las cosas cambiaron —respondió la azabache.

—Sí, el destino quiso que no estemos en el mismo salón —Adrien hizo un tierno puchero. Marinette acarició su hombro.

—Pero son novios y se aman, no importa que no estén en el mismo salón, pueden seguir viéndose y recuerda que siempre serás bienvenido aquí, Adrien —le recordó. Adrien agradeció y Tom se fue para seguir trabajando.

Adrien mostró una tierna sonrisa en sus labios, porque la actitud de Tom lo conmovía mucho. Él y Sabine lo hacían sentir tan bien, amaba formar parte de esa familia ahora que era novio de Marinette, sentía que por fin había encontrado una familia amorosa, le hubiera gustado tanto que sus padres fueran así, que Gabriel siempre fuera tan atento.

De todas formas, no se podía quejar. Amelie era una gran tía, lo cuidaba mucho.  Y era lindo poder seguir viviendo con Nathalie y Gorila, ellos también formaban parte de su familia.

—¿Estás bien? De pronto te ves pensativo.

—Lo siento —Adrien cerró su libro —. Creo que me aburrí de estudiar y estar sentado, a veces todo esto me estresa.

—Entiendo —Marinette lo imitó y cerró su libro —. No tiene sentido estudiar si no estás concentrado. ¿Qué te parece si salimos a caminar? Podríamos escribirle a nuestros amigos para saber qué están haciendo, siempre es bueno reunirnos.

—Es la mejor idea de todas —ambos sonrieron y comenzaron a guardar sus pertenencias. Ya habían estudiado suficiente por ese día (casi nada).

Hoy es mi último día de la semana de vacación. :'c Por eso tenía que escribir algo. 

Mi idea es actualizar todos los fanfics hoy, si más tarde tengo tiempo, subiré otro capítulo (o eso intentaré), no olviden dejar su voto, por fis, gracias. :3