Afuera

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Esta nublado con nubes grises que amenazan con llover, las calles están casi vacías dado que los adultos estaban trabajando y la mayoría de estudiantes estaban en las escuelas, la mayoría.

Ayanokouji Kiyotaka es un joven con cabello castaño y ojos color miel, el viste un uniforme de escuela secundaria de color azul oscuro.

En sus ojos uno puede encontrar curiosidad, la misma curiosidad que uno vería en un gato explorando una caja, pese a que en todo el tiempo desde que salió no h visto a nadie con su uniforme no le presto atención y se enfocó en sus alrededores, el mundo más allá de esos muros blancos es sorprendentemente colorido, las plantas, los postes, los carros, hasta el suelo tenia color, el color blanco al que el estaba acostumbrado a ver no se veía por ningún lado, lo más cercano son tonos pálidos pero nada que se acerque a ese tono cegador.

Caminando lentamente Ayanokouji pasó por un parque, tras observar alrededor sus ojos se posaron en un columpio, examinándolo se sentó y empezó a moverse lentamente, poco a poco el se familiarizó con el sentimiento y se balanceaba más. A la distancia una persona lo observaba con algo de curiosidad pero no parecía tener intención de acercársele, Kiyotaka sabía que había alguien pero en este momento el estaba ocupado, concentrándose al máximo el se decidió por hacer una vuelta completa, usando todo su peso para propulsarse Kiyotaka descendió a alta velocidad pero cuando su posición era 12:00 empezó a descender verticalmente.

Kiyotaka milagrosamente no sufrió ninguna herida, el miró alrededor pero la persona de antes ya no estaba allí, Ayanokouji miró sus manos y las olió, apestaban a óxido.

Si tuvieran que deshacerse de uno de los cinco sentidos cual elegirían? Desde un punto de vista objetivo cada sentido es importante para nuestro día a día, lo que significa que la respuesta sería basada en mis preferencias, y yo si tuviera que elegir sería la vista, simplemente por el hecho de que me pregunto si siendo ciego podría cerrar mis ojos sin ver las luces cegadoras de aquel lugar.

Por cosas más allá de mi control fui liberado durante un tiempo indefinido, ese lugar está cerrado y ese hombre quiere que me mantenga lo más alejado del centro de atención. Si no fuera por Matsuo, la persona que está manteniendo un ojo sobre mí en lugar de el, no hubiera sido capaz de asistir a una escuela.

Estoy probablemente tarde, no solo me distraje en el parque sino que me perdí cuando cuando me dirigía a la escuela, no me sorprendería que llegase a la segunda hora clase.

Al llegar a la escuela me mandaron a la oficina del director, quien me preguntó por qué estaba tarde y responde honestamente.

-Me perdí.

-¿No viniste antes para ver la escuela o no te acompañaron tus padres?

-Esta es mi primera vez en la escuela y vine solo.

El director me miró un poco extraño pero no me dijo nada más, llamó a una profesora quien me guió a mi clase. Una vez en frente del salón paramos de caminar.

-Espera aquí un momento Ayanokouji, entra una vez te llame.

Yo asentí y esperé a que me llamaran, las voces de los estudiantes se hucieron más fuertes cuando la profesora mencionó a un estudiante nuevo.

-Ayanokouji pasa y preséntate.

Abriendo la puerta silenciosamente, entré a la clase mirando al frente, me paré en frente de la pizarra y miré a la clase, ellos estaban mirándome con curiosidad.

-Me llamó Ayanokouji Kiyotaka......... no tengo ningún gusto en especial.... Espero que nos llevemos bien.

Hice una pequeña reverencia, la profesora sonrío amablemente.

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