Cariño, cariño, cariño

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El día en que se celebró la competencia de caza organizada por la reina, el cielo estaba despejado desde la mañana.Bajo el cielo azul, en el claro del bosque de los espejos, se desplegaron tiendas de diferentes colores y carpas blancas como la nieve. Las banderas que representaban las familias nobles que participaban en la competencia de caza ondeaban en la parte superior de las tiendas.

La gran competencia de caza era una oportunidad para ver con los propios ojos el poder de las familias nobles. Era natural que se prepararan grandes carpas de caza y caballos bien cuidados. Pero lo más importante era el número de caballeros que llevaban espadas y custodiaban las carpas.

Contratar a caballeros de verdad requería no solo una gran cantidad de dinero, sino también prestigio.

En ese sentido, la carpa de la Casa Duque de Ivilaron no podía evitar llamar la atención. Había más de diez caballeros custodiando la gran carpa. Había más caballeros que cualquier otra familia que participara en la competencia de caza.

Además, no todos los caballeros eran iguales. Los caballeros de Ivillaron, que habían pasado por numerosas batallas, eran fuertes y resistentes.

La competencia de caza en el Bosque de los Espejos no era solo un evento de caza y nada más. Aparte de aquellos que participaban directamente en la caza, el resto de las personas disfrutaban de la fiesta en el jardín organizada por la reina.

Además de Alexis, la casa del duque Ivilaron también estaba representada por Eugene, Ludwina y Llyen. Como la reina aún no había llegado al bosque, Eugene estaba caminando alrededor de la tienda con Llyen, disfrutando del paisaje.

"Mi madre dijo que habría fuegos artificiales. Serán realmente impresionantes. Sé que el abuelo Bach puede hacer unos fuegos artificiales enormes".

Llyen susurró al lado de Eugene. La temporada social de primavera estaba llegando a su fin. Cuando llegaba finales de junio, el parlamento cerraba sus puertas. Y los nobles pasaban el verano en sus propiedades o resorts.

Los miembros de la casa del duque, incluido Alexis, planeaban regresar a Heinskan para celebrar una gran fiesta de bodas. El matrimonio de Alexis, el señor de Heinskan, era casi como una fiesta para los residentes de la propiedad.

Aunque solo se podía tener una boda, se podían tener muchas fiestas. Ludwina estaba ocupada preparando una gran fiesta en Heinskan.

Eugene sabía que todo el mundo sabía que era un matrimonio por conveniencia, pero ¿era realmente necesario hacer una gran fiesta? Aun así, sabiendo que los adultos tenían sus razones, decidió seguir obedientemente lo que le dijeran.

Los fuegos artificiales serían el punto culminante para más de 400,000 personas en Heinskan. Con la adición de bebidas, pan y carne para el evento, seguramente crearía un ambiente festivo.

"Mi madre dice que va a invitar a un mago. Ya he visto una vez la ilusión que un mago puede crear ¡fue increíble!"

"Oh, me pregunto qué otro tipo de cosas hace".

"Mostraba ilusiones sorprendentes. Como flores gigantes floreciendo y peleas entre dragones y caballeros que se movían como si fueran reales".

Eugene pensó que el mago probablemente mostraría algún tipo de holograma 3D. En un mundo sin radios ni televisores, seguramente sería una magia sorprendente y asombrosa.