Capítulo 5.

134 14 0
                                    

-Vas a pagar muy caro ser el nuevo amante de mi hijo. -Dijo sacando prácticamente a rastras a Jisung de la habitación del pelinegro- 

-Padre, él y yo no somos nada, ni siquiera nos conocemos. -Dijo tratando de separar a su padre de Jisung-

-Para no conoceros pasasteis la noche juntos, y eso es lo único que a mí me importa ahora mismo. -El señor Lee continuó con su camino agarrando a Jisung cada vez con más fuerza- Minho, vistete adecuadamente, pronto tendrás que presenciar otro entierro. -Tras escuchar eso, el nerviosismo de Jisung fue en aumento, por lo que todos sus músculos se tensaron y las ganas de llorar se apoderaron de su cuerpo. "Voy a morir. ¿Dónde me he metido?" Pensó- 

-Al menos déjame hablar con él... por última vez. -Dijo agarrando uno de los brazos de Jisung y mirando a su padre- 

-Tú siempre tan empalagoso. -Soló el brazo de Jisung- Tienes dos minutos, ni un segundo más. -Minho asintió y condujo a Jisung unos cuantos metros lejos de su padre-

-Me va a matar. -Dijo Jisung con algunas lagrimas en sus ojos y evidentes nervios-

-No lo hará. Se que no nos conocemos pero confía en mí. -Dijo posando una de sus manos en un hombro del menor- 

-No quiero morir. -Dijo rompiendo a llorar- 

-Y no vas a morir. Mirame. -Dijo agarrando el rostro de Jisung entre sus manos, mirando a sus ojos llorosos-  Tengo un plan, y va a salir bien. Confía en mí, por favor. -Jisung asintió-

-Está bien, confiaré en tí, pero solo por esta vez.

-Nada de esto volverá a ocurrir de nuevo. 

-Se acabó la chachara. Andando. -Dijo el señor Lee agarrando fuertemente el brazo de Jisung- 

-Lo siento Jisung. -Dijo secando sus lagrimas, para luego comenzar a alejarse por el pasillo camino a su habitación-

El señor Lee agarró con más fuerza y rabia a Jisung del brazo, lo cual provocó que este soltara un leve quejido de dolor. 

Minho entró a su habitación y rápidamente abrió su armario para sacar un traje de pantalón y chaqueta color negro, junto con una camisa blanca y unos zapatos negros. Mientras se cambiaba, hizo una llamada, poniendo el modo altavoz para poder hablar mientras se cambiaba, no podía perder ni un solo minuto. 

-¿Minho? ¿Qué necesitas? -Preguntó una voz femenina al otro lado de la línea-

-Necesito tu ayuda Jihyo. -Contestó mientas abrochaba los botones de su camisa- 

-¿Qué ocurre?

-La vida de un chico está en peligro. Tengo que frenar los planes de mi padre antes de que sea demasiado tarde.

-¿Cuántos necesitas?

-No demasiados. Con 6 será suficiente. -Se colocó la chaqueta de su traje y abrochó su pantalón- Pero debéis daros prisa. -Dijo mientras guardaba su pistola en una especie de funda de cuero negro que se escondía en el interior de su chaqueta-

-De acuerdo. Estaremos allí en menos de cinco minutos. Lleva cuidado Minho. -Dijo para, acto seguido, colgar la llamada-

Después de aquella llamada y tras cinco minutos exactos, sus "refuerzos" habían llegado, por lo que Minho fue a su encuentro.

-¿Me puedes explicar por qué hay un chico en peligro? -Preguntó Jihyo, casi en forma de regaño-

-Ese chico se coló en nuestro jardín. Estaba borracho, pero no podía dejarle durmiendo ahí, así que lo llevé a mi habitación y dormimos. Pero mi padre piensa que es mi "amante" y... ya sabes el resto.

▶Guardaespaldas por error◀|Minsung|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora