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Charles había decidido adoptar a un perro para que le hiciera compañía ya que estaba viviendo solo. Nuestra relación iba empezando y ni siquiera habíamos sido capaz de quedarnos juntos a dormir una noche porque ambos queríamos ir muy despacio tras nuestras antiguas relaciones pero íbamos a buen ritmo.
Lo acompañé a Miami porque estaba libre del trabajo. Mi primera vez allí y me gustaba disfrutar de la compañía de Charles.
- Es súper bonito - dijo Charles mientras que no paraba de darle cariños y besos.
- Creo que lo necesitabas en tu vida - dije mientras que lo miraba y le sacaba fotos.
- ¿Tú crees? - dijo sentándose a mi lado.
- Sí - dije acariciando a Leo.
- En realidad era una forma de añadirle a mi vida algo que me faltaba para tenerla completa.
- ¿Completa? - dije y lo miré.
- Porque contigo lo tengo todo pero faltaba añadir a Leo para seguir formando nuestra familia - dijo dándome un beso en la frente.
