12

69 9 4
                                    


Contenido adulto.


Creo que definitivamente hemos encontrado una mejor manera de pasar el tiempo que jugar ajedrez o hacer maratones de Marvel.

He estado pensando por días en esto, quizá semanas, pero ahora que ha pasado, definitivamente debo decir que lo he estado subestimando. No solo ha sido mejor que en mi imaginación, sino que ha sido mucho mejor que mis experiencias previas, las cuales han quedado completamente opacadas por el brillo asombroso de hacer con Harry.

Quizá es por la atracción casi enfermiza que siento por él, o por el hecho de que hemos estado alargando esto por casi dos meses, sin embargo cada vez que él toca o besa mi cuerpo, puedo sentir como si fuera la primera vez que alguien se atreve a hacerlo. Se ha encargado de borrar cada nombre de mi piel y sus recuerdos. Ahora solo es él.

Cuando hemos terminado volvemos a hacerlo otra vez y parece que el jamas se cansa, porque evidentemente no solamente tiene que verse divinamente, también tiene la resistencia de un Dios.

— Glýka —, el repite luego de que me he quedado dormida en su pecho desnudo, y puedo sentir sus besos alrededor de mi mandíbula, pero mi cuerpo está demasiado cansado para responder. — Preciosa, debemos levantarnos a comer algo —, murmura y entonces mi estómago parece recordar que es tarde y no he comido nada que no sea el hombre debajo de mi cuerpo desnudo.

Abro los ojos y me encuentro con sus ojos verdes. Alzo mi mano y acaricio su barbilla suavemente, se que es real, pero a veces creeria que es una visión, porque deberia ser ilegal verse así luego de dormir, y aun mas luego del sexo y una noche sin dormir a causa de las pesadillas.

— ¿Debemos? —, respondo y él parece entender mi mente porque se ríe antes de besar mi frente, incluso cuando ha besado todo mi cuerpo en tres ocasiones esta mañana.

Me alejo unos centímetros y el calor de su cuerpo desnudo abandona mi cuerpo, sin embargo parece que los músculos de mis extremidades lo agradecen cuando me estiro y les doy algo de alivio. Me siento en la cama y tomó las sábanas para tapar mi pecho, mientras mi cabello cosquillea en libertad por mi espalda.

Miro las ventanas y puedo notar que las lloviznas se han calmado, sin embargo siguen ahí como lo han estado desde hace más tiempo de lo que parece ser. Es casi inevitable pensar en el sol últimamente, porque aunque lo extraño, la lluvia parece haber traído para mi cosas mejores de las que se ha llevado, incluso cuando alrededor el mundo es una mierda. Jamás he sido egoísta, sin embargo creo que lo seré esta vez.

El suelo está frío debajo de mis pies y cuando dejo que mi cuerpo avance, me llevo las sábanas conmigo. Puedo escuchar la risa de mi compañero atrás, sin embargo decido ignorarlo mientras busco, con muy poco éxito, en donde han quedado las prendas que hemos tirado en algún lugar de la habitación. En su lugar encuentro la camisa de Harry y eso parece ser suficiente para vestirme, mientras lo veo colocando ropa interior y un pantalón.

— ¿Waffles? —, pregunta y salgo de la habitación, sintiendo un suave pinchazo en mi zona baja.

Después de todo tanto sexo tendría consecuencias, pero no me interesa. Valió cada maldito segundo.

— Me parece bien —, respondo entrando en mi habitación y ahora se siente fría y extraña. Sin embargo no me detengo a verla de mas, buscando ropa interior limpia y apta antes de caminar hasta la calefacción y encenderla, aunque luego de tanto ejercicio el calor está en todo mi cuerpo y no parece abandonarme, porque cuando veo a Harry con el torso desnudo y de espaldas a mi, me pregunto cuanto faltara para poder acceder a él.

Ocean eyes | Harry Styles.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora