Capitulo 6

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Me levanté lentamente de la cama, me dolían las entrañas, era difícil caminar. Vi el edredón con una mancha de sangre. Lo quité, lo hice una bola y lo puse en la esquina de la habitación, no quería verlo me daba asco solo de pensar como me tomo a la fuerza. Caminé hacia el bañoy me metí en la ducha, abrí el agua y solte mi llanto mientras las gotas de agua tibia hicieron contacto con mi piel. Comencé a frotar suavemente mi área íntima para lavarla, vi que el agua corría de un color rojo pálido. Eso era evidencia de que había perdido oficialmente mi virginidad y no de la manera que jamás hubiera pensado que sucedería. Agarré el estropajo y le puse jabón y comencé a tallar tan fuerte como pude todo mi cuerpo. Me sentí sucia sentí que no valía nada me sentí usada traicionada y sola.  

Mientras dejo correr el agua me pregunto por qué a mí por qué me paso esto a mi??? Es algún tipo de prueba, no entiendo todo esto es culpa de Leonardo el me vendió y ahora gracias a él estoy marcada de por vida. Estoy pasando por una de las peores cosas por las que podría pasar una mujer, estoy en un país desconocido con un completo extraño que me humilla cada vez que puede y me trata como si fuera un objeto. 

Terminé mi ducha y me miré en el espejo tenia moretones en mi cuerpo. Tenia las marcas de sus dientes donde me habia mordido y chupetones en mis pechos. No puedo evitar verme con mucho asco. ¿Por qué es tan malo conmigo? ¿Qué le hice? 

Me cambio y voy a la cama y tomo una cobija y me envuelvo con ella y me hago bolita y lloro, no sé cuanto lloré al final me quedé dormida.

Estaba durmiendo cuando me despertó la voces en el pasillo, luego la puerta de mi habitación se abrió y era Ivan con otro hombre. 

—Buenos días como dormiste, apuesto que muy, muy bien despues de anoche JAJAJA.......Bueno él es el doctor, toma la medicina que te dará.

—¿¿Qué es??  

—Esa medicina es para que no quedes embarazada ese es el menor de mis objetivos. Aunque estoy seguro de que hago bebés muy bonitos, no los quiero y mucho menos contigo.

El médico comienza a revisarme y luego me da la pastilla del día siguiente y una inyección anticonceptiva. Cura mis moretones y me da analgésicos. Ivan se queda a su lado todo el tiempo, me hace sentir tan incómoda. Simplemente me mira con esa mirada oscura e intimidante que lo caracteriza. El doctor finalmente termina y se va, al igual que Iván, por lo que estoy agradecida.

—Doña Lety, lleve a Alessia el desayuno a la cama solo por hoy, y dígale que puede realizar caminatas cortas en el jardin solo por períodos cortos de tiempo. 

—Si señor.

Después de que el doctor se fue me recosté en la cama y me cubrí con la cobija lo único que quería hacer era dormir no quería hacer nada ni pensar en nada y dormir era la única respuesta que me traía algún tipo de consuelo. Lety me trajo el desayuno pero todavía está allí intacto, no tenía hambre. Me informo que su patron me permitía salir al jardin por periodos cortos, pero no quería encontrarme con Ivan. Estar en esta habitación era la mejor opción al menos por ahora.  

Llegué a casa ya era de tarde fui a la cocina y le pregunté a Lety por Alessia  

—¿Como esta ella? 

—Señor, ella no ha comido nada ni ha salido de la habitación en todo el día. Fui a limpiar su habitación y todo lo que hizo fue tararear una canción y llorar, pero su comida permanece intacta. 

—Yo me encargo de ella.

Camino a su habitación y abro la puerta de golpe tan pronto como entro ella me ve e inmediatamente veo el miedo en sus ojos ella retrocede. La pongo contra la pared ella voltea su cara y cierra los ojos. La agarro por la barbilla con fuerza.  

—A mi me miras a los ojos!!!

Ella se estremece mientras yo grito e inmediatamente las lágrimas comienzan a rodar por sus mejillas mientras me mira. 

Le limpio las lágrimas de la cara con mis dedos y me alejo de ella. 

—Será mejor que empieces a comer tu maldita comida, si no, te forzare a tragartela ahuevo como un maldito animal, ¿me oyes? 

—Ss...sii

—Y ya no estes de llorona que eso me pone de mal humor.

Saldré, volveré tarde a casa, pobrecita de ti, si haces algún sonido cuando me escuches regresar, bajo ninguna circunstancia te quiero fuera de tu habitación después de las 10 p. m. y si te miro afuera a esa hora, me las vaz a pagar.

—Es..ta bi..en.

Sin decir una sola palabra, se va y cierra la puerta de golpe, pero esta vez no la cierra con seguro. Siento un alivio que se ha ido y me acuesto en la cama de nuevo. 

Tiempo después Lety entra a mi habitación con la cena. 

—Niña tienes que comer al menos un poquito por favor hazlo por tu bien no quieres enfermarte. 

—Eso seria lo unico que falta que me enfereme, es decir mirame la vida que tengo literal todo me esta pasando, ahora soy una propiedad. 

—Niña por favor come, dime tu comida favorita, ¿cuál es? Te la puedo preparar. 

—Espagueti a la carbonara.

Sonrío al pensar en mi mamá preparándolo todos los viernes porque era mi comida favorita. 

—Puedo cocinar eso para ti mañana.

—Gracias, Lety.

Me comí unas cuantas cucharadas de la sopa que ella me trajo y le hice saber que ya no queria. Permanecí en la cama durante todo el día. Me quedé dormida despues de haber estado pensando y llorando, se ha convertido en un hábito llorar ahora. Rato despues me despertaron las risas y los gritos de una mujer. Entré en pánico, pero luego me di cuenta de que venía de la habitación que estaba justo a mi lado. Empecé a escuchar gruñidos de Iván y gemidos y gritos de una mujer. No podía soportar el sonido, era tan repugnante que me tapé los oídos y me puse la almohada sobre la cabeza para detener esos sonidos repugnantes, que asco de hombre por dios lo odio tanto al maldito. Finalmente esos sonidos molestos se detuvieron y escuché un par de tacones caminar fuera de la habitación y bajar las escaleras.  

A Los Ojos Del MafiosoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora