VI. Magic

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Narrador Omnisciente

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Narrador Omnisciente

Derek y Mar salieron juntos del Cupra. Escena que cualquier persona cercana a ellos y que supiera su historia jamas se habría creído.

Ortega se subió al asiento de copiloto y empezó a analizar cada parte del interior. Habían cosas como ropa y botines de futbol en el asiento de atrás y un vaso de alguna bebida a medio terminar en el porta vasos, el resto bastante intacto.

Mar: ¿algo que te interese, entrometido? —dijo encendiendo el motor.

Derek: no, pasa la prueba

Mar: ¿la prueba?

Derek: de calidad, lo has cuidado bien —pasó la mano por el tablero.

Mar: hombre que halago viniendo del más fanático de autos del mundo —dijo de forma sarcástica.

Derek: 8 de 10 por el vaso a medio tomar —agarró el vaso y lo miró— ¿Que era?

Mar: café de caramelo

Derek: 6 de 10 —dijo con una expresión de asco.

Mar: sigue siendo aprobatorio —se burló.

Derek: porque soy buena persona

Arrancó y salieron del estacionamiento del Cupra.

Mar: ¿a tu casa? —preguntó.

Derek: no gracias, voy a otro lado

Mar: ¿a donde? —preguntó con intriga.

Derek: tú conduce —bajó el cristal de su lado mientras Mar lo miraba intentando explicarse como pasó de no querer saber de él a tenerlo sentado en su auto.

Durante el camino los dos iban en total silencio, casi se podían escuchar los sonidos que hacían los engranes del auto y la cosa empezaba a ponerse incómoda. Tenían como un millón de cosas que decirse, pero ninguno se arriesgaría a ser el primero así que Derek intentó con otra opción.

Derek: ¿si pongo algo de música hay peligro de que choques?

Mar: no —rió.

Derek: súper —empezó a buscar el cable para conectar su teléfono al auto pero no encontró ninguno— ¿No tienes auxiliar? —abrió la guantera para mirar allí.

Mar: ¡ahí no! —intentó detenerlo pero no pudo quitar las manos del volante si quería llegar a casa con vida.

Derek: relájate solo estoy buscando un... —vio lo que había dentro y su sonrisa no se hizo esperar— No me lo puedo creer —sacó un álbum de discos, de esos que se usaban cuando Spotify no veía la luz aún— ¿Todavía los tienes?

Mar: déjalos allí —le ordenó sin contestar a su pregunta.

Derek: y en el mismo orden —miraba emocionado cada uno de los CDs.

A Segunda Vista - Mar SerracantaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora