𝐄𝐥 𝐂𝐚𝐬𝐚𝐝𝐨 𝐂𝐚𝐬𝐚 𝐐𝐮𝐢𝐞𝐫𝐞 ✰ 𝑭𝒆𝒍𝒊𝒑𝒆 𝒙 𝑩𝒍𝒂𝒔

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Blas como pudo se agachó y miro debajo de la cama, luego busco de nuevo en el cajon y apreto los labios.

Decidió que luego buscaría, tenía que terminar de lavar los trastes y no podía estar perdiendo el tiempo. Bajo a la cocina y puso música en su celular mientras lavaba para no aburrirse.

De vez en cuando contestaba los mensajes que le dejaban sus exs compañeros, los extrañaba mucho y quería verlos, pero no se sentia con tanta libertad.

Además de que le daba vergüenza.

Tener un hijo no estaba en sus planes, tener dos era mucho peor, sus padres al contrario estaban muy felices y le habían regalo un juego de biberónes, no era mucho, Pero eran pequeños detalles que el agradecia.

Aún así no podía ver a sus exs compañeros a la cara, quedar primero embarazo y sin terminar sus estudios no era algo digno de presumir.

Sin embargo mantenían conversaciones a veces.

Cuando terminó de lavar los trastes y dejarlos limpios en la cocina, volvió a su habitación para tomar la siesta.

La mayor parte del tiempo estaba aburrido, una vez se acababa el quehacer de la casa solo le quedaba esperar a que Felipe llegara, la mayoría dr las vesces se dormia esperando, aunque luchará por aguantar mas tiempo despierto.

Lo único que lo distraía era que algunas veces visitaba a sus padres, tejía o se ponia a ver series online en internet.

Pero ese día Felipe le había dicho que estaba en temporada de exámenes así que tomo los libros de las materias que al mayor no le tocaran ese día y que había dejado en la habitación y busco temas que vendrian en el examen y resumio las importantes, lo que creía podía servir para que el castaño se le hiciera más fácil estudiar y durmiera un poco más en las noches.

Tenía antojos, pero se los aguantaba, entonces podrían ahorrar más y conseguir más cosas para sus bebes.

Cuando terminó vio un capítulo de Suitsy entonces el día de nuevo había terminado.

Felipe le despertó con un beso, Blas podía notar las granfrs ojeras en sus ojos, sus labios resecos,  rostro descuidado de Felipe era obvio que no estaba en sus mejores condiciones y aún lo seguía viendo como la persona más guapa del mundo.

Se preguntaba si a Felipe le pasaba lo mismo, si lo veía guapo a pesar de todo y si lo veria guapo cuando se pusiera peor, después del paeto cuando su rostro estuvieta cubierto de paño su vientre lleno de estrías  y el cuerpo flácido.

— Mira — Felipe señalo la cuna dentro de la habitación. Blas miró la cuna, luego vio a Felipe luego nuevamente la cuna. — Es un regalo de mis profesores y se pone mejor. — sonrió y ayudo a Blas a ponerse de pie. — Esos regalos son de mis compañeros; hay de todo ropa, zapatitos, juguetes y hasta pañales.

— Son hermosos dale las gracias a tus profesores y compañeros de mi parte.

Blas se limpio las lágrimas y y Felipe lo abrazó más fuerte.

— Cierra los ojos — Le pidio, Blas lo dudo pero lo hizo, cerro los ojos y sintió las manos de felipe moviendose por su cuello y después algo frio en su piel. — Lo compre para ti, tal vez la plata no es tan cara como el oro Pero me pareció bonito.

Blas sonrió y viendo la cadena en su cuello y acaricio el anillo que colgaba de esta con sus dedos.

— No tenías que hacerlo.

— Cuando nos casamos te dije que te compraría un anillo mejor, no el que compre en una tienda en la esquina.

Blas miró el anillo en su mano, no brillaba, era sinple y se estaba poniendo oscuro, sin embargo fue el anillo que le dio Felipe cuando se casaron y no lo cambiaría por nada.

Así que decidió que este nuevo anillo descansaría en su cuello y el de cobre que habian comprado en una tienda de la esquina seguiria en su mano.