, el final no encuentre su momento

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En cuanto Juani y Felipe salieron del carro para pisar la alfombra roja, Juani escuchó murmuros y chillidos ahogados.

Tenía puesto un traje blanco que tenía el pecho descubierto y Felipe iba con uno parecido, ambos combinando. Felipe se había delineado ligeramente los ojos y a Juani casi se le cae la baba cuando lo fue a recoger a su hotel. Felipe le había sonreído tiernamente y le puso una rosa pequeña en el bolsillo del traje, trayéndole una flor como era tradición. Ahora, de pie en la alfombra con todas la cámaras vueltas hacia ellos aunque deberían estar enfocadas en la alfombra, el de rulos suspiro.

Felipe le agarró la mano y juntos caminaron hacia la entrada para formar la cola y que les tomaran sus respectivas fotos. Hubo un pequeño momento de silencio donde estaban cubiertos y no veían el desenfreno de los paparazzis por su puesto en la fila, ahí fue donde Juani se permitió anclarse.

Tomó ese segundo para suspirar de nuevo, hundió su rostro en el hombro de Felipe y hablo. —Vamos, ve a que te tomen tu foto.— levantó su cabeza y vio la manera en la que Felipe dudó ante dejarlo solo cuando fue a que le tomaran la foto con el nombre de la película atrás.

Lo vio sonreír un par de segundos para las cámaras y luego el más alto le hizo un gesto con la mano para que se acercara, Juani caminó lo más recto que pudo, procurando no caerse y se posicionó al lado de Pipe, dejando que él pusiera su brazo sobre sus hombros y que de alguna manera lo envolviera.

Parece que la gente de las cámaras no se resistió, porque aunque no debían hacer preguntas alguien entre los flashes gritó.

—¿Están juntos?— Juani sintió como Felipe movió su mano de posición y la colocaba en su cintura, ejerciendo presión sin notarlo.

—Si, es mi novio.— Felipe respondió sin dudar. Juani seguía un poco aturdido por todo el brillo de las cámaras en sus ojos pero su sonrisa forzada se volvió genuina.

Otra voz gritó algo entre el gentío. —¿No estabas saliendo con Isa Burguess?

—Terminamos hace tiempo, Juani y yo estamos en una relación estable.— respondió Felipe, lo hacía con una paciencia que ponía nervioso a Juani, como si calculara todo lo que le preguntaba y esperara la siguiente.

—¿Y... — una voz grave estaba gritando entre las cámaras pero fue brutalmente interrumpida por una voz que venía de la entrada del hotel.

—¿Y si dejan de preguntarle eso a los jóvenes y se aguantan como gente decente a que entren al evento?— Juani volteó perplejo y vio a Juan Antonio Bayona, juez invitado del festival donde se iba a presentar la película de Pipe, defendiéndolos.

Wow. Este día estaba bien intenso.

—¡Jota!— exclamó Pipe con alegría y le dio un abrazo al hombre cuando se le acercó.

—Posa.— sugirió Bayona y se puso al costado de Pipe para que les tomaran una foto a los tres.

Felipe se despidió y entró con su novio a la parte cubierta del evento, más adentro de la recepción.

—No me esperaba eso.— murmuró Juani cuando se sintió seguro.

—Jota es un amor de persona, lo hiciste bastante bien amor.— lo reconfortó Pipe como si Juani hubiera hecho algo más que solo quedarse ahí parado.

Juani solo le sonrió, no sabiendo muy bien que hacer y lo tomó de la mano de nuevo. Pipe le presentó a un par de actores de la película y Juani se adaptaba para hablar con todos. Luego entraron a ver la película y el de rulos observó minuciosamente como el más alto volteaba de vez en cuando, como para comprobar si le estaba gustando o no.

Juani puso una mano en su muslo como para transmitirle algo. Felipe volteó encantado.

—Lo hiciste muy bien, es una película hermosa.— le dijo el más bajo a Pipe cuando salieron del evento y se dirigían cuidadosamente a la salida de la puerta de atrás para no tener que responder más preguntas incómodas, consideraban que ya habían aclarado lo más importante.

—Gracias. Sabes, cuando te vi en ese café la primera vez, acababa de colgarle al director de la película porque había habido un problema cuando la estaban editando, con el audio, creo. Pero te vi y me recordaste mucho a lo que era un meteorito.

—¿Estás diciendo que soy tu meteorito?— preguntó Juani mientras salían del lugar de la presentación.

—Eres mucho más que eso.— murmuró Pipe.

Salieron por una especie de callejón del otro lado de la avenida, donde Pipe y Juani habían encargado un carro ya preparados (técnicamente Kuku lo había hecho, ellos solo lo habían pedido.)

—¿Queres manejar?— preguntó Juani con una sonrisita.

—Claro, porque no.— el de cabello oscuro se subió al asiento de conductor y el de rulos al de copiloto.

Finalmente en la seguridad del carro Juani se acercó para poder darle un beso a Felipe, como tantas veces había querido en la noche.

Juani unió sus labios poniendo su mano izquierda en el asiento donde estaba sentado el otro chico, la otra en su mejilla. Pipe le correspondió con ganas, casi atrayéndolo por su agarre en su espalda y cintura.

Juani se quitó la rosa del bolsillo visible del traje para que no se arruinara.

Él se cambió de asiento rápidamente, tirando de la palanca para que el asiento del más alto se fuera más para atrás. Se subió a horcajadas del otro y lo beso hasta que sintió que le faltaba la respiración, el menor lo agarró por la cintura con fuerza y comenzó a besarle el cuello muy delicadamente cuando corto el beso.

Juani tiró su cabeza hacia atrás y se acercó más, dejando a Felipe hacer lo que quisiera ahí mismo. El de rulos le quitó el saco cuidadosamente y al ver que Felipe no protestaba, comenzó a desabrochar los botones de la camisa ajena.

Cuando todo el plano de piel estuvo libre, con la camisa aún puesta solo desabrochada, Juani bajó su cabeza para que Pipe dejara de succionarle el cuello y comenzó a atacar tanto como pudo su abdomen. Vio a Felipe inhalar cuando mordió particularmente cerca de su pezon derecho así que pasó su lengua por la mordida y con sus manos trazó todo su abdomen, sus manos parando en el pantalón de traje.

Felipe abrió los ojos de golpe. —Juani...

El de rulos lo miró con los ojos bien abiertos desde abajo y decidió empezar a chuparle el pezon para ver si obtenía una reacción, con su mano levitando casi en el bulto de abajo de Felipe escuchó un gemido ronco más fuerte que los demás.

Felipe hizo otro intento. —Amor, no podemos tener nuestra ah, primera vez en un carro.—

Juani dejó de morder la aureola que ahora estaba roja. —¿Porque no?— las manos de Felipe estaban clavándose en sus caderas con fuerza, como reprimiéndose.

—Porque estamos, eh, expuestos y te mereces algo mejor.— logró sacar Pipe mientras unía sus manos, aunque fue más un gesto de restricción a la mano de Juani que había estado bajando más.

—Bueno.— Juani se levantó con cuidado del regazo de Pipe y sin querer cuando se pasó de asiento de nuevo, rozó la erección del otro con su muslo. Felipe inhaló aire profundamente. —Entonces, ¿si me puedes coger en mi hotel?

Escucho a Pipe reír, como si no pudiera creer que le estaba preguntando eso y le dio un rápido beso en la mejilla antes de recomponerse y tomar el volante aún con la camisa abierta.

—Lo que tú quieras. Lo que tú quieras.— le respondió Felipe que ya había arrancado el carro, poniendo su mano arriba en el muslo de Juani.

Flores para Juani (JuanixFelipe)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora