𝐄𝐥 𝐂𝐚𝐬𝐚𝐝𝐨 𝐂𝐚𝐬𝐚 𝐐𝐮𝐢𝐞𝐫𝐞 ✰ 𝑭𝒆𝒍𝒊𝒑𝒆 𝒙 𝑩𝒍𝒂𝒔

13✰

Cuando la alarma sonó, Felipe se levantó a apargarla, froto su frente donde una migraña amenazaba con hacerle el dia difícil.

Luego busco a Blas con la mirada Pero estaba solo en la cama.

Entonces recordó como le había gritado la noche anterior y se levantó rapido, asustado trato de ponerse su ropa lo mas pronto posible para poder buscarlo, pero sus manos lo traicionaban y temblaban, cuando la puerta del baño se abrio y salio Blas, su cuerpo se relajo y dio un largo suspiro.

Corrió a abrazarlo, acaricio su cabello y beso su frente.

— Lo siento — Escucho a Blas disculparse y se sintio peor de lo que ya hacia, pensaba que era el quien debia disculparse primero.

— No, yo lo siento, no debí gritar como lo hice.

— No, es mi culpa yo te empuje a eso, mis celos, mis reclamos, estas haciendo tanto por mi, y sin embargo sigo quejándome por todo. Trataré de cambiar, perdóname ¿Si? No quiero que estés molesto conmigo.

— No estoy molesto contigo, te amo mucho, no puedo asegurarte llegar temprano porque he conseguido otro trabajo y con eso pude comprar esto.

Se alejo de Blas y fue hasta su mochila, de ahí saco una bolsa negra. Y de la bolsa negra saco dos conjuntos pequeños y se lo mostró a Blas con una sonrisa.

Blas tomo la pequeña ropita y la guardo en el armario.

— Es muy hermosa, mira — Abrió uno de los cajones y saco bastantes hilos de colores — Mi papá me ha dado esto cuando he ido a visitarlo, me dije que he estado viendo videos de YouTube sobre tutoriales de tejido. Con esto también haré ropita para nuestros bebés.

— Eso se ve complicado.

— Lo es, Pero lo intentaré, si no funciona al menos los estambres fueron gratis.

Blas sonrió contagiando a Felipe.

— ¿Y dónde estás trabajando? — Le pregunto y la sonrisa de Felipe desapareció.

Blas lo miro con el rostro fruncido.

— ¿Si te digo no te enojas? — Pregunto, cuando Blas no dijo nada, decidió hablarle con la verdad, para el no era la gran cosa pero no sabia como reacciobaria Blas.

— Estoy trabajando en la empresa del padre de Juani.

El entre cejo de Blas se frunció más.

— ¿Y el esta ahí?

Felipe se rasco la nuca.

— Es casi el dueño, claro que lo esta, solo somos amigos Blas.

— Pero tú mamá...Ella quería que te casarás con el.

— Pero estoy casado contigo ahora, porque te amo, y siempre va hacer asi.

Blas asintió y Felipe le dió un beso en los labios, estaban bien en ese momento disfrutando de la compañía del otro, esperaban estar asi para siempre.