Good Boys

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Max no podía creer lo idiota que era su padre. Levantó la mirada, Mick aún esperaba, aunque era claro que nadie más llegaría, solo serían los tres en aquella cena, pero así era mejor, seguro Jos haría sentir a Mick que todo aquello era su culpa. Tenía el don de hacer creer a Mick que todo lo malo era su culpa.

—Deberíamos comenzar —surgió Christian.

—Solo han pasado veinte minutos —se quejó Mick— le escribí, seguro no tardará en llegar.

—Hijo él no...

—Tal vez le surgió algo —dijo Max, interrumpiendo a su padre, no quería ver la decepción en los ojos de Mick, su hermano sabía que Jos no iría, pero prefería seguir mintiéndose y diciendo que algo había surgido, era más fácil para él— seguro después nos envía un mensaje.

Mick pareció conformarse con aquel pobre pretexto.

—¿De qué querías hablarnos, padre?

Jos busco con la mirada la ayuda de Max, Mick no era un niño, sabría entender perfectamente la separación de sus padres, pero a veces la lógica abandonaba a las personas, sobre todo cuando se trataba de alguien a quien admiras, aun cuando esa persona no sea digna de tal admiración.

—Yo... su padre y yo —Christian hizo una pausa, Jos debería estar allí, esa conversación debería ser de ambos, pero el muy cobarde no había querido enfrentar a sus hijos o simplemente no le había importado lo suficiente como darles una explicación— estuvimos hablando y llegamos a la conclusión de que lo mejor para todos es que él y yo ya no estemos juntos.

El silencio se hizo en la habitación, habrían esperado algo más de objeción, alguna réplica, pero en su lugar Mick solo se dedicó a comer los alimentos que Christian había preparado esa noche para sus hijos.

—Te tardaste bastante, como veinticuatro años diría yo.

Christian y Max no estaban seguros de la reacción de Mick, claramente no era lo que esperaban.

—Jos es mi padre tanto como tú, a diferencia de Max, yo si lo amo —el mencionado se removió incómodo, él también amaba a sus dos padres, a Christian más que a que Jos, mucho más, pero eso no quería decir que no amara a Jos ¿verdad? — de la misma forma que te amo a ti, papá, y porque te amo es por lo que me di cuenta desde hace muchos años que no eras feliz, que mereces a una persona que te trate mejor. No soy estúpido, sé que no es el mejor padre y supongo que es peor como esposo.

Christian sonrió aliviado, este era el mejor escenario al que pudo aspirar, Mick lo entendía, sin drama, sin rencores, ahora podrían avanzar, los tres, incluso podrían llegar a ser una familia más unida.

***

La carrera finalizó nuevamente con el triunfo de Max, llevaba dos grandes premios dominando de principio a fin. La siguiente carrera después de que George ganara, lo hizo Max, esta era la segunda al hilo, pese a los problemas que había presentado durante el fin de semana.

—Lo hiciste bien Max, felicidades.

Max cerró la puerta de la oficina de Sergio, había pasado tanto tiempo en aquella oficina los últimos días que ya comenzaba a sentirla como suya.

—George lideró el gran premio por varias vueltas —dijo Max— y Mick terminó en cuarto, mi padre dice que lo mejor que le pudo pasar a Mercedes fue cambiar de administración.

—Christian normalmente tiene razón —Sergio se puso de pie detrás de su escritorio— pero acordamos no hablar de trabajo entre nosotros.

Dos semanas, ese era el tiempo que había pasado desde que Sergio se disculpó con Vitto y como resultado de aquello, después del desayuno, Max fue a buscarlo a su habitación.