Mientras lloraba mina se aferraba a Kafka, ella quería hacer esto desde hace mucho y por fin, después de tantos años... Ella pudo abrazar al hombre que ama.
Kafka sólo acariciaba la cabellera color azabache de su amiga de la infancia, al igual que mina, el quería decir algo.
- sabes mina, desde pequeños hasta ahora a llovido mucho, déjame estar a tu lado y te pido perdón... Por no estar aquí para ti cuando me necesitaste, pero de aquí en adelante estaré a tu lado, no como tu comandante, si no como tu amigo de la infancia.
Secándose las lágrimas, mina negó.
- no tienes que disculparte Kafka... Yo tuve parte de la culpa, así que... Quédate a mi lado kaf-kun.
Los ojos de Kafka se ensancharon, llevaba años que no lo llamaba así, Kafka sonrió.
- está bien, me quedaré contigo mi-chan.
Mina sonrió genuinamente, llevaba años que no le hablaba por eso nombre y a ella la hizo inmensamente feliz.
- ¡Si!
Ella lo abrazo, más la posición era comprometedora, mina literalmente se colgó en Kafka abrazándolo con sus piernas y manos, Kafka suspiro... Está era una versión que el había olvidado de ella y eso lo hacía alegrarse de haber vuelto.
Más un ruido lo saco de sus pensamientos, la puerta de su oficina, fue tan repentino que no pudo hacer nada.
- ¡Papá, mamá me regaño!
- Kafka, dile a arisu que no puede comer pastel de chocolate en cada mo...
Kikoru callo sus palabras... La vista que tenía la había dejado en estado de sorpresa, más curiosamente su seño se frunció.
- ¿Kikoru?...
La mencionada no respondió, en cambio comenzó a caminar hacia el, sin decir nada colocó su mano en el estómago de mina y con fuerza empujó.
- ¡Deja al padre de mi hija!
Kikoru empujó a mina, sorpresivamente logró su cometido, más no logró derribarla.
- Kafka... ¿Puedo pedir una explicación?
- bueno...
Kakfa quiso dar una respuesta, más a medio camino una duda le llegó, ¿Por qué debería dar una explicación?... No, ¿Por qué quería darle una explicación?
Sentimientos raros llegaron, más no pudo distraerse con ello pues miro como mina se acercaba... Sacando una pistola que sabe dios de dónde sacó.
Kikoru noto lo mismo e imitó la acción.
¿De dónde sacan armas estás mujeres?
Él se preguntó genuinamente, sinceramente quiso preguntar, más se alarmó cuando ambas se apuntaron entre si.
Kafka fue hacia ellas, más sus pistolas detonaron, Kafka se interpuso entre ambas balas, al notar eso, mina y kikoru se alarmaron, pero... De la parte superior los guantes salieron dos colas, eran como tentáculos rojos, aquellos tentáculos lo protegieron.
- ustedes dos... ¿Que mierda estaban pensando?, es mejor que se dejen de idioteces y dejen sus armas.
La voz de Kafka se hizo pesada, más algo extraño paso, los cuerpos de kikoru y mina temblaron ante aquella actitud del pelinegro.
- está bien...
- como digas...
Ambas hicieron caso... Las armas que tenían en manos cayeron al piso, Kafka guardo las nuevas armas que descubrío para después mirar a ambas.
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un Kafka diferente
Fiksi PenggemarEl kaiju número 9 fue derrotado, más imposible sin secuelas, Kafka hibino de convirtió en el comandante de las fuerzas especiales anti kaiju por indicaciones del ya fallecido isao shinomiya ... Fue conocido como el segador negro Historia inspirada...
