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—Que lindo está el cielo— mencioné.

Me acerqué más para poner mi cara recostada en su pecho.

—Hermoso— dijo pasando la mano sobre mi hombro desnudo.

Los dos estábamos acostados desnudos con una manta encima en el césped del jardín, era de madrugada, estaba amaneciendo, las nubes estaban anaranjadas, el sol aparecía poco a poco.

Habíamos echo el amor todo la noche, en el jardín de esa enorme mansión, nadie estaba despierto a esa hora.

Nadie nos podía ver.

—¿Vos te imaginas un futuro Peter?— le pregunté poniendo mi mandíbula en es su pecho desnudo para verlo a los ojos.

—Si..— susurró—¿vos como te miras en futuro?— bajo su mirada para mirarme mejor.

—En el futuro me miro con vos, y con nuestro cacahuete.

Ya hace un mes que me enteré que estaba embarazada, aún tenía mucho miedo pero Peter me dijo que me iba acompañar que no me iba dejar sola, eso me hacía sentir fuerte.

No le habían dicho a su familia aún, me dijo que les iba decir la otra semana, que me iba prestar como su novia, estaba muy ansiosa por que no sabía cómo se lo iba tomar su familia, pero estamos juntos eso es lo que importa.

—Yo igual Lali — acariciaba mi pelo.

Me acomode más en su pecho desnudo.

—¿Te imaginas como va a ser cuando nos casemos?— le dije acostándome en su pecho desnudo— siempre a sido uno de mis sueños.

—Puede ser en la playa, vos y yo solos, o puede ser en cualquier lugar, lo más importante es que vos estés conmigo— dijo con voz masculina que me encantaba

—En la playa sería súper bonito, algo muy íntimo, solo vos y yo, prometiendo que nuestro amor nunca se va romper— dije sonriendo como tonta

—Nunca se va romper pequeña— dijo acariciando abajo de la manta mi muslo desnudo

—Te amo para siempre— le dije en su oído

El me sonrió, con su mano libre agarro mi cara para acercarme a él y besarme.

—Yo igual te amo para siempre Lali— me prometio— y también amo al cacahuate ¿cuando toca la ecografía?.

Me mordí el labio, se le había olvidado fui la semana pasada, le dije pero no se acordó después no le dije nada para preocuparlo.

—Creo que en un mes para ver el sexo Peter — le conté, puse la cara en su cuello para oler ese perfume que volvía loca

—¿Pero no tenías que ir antes para ver si si corazón estaba bien?— dijo preocupado

Yo me despegue de cuello para verlo de nuevo.

—Fui la semana pasada— dije simple

El frunció el ceño sin entender mucho

—¿Como? Te dije que te acompañaba— menciono con un ton de molestia

—Amor yo te dije creo que se te olvidó, pero está bien todo correcto— le sonreí para tranquilizarlo

La mano que tenía en mi muslo, desnudo la movió un poco y me lo apretó suave.

—Tampoco me contaste que fuiste— menciono otra vez con molestia

—No quería que te preocuparas amor— intenté sonar calmada.

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