Crecer para ser mejores

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Extra final:

Los hijos son una bendición pasajera..

Wangji debemos volver,  no creo que nos perdonen si seguimos huyendo, es mejor regresar, pedir disculpas y aceptar como buenos hombres nuestro error, Xichen trataba de convencer a su hermano de regresar a su hogar a enfrentar las consecuencias de sus actos.... pero cuales consecuencias, cuales actos por que debían pedir disculpas bueno de eso trata este extra del día en que los hombres de la familia la perdieron la razón, tomaron a sus hijos y huyeron de su hogar, solo por no querer entregar a sus hijos a la jauría de roba hijos que los esperaban en los nuevos colegios.

Los menores entraban al preescolar, los zorritos subían al colegio primario, sizhui sabía al colegio medio junto a sus primos panteras, Cheng, Ying y los abuelos estaban felices, cuando llevaron a sus hijos a renovar su guardarropa, ellos solo veían a las dependientes alocarse con cada muda que sus hijos se probaban,  hasta que tocó el turno de los más pequeños entonces ahí se acabo el jabón.

Wangji no soporto ver a sus lindas zorritas con esos nuevos uniformes,  es que digooo como era posible que las idiotas educadoras, pidieran esos pequeños trozos de tela para cubrir los cuerpecitos de sus lindas cachorras, de ninguna manera tomó a sus hijas menores en brazos,  las otras las arrojo al abuelo y los que quedaban fueron entregados a Xichen, una ves listos los paquetes Wangji comenzo a correr fuera del edificio, seguido de su padre y de un muy confundido Xichen que solo corrió llevando a los bebés zorros de su hermano por que vio al otro correr histérico fuera del local.

Wangji no soporto ver a sus lindas zorritas con esos nuevos uniformes,  es que digooo como era posible que las idiotas educadoras, pidieran esos pequeños trozos de tela para cubrir los cuerpecitos de sus lindas cachorras, de ninguna manera tomó a ...

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Cuando se dieron cuenta d3 que habían secuestrado a los hijos de Ying solo por no entender lo que había pasado por la cabeza de de Wangji ya era demaciado tarde, ahora eran cómplices,  es decir ellos también estaban en problema con la matriarca de...

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Cuando se dieron cuenta d3 que habían secuestrado a los hijos de Ying solo por no entender lo que había pasado por la cabeza de de Wangji ya era demaciado tarde, ahora eran cómplices,  es decir ellos también estaban en problema con la matriarca de los lan, con la pantera Cheng y con el zorro diabólico Ying quien tenía el récord de la familia en poner los castigos más dolorosos, más humillantes o más certeros de la familia, por lo tanto debían convencer a Wangji de regresar antes de que los encontraran por que si se entregaban antes tenían la oportunidad de hacer un trato menos indecente.

Ying buscaba a sus zorritos desesperado, no sabía cuál había sido la causa de este escape perfecto,  su marido, su suegro y su cuñado estaban más que muertos si no aparecían en las próximas dos horas, que era lo que los más pequeños pedian su chichita, osea que Ying seguía amamantando a sus retoños menores por que en el momento que dejara de hacerlo corría peligro de quedar preñado nuevamente.

Y eso si que noooo, ni quería más noches de chillidos en pleno chaca chaca, no más rasuradas de rabo por que sus hijos decían que mami debía sentir calor, con todos esos pelos en su cola,  se mantendría sin bollos en el horno , aunque los metiches dijeran que la leche materna estaba provocando, que sus niños crecieran de manera más acelerada, que su inteligencia superará al común de los niños humanos y que su marido se empeñara en ordeñar la vaca por las noches.

En el escondrijo donde Wangji había metido a todos sus cómplices y a sus hijos, se estaban caldeando los ánimos, los zorritos hacían sus apuestas y las zorritas echaban porras por su papito, que tenía a Xichen de una pierna y a su propio padre bien sujeto del cabello, los menores se habían quedado dormidos unos minutos antes de que los mayores tratarán de buscar salida de ahí pues el menor no aceptaba ningún argumento.

El escándalo hizo que los más jóvenes despertarán y como su mami no tenía las tetitas listas para su lonchesito se armo el armajedon, fuertes chillidos alertaron a Ying que estaba tan cerca de encontrar a los secuestradores, gracias a su maravilloso olfato, además que el fugitivo no se le ocurrió otro lugar más seguro para esconderse con sus hijos que el que ellos mismos habían construido para los niños en el jardín de su casa.

Al oír los gritos de hambre de los niños Lan,  Ying, Cheng y Xiaoling corrieron al refugio de los zorritos en el jardín, al ver la escena que se desplegaba ahí, proboco que la mujer y los híbridos se soltaran a carcajadas, Wangji, Xichen y su padre colgaban del barandal de la casita del árbol donde se habían escondido.

Por pelear entre ellos con el fin de dejar a Wangji solo con la culpa de robar a sus hijos, rodaron por el piso del refugio hasta salir a la pequeña terraza, solo para rodar por el espacio y casi caer por el barandal pero gracias a los reflejos de Wangji pudo sujetar a su padre del cabello larguísimo que aún conservaba de su costumbre ancestral, con la otra mano tomó a Xichen de una pierna quien colgaba de cabeza, mientras Wangji se sujetaba de las piernas de uno de los pedestales del barandal.

Que quieres hacer Ying los dejamos caer al suelo, decía Cheng aún riendo a carcajadas,  noooo pobre de mi viejo, si se rompe un hueso no creo que se recupere pronto, aun me debe unas noches más de pasión, interrumpió Xiaoling corriendo a ayudar a que su esposo no callera desde ahí, MAAAADDRRRREEEEEE!!! dijeron los híbridos mayores corriendo a ayudar a la madam Lan rescatar al viejo Lan.

La vida de Ying ahora era tan plena, feliz y satisfactoria que cada que pasaban este tipo de situaciones, no le parecía tan mala idea de darle a su esposo un nuevo cargamento bebés para que se entretuviera un poco por algunos años más....

La vida de Ying ahora era tan plena, feliz y satisfactoria que cada que pasaban este tipo de situaciones, no le parecía tan mala idea de darle a su esposo un nuevo cargamento bebés para que se entretuviera un poco por algunos años más

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Wei Ying...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora