My Life In Colorado

Capitulo 11

Valen Pérez 

Esa noche, me acosté con una mezcla de emociones, pero por primera vez en mucho tiempo, me sentí optimista sobre lo que estaba por venir. La semana había sido una montaña rusa de sentimientos, pero parecía que las cosas comenzaban a aclararse.

Al otro día, me levanté temprano. Me puse un par de jeans ajustados y una camiseta verde . Dejé mi cabello suelto ya que lo había lavado. Bajé a la cocina y encontré a Jackie y Alex desayunando.

-¡Buenos días! - saludé alegremente.

-Buenos días, Valen. Te ves radiante hoy - dijo Alex con una sonrisa pícara.

-¿Tienes una cita o quieres impresionar a alguien? - preguntó Jackie, levantando una ceja.

Me reí y negué con la cabeza - No, solo me siento bien hoy. Creo que es el clima - respondí.

Isaac bajó las escaleras en ese momento y me lanzó una sonrisa tímida. Mi corazón dio un vuelco, pero traté de mantener la compostura.

-¿Listos para otro día? - dijo, tomando una manzana del frutero.

-Sí - respondí, agarrando mi mochila.

El viaje a la escuela fue tranquilo. Isaac y yo intercambiamos miradas cómplices, pero no dijimos mucho. Cuando llegamos, nos encontramos con Eva y Jarol en el estacionamiento.

-¡Hola mi linda - saludó Eva, abrazándome.

-¡Hola chicos! - respondí, devolviéndole el abrazo.

-¿Preparada para el fin de semana? - preguntó Jarol, con una sonrisa.

-Sí, definitivamente, hablando de eso, tengo que contarles algo - dije, sintiendo una ola de emoción.

-A ver, vamos al salón que nos toca historia juntos- dijo Jarol a lo que yo lo mire confundida.

-No te sorprendas, el se sabe el horario de todos- dijo Eva riendo.

Fuimos a los casilleros y luego al salón.

-Ahora si cuéntanos- pregunto Eva.

-Saben... Isaac y yo...- dije pero Eva no me dejo terminar.

-¿¡ESTAN SALIENDO!?- grito a lo que todos nos vieron- Ustedes que ven- dijo ella a lo que todos volvieron hacer lo que estaban haciendo

- No, anoche hablamos y el tiene sentimientos por mi, y yo creo que el  me gusta, queremos intentar algo- dije emocionada.

-Oh que increíble no me lo creo- dijo Eva feliz- pero que calladito te tenias los sentimientos por el- dijo con una mirada picara.

-Es que, no sabia lo que sentía- dije cabizbaja- pero el gracias a que hablamos pude aclarar mi mente- dije.

-Estoy feliz por ustedes- dijo Eva dándome un abrazo.

El día transcurrió sin incidentes mayores. En el almuerzo, nos reunimos todos en nuestra mesa habitual. Tyler se unió a nosotros nuevamente, y noté que Eva lo observaba con curiosidad.

-Entonces, Tyler, ¿cómo te está yendo en la escuela? - pregunté, intentando romper el hielo.

-Bien, todos han sido muy amables conmigo. Gracias por dejarme unirme a su grupo - respondió con una sonrisa tímida.

-¡Claro! Eres bienvenido aquí - dijo Jarol, dándole una palmada en la espalda.

Eva permaneció en silencio, observando la dinámica del grupo. No pude evitar preguntarme si había algo más en su mente.

Isaac García

Durante el almuerzo, me sentí más relajado. Hablar con Valen la noche anterior había sido un gran paso. Aunque aún había incertidumbre, al menos sabía que compartíamos los mismos sentimientos. Eva me lanzó una mirada significativa, y asentí ligeramente, entendiendo su mensaje: estaba en el camino correcto.

Después de las clases, todos nos reunimos en el estacionamiento. Jarol propuso que fuéramos al parque para pasar el rato y disfrutar del buen clima. Aceptamos la idea con entusiasmo y nos dirigimos allí en varios autos.

En el parque, encontramos una zona tranquila junto al lago. Extendimos mantas en el césped y nos sentamos a charlar y disfrutar de la tarde. Valen y yo nos sentamos juntos, nuestras manos rozándose accidentalmente de vez en cuando, lo que provocaba que ambos nos sonrojáramos.

Eva finalmente se acercó a Tyler y comenzaron a hablar. Parecía que estaban conectando bien, lo cual me alegró. Era una señal de que no le gustaba Valen.

-¿Te gusta estar aquí? - le pregunté a Valen, mirándola a los ojos.

-Sí, me gusta mucho. Todos han sido muy amables conmigo, y me siento bien aquí - respondió con una sonrisa.

Me armé de valor y le tomé la mano suavemente - Estoy feliz de que te sientas así, Valen. Quiero que sepas que estoy aquí para ti, en todo momento- le dije mirándola.

Valen apretó mi mano y asintió - Gracias, Isaac. Significa mucho para mí - dijo, sus ojos brillando con sinceridad.

Pasamos el resto de la tarde riendo y disfrutando de la compañía. El sol comenzó a ponerse, y el cielo se tiñó de colores cálidos y vibrantes. Sentí que todo estaba en su lugar, y por primera vez en mucho tiempo, estaba emocionado por lo que el futuro podría traer.

Valen Pérez

Esa noche, mientras regresábamos a casa, sentí una paz interior que no había sentido en mucho tiempo. Estar rodeada de amigos y saber que Isaac estaba a mi lado me daba una sensación de seguridad y esperanza.

Cuando llegamos a casa, todos estábamos agotados pero felices. Nos despedimos y cada uno se dirigió a su habitación. Me tumbé en la cama, recordando los eventos del día. Sonreí al pensar en Isaac y en cómo nuestras vidas habían comenzado a entrelazarse.

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