*+:｡.｡LA PROFECÍA｡.｡:+*

Capítulo 14

Por la mañana las sirvientas tomaban las ultimas medidas para su vestido de bodas, la gente del Palacio estaba loca, preguntaban por el color de los manteles, el postre del banquete incluso por los lugares de asiento, al menos eso mantenía ocupada a Alicent de otro modo le daria a Aelys un sermon sobre lo que significan las bodas, habían pasado un par de dias despues de lo sucedido en la cena y Aelys se habia hecho creer que enrealidad solo buscaba su aceptación y no su amor asi que despues de esta boda se encargaria de hacer su vida lo más parecida a la de antes.

-Lady Aelys, un cuervo de su padre -
-Gracias -
     
          Querida hija
  Lamento no poder salvarte de esta     boda pero prometo que no sera por mucho hallaremos la forma, Lucerys, Jace,Jofre y tus hermanas esta ancioso por verte de nuevo.
                                   Daemon Targaryen

-Lady Aelys el rey solicita la presencia  en el salon -
-Ya voy -
El viejo rey estaba sentado sobre su trono en espera para la bendición de su boda.
-Mi querida sobrina como te encuentras? -
-Bastante nerviosa a decir verdad - se arrodilo ante él -Esto no es lo que quiero para mi - solto una lágrima.
-Oh pequeña, debes pensar en el bien de futuras generaciones Targaryen, si nuestras familias dejan la enemistad no habra que hacer mas sacrificios -

El rey puso su mano sobre la cabeza de Aelys, luego limpio sus lagrimas y tomo sus manos para animarla pero algo raro sucedio en la mente de la joven mujer. Era un recuerdo pero no le pertenecía a ella, en este se encontraba una Rhaenyra joven, portaba un peculear vestido ademas de que tenia una actitud bastante cercana con el rey por lo que deducio que era ella.
-De mi viene el principe que fue prometido y suya sera la cancion de hielo y fuego - repitieron ambos.
-El sueño que tuvo Aegon el conquistador -
El recuerdo dio fin cuando esta decidió regresar a su realidad el rey aun sostenía sus manos, con un rostro un tanto confundido salio de la sala en busca de respuestas y que otro lugar contenía información sobre sus antepasados si no era la Biblioteca, estuvo todo el dia leyendo cada libro que hablaba de la conquista de Aegon pero en ninguno se mencionaba nada sobre aquella profecía si que se convencio de que habia sido una simple tonteria.
Durante el atardecer ella salio a dar un paseo en caballo junto a sir Erik a la capital, fueron bien resividos la gente la adoraba ya que durante su estancia en el castillo se habia encargado de proporcionar algunas cosas como comida o mantos para dormir en la fria noche. Los habitantes le regalaban artesanías y en esta ocacion al ser ya de noche ofrecieron un espectáculo de fuego en su honor.
-Esto es increíble no sir Erik, no seria capas de ir sobre un baril malabareando con fuego en un lugar tan paqueño -
- De que habla mi lady, es lo mas facil del mundo - dijo el guardia con ironia.
-Por supuesto que si -
-Ya es noche mi lady  ya deberíamos regresar a la fortaleza no lo creé -
-Tienes razón esperemos a que acabe el espectáculo y luego nos iremos -

-Agradeaco su apresio pero me tengo que retirar, prometo volver con mas cosas mi amigos -
-La esperaremos con ancias mi lady - dijo aquel hombre que protagonizó el espectáculo -

Sir Erik monto junto a Aelys hasta llegar al castillo.
-Que descanse Sir Errik! -
-Igualmente mi lady -
-A por cierto, tengo un regalo para usted -
La chica saco un pequeño pañuelo en el que habia un retrato suyo bordado.
-Gracias mi lady es muy amable de su parte -
-Es una muestra de agradecimiento por acompañarme a las calles de Kings Landing -
-Lo guardare conmigo mi lady -
-Que tenga buena noche-
-Igualmente mi lady -

Aelys corrió a su habitación con mucha alegría pues mañana llegaría su familia nuevamente asi que miria por que la noche acabara, al acostarse en su cama como si su mente hubiera salido de si volvio a tener ese recuerdo pero pronto fue interrumpido por otro nuevo, uno donde el rey Viserys se encontraba en cama con la mitad de la cara vendada y un aspecto un tanto moribundo repitiendo la profecía de Aegon junto a la que parecía ser Alicent, de inmediato volvio a la realidad preguntándose que era lo que significaba, se sirvió un poco de vino pasando el resto de la noche un tanti preocupada por el estado del rey.