Amor Y Negocios Con Algo De Drama

3. Trato.

Pov Freen.

El camino estuvo en silencio unos minutos hasta que me detuve frente a un parque iluminado únicamente por algunas lámparas.

—¿Qué pasa? —preguntó curiosa.

—Necesitamos hablar, Bec, lo sabes —dije con una sonrisa leve para calmar el ambiente que ya estaba un tanto tenso.

—De acuerdo —contestó.

Caminamos en silencio hasta una banca adornada por dibujos obscenos.

—Lo niños de ahora son creativos —dije señalando un pene dibujado en la banca.

—Eso parece.

Un pequeño silencio invadió nuestra atmósfera y sube que era el momento de saber, enterarme de que le pasó a ella.

—¿Qué fue lo que pasó cuando dejaste de contestarme? Quiero saber tu versión.

Su mirada decayó ante mí pregunta.

—Non, él me aseguró, que tú me engañabas y estando tú tan lejos, nuestros horarios dejándonos hablar solo unos minutos al día y toda la presión que tenerte lejos me imponía, terminé de alejarte, dejé de contestar por que me dolía la idea de que estuvieras burlándote de mí.

Hizo una pausa para tomar un respiro.

—¿Y luego?

—Ni siquiera había terminado contigo cuando empecé a salir con un amigo de Non, por que nunca pude ver a Non como algo más, pero Charly aprovecho verme sola y termino quitando a Non del camino.

—¿Qué le pasó a Non? —pregunté.

—Se fue a vivir a Estados Unidos con unos tíos, Charly y yo salimos durante dos años y nueve meses, cuando tú volviste al país, quise buscarte, tratar de hablar, pero Charly no me dejo, me prohibió buscarte, entonces él me llevó a vivir a un cuarto totalmente patético en un horrible edificio, vivimos ahí más de un año.

Sus ojos parecían reflejar esos recuerdos, ya que frunció el seño, su mirada bajaba, sus dedos se movían demás y sus pies hacían movimientos involuntarios.

—Él no quiso cuidarse y sin avisar dejó de usar protección — sabía lo que diría, pero no quería oírlo —, me embarace, pero el maldito no me daba suficiente para comer y ni me dejaba trabajar, yo... —hizo una pausa cuando su voz estaba a punto de quiebre —, perdí a mi bebé por su culpa.

Su llanto hizo brotar una lagrima de mis ojos, me acerque y acaricie su cabeza, ella dejó salir su llanto reprimido.

Algunos segundo después quiso seguir hablando.

—Me dije que debía cuidar a mi bebé, pero era tan estúpida —se insultó.

No me imagino el tormento de haber perdido a un hijo.

—Después de algunos meses él me pidió intentar nuevamente tener un bebé, lo mande al demonio, perder a mi bebé me dio valor para dejar a Charly —explicó aún entre sollozos.

—¿Y tus padres? —pregunté.

—Ellos me advirtieron que él no era un bueno tipo, pero yo estaba "enamorada" —río sarcásticamente.

—Para cuando todo pasó, no pude volver a casa, me sentía avergonzada, no quería que me vieran volver de esa manera, así que encontré ese trabajo en la caseta.

Todas sus palabras, una tras otra, me hizo darme cuenta que yo tuve parte de culpa en lo que le pasó, quizás si yo hubiera explicado las cosas, si las hubiera explicado, si hubiera regresado, si no la dejara sola, quizás ella no tendría que haber pasado por todas esas cosas.