ADVERTENCIA🚨
La siguiente escena es fuerte y contiene agresión y violencia sexual, solo está destinada a lectores maduros. Se recomienda su discreción. Si no te sientes cómodo leyendo omita o deje de leer la historia por completo, gracias por su cooperación.
Pasé todo el día en mi oficina trabajando antes de darme cuenta ya era de noche. Había estado bebiendo desde la mañana porque la actitud de Alessia me hizo enojar mucho. Ni me he molestado en ir a verla empiezo a pensar en ella y estoy anhelándola debajo de mi cuerpo. Esta bien hermosa la cabrona eso que ni que. Estoy a punto de tenerla a las buenas o a las malas, pero de que me la echo me la echo. Salgo de mi oficina ya un poco pasado de copas, subo las escaleras y llego a su habitación. Ella está acostada en la cama durmiendo, veo ese hermoso par de piernas que estarán abiertas para mí en cuestión de segundos.
La agarro por los tobillos y la tiro con fuerza hacia el borde de la cama. Se despierta asustada y veo en sus ojos el miedo que le causo. Ella comienza a pelear conmigo y trata de huir de mí, pero soy más rápido que ella, la agarro y rápidamente la acuesto y me pongo encima de ella.
-Que haces suéltame, sueltame!!!
-Estás a punto de cumplir tu propósito.
-Que....no..no..no porfavor no!!! alguien ayuda por favor ayúdenme!!!!
-Puedes gritar todo lo que quieras, nadie vendrá a salvarte de mí.
-Vai al diavolo, ti odio, ti odio.
(Vete al diablo maldito te odio, te odio.)
-En español chingadamadre!!!!
-No no no dejame porfavor!!!
Sentí una sensación de ardor en la cara cuando me abofeteó. Lloré y lloré desesperada con la esperanza de que alguien viniera a esta habitación y me ayudara, pero sabía que eso no iba a suceder. Luego agarró su arma, me apuntó y sonrió. Me quedé paralizada porque sabía no podía hacer nada para evitar que esto suceda.
Le rompo el vestido que lleva y me deshago del sujetador y las bragas en cuestion de segundos. Me mordí los labios mientras admiro el dulce e inocente cuerpo virgen frente a mí. Ella trata de taparse con sus brazos pero le doy unos manazos. La miro fijamente y me lami los labios, mis manos corren hacia sus senos y los agarro con fuerza lo que le duele porque hace una mueca de dolor.
Le abro las piernas bruscamente y me arrodillo empiezo a besarle y morderle las piernas y ella llora y me ruega que no lo haga.
-No por favor no lo hagas te lo ruego Ivan por favor no lo hagas!!!!!!
La ignoro llego a mi objetivo y veo su vagina virgen y empiezo a besar y morder sus labios. Mi lengua comienza a moverse hacia arriba y abajo a alta velocidad saboreando la delicia entre sus piernas.
-Mmmm que rica, valla que mi compra no esta nada mal.
Después de unos minutos estoy listo para hacerla mía. Me limpio los labios que estan llenos de sus jugos, la miro y le guiño un ojo.
Ella aun está llorando y sigue tratando de escapar de mi agarre pero es imposible.
Me desabrocho los pantalones y me bajo los boxers, permitiendo que mi pene palpite libremente en busca de la belleza que está justo frente a mí. Ella me mira baja la mirada hacia mi pene, se ve asustada.
-¿Qué quieres tocarlo? Él no muerde, pero yo sí.
Le abro las piernas con brusquedad y ella me golpea en la cara y me muerde en el brazo. La bofeteo en la cara una y otra vez y le pongo mi mano en la garganta y la presiono. Sus ojos están llorosos y llenos de miedo.
-Si haces otro movimiento estúpido como ese, te mataré. ¿Me oyes?
-Si...si
Llego a su entrada y entro de golpe, se le escapa un grito muy fuerte y trata de soltarse de mi agarre, pero le agarro ambas manos por encima de la cabeza y se las sostengo en su lugar mientras la embisto sin compasion.
El me penetra, inmediatamente siento un ardor indescriptible en mis entrañas, duele mucho, definitivamente nada como lo había imaginado que sería mi primera vez.
-Noooooooo ayudaaaaaaa porfavor!!!!!!!!
-Ahhhmmm que apretadita estas, que rica.
-Por favor, por favor para, haré cualquier cosa, solo para, me duele. No... no....esto me duele mucho!!!!!!!
-Tranquila te va a doler pero te va a gustar. Incluso me rogarás que te la meta todita, no te hagas la inocente que despues andaras como perrita en celo. Voy a reorganizar tus entrañas, metiendote mi verga para que me sientas dentro durante días después.
Sigo embistiendola a toda velocidad siento su calidez alrededor de mi verga se siente como el cielo. Mientras la embestia ataqué sus senos y los mordí lo más fuerte que pude, dejando marcas en ellos. Ella lloró y gritó, pero eso no me detenía. Iba a seguir adelante hasta reclamarla por completo como mía. Tenia su rostro volteado no queria verme. Pero la agarré por el mentón con fuerza y la hice mirarme mientras estaba muy dentro de ella.
-Quiero que me mires mientras te cojo, ahora eres mía y sólo mía. Quien se atreva a tocarte no vivirá un día más. Soy el único que disfrutará de este cuerpesito, tú me perteneces.
Por primera vez choqué mis labios contra los de ella y los besé desesperadamente. Ella no me devolvió el beso. Pude saborear el sabor salado de sus lágrimas ya que no ha dejado de llorar ni por un segundo. Mordí sus labios tan fuerte como pude hasta que empezaron a sangrar, el sabor metálico invadió mi boca y me encantó.
-Grrrr ay que rica mmmm me voy a venir en ti perrita. Ahhhmmmmm si siiii justo como lo imajine eres tan exquisita. A partir de ahora mi carne favorita es la italiana.
Después de algunas embestidas más, me exprimi dentro de ella. Ella había dejado de pelearme y había abandonado su lucha, se dio cuenta de que, por mucho que luchara, todavía la iba a cojer.
Me acosté a su lado y pude escucharla sollozando en silencio, se hizo bolita y cubrió su cuerpo con las manos tanto como pudo. Me levanté, me arregle mis pantalones y antes de salir la habitacion mire el edredón con una mancha de sangre una sonrisa se formó en mis labios.
-Limpia tu mugrero mira nomas como dejaste manchado que asco - deje escapar una risa burlona y sali de su habitacion.
Estaba agradecida de que finalmente se fuera de mi habitacion. Me quedé en la cama sin moverme durante no sé cuánto tiempo, simplemente llorando tarareando esa canción que traía calma a mi corazón.