Dolor (Male Reader Seme x Sanemi Shinazugawa)

.10.

Tanjiro Kamado, un cazador de bajo rango que recientemente había pasado la selección final y también tuvo un encuentro cara a cara con el rey de los demonios.

Ahora se encontraba sentado frente a un demonio que a decir verdad le daba terror por su expresión seria y algo burlesca.

-Cuanto tiempo Yushiro- saludo al demonio peliverde ignorando al cazador.

-¿Donde esta la señora Tamayo? Si le hiciste algo yo...- el pelinegro lo calló.

-¿Que? Tu no puedes hacerme nada por po debil que eres, además te recuerdo que yo los ayudo a encubrirse, si me haces enojar entonces no me importara delatarlos a ese sujeto- calló al demonio que lo miro muy molesto por no poder reclamarle -Dejando eso de lado, ¿quien es el?- señaló al cazador.

-La señora Tamayo me mando a buscarlo- respondió aún muy molesto.

-Entiendo, supongo que fuiste tu quien le grito todas esas cosas a Muzan Kibusuji- el cazador lo miro algo sorprendido por el fuerte olor a humano que este desprendia -¿Como te llamas?-

-K-Kamado Tanjiro y ella es mi hermana menor Nezuko- presentó a la pequeña demonio que tenía un bozal de bambú.

-Mmm mmm- hizo ruidos de alegría por así decirlo.

-Es un gusto, o eso supongo, soy Diablo- se presentó.

-¿Diablo?- susurro el cazador por ese nombre tan inusual.

-Eso fue lo que dije- en eso la puerta de la habitación fue abierta dejando ver a Tamayo y a Sanemi quien no pudo evitar fijarse en el cazador -¿Todo bien Tamayo?-

-De eso queria hablarte- dijo sin más.

-Por cierto, no me dijiste te traerias a un cazador que ademas esta acompañado por un demonio- miro de reojo a los mencionados.

-Mira quien lo dice- Yushiro se rio pero se arrepintió al ver la expresión de enojo del más alto.

-¿Que dijiste?- estaba más que listo para reventarle el cráneo.

-Por favor no pelen- Tamayo los calmo -Diablo-San, por favor venga unos segundos-

-Bien, cariño ahora regreso- acarició los cabellos blancos del pilar antes de entrar a la habitación junto a Tamayo -¿Y bien?-

-Shinazugawa-San... esta en cinta- dijo sin rodeos haciendo muy feliz al pelinegro con esa noticia.

[...]

Mientras tanto, en la sede de los cazadores, un cuervo volaba a máxima velocidad para llegar donde el patrón.

-¡Caw! ¡Informe, informe!- grito alterado y cansado a la vez.

-Dime, ¿que pasa?- lo acarició tratando calmarlo un poco.

-El pilar del viento, Sanemi Shinazugawa sigue vivo, fue visto en la ciudad hace rato- informó sorprendiendo y aliviando al líder de los cazadores.

-Sanemi... mi niño... así que esta vivo, eso es un gran alivió- sonrió tranquilo pero feliz al saber que uno de sus hijos aún seguí vivo.

-Por favor, manden un mensaje a los pilares, diganles que se hara una reunión de emergencia- pidió a sus dos hijas que estaban sentadas tres de él.

-Si padre- dijeron ambas niñas antes de dar una reverencia y salir de la habitación solamente dejando a madre y a su padre.

-Mi niño sigue vivo, es un gran alivio saberlo- su esposa sonrio ante lo dicho.

Kagaya, mejor conocido como el líder de los cazadores, a pesar de la gran noticia que le acaban de decir, se estaba preguntando porque Sanemi no volvió si estaba vivo.

Realmente esperaba que nada malo la haya pasado y que estuviera bien.

[...]

Por fin habían regresado a casa, aunque Sanemi estaba algo nervioso.

-Cariño, ¿recuerdas lo que dije?- pregunto con una sonrisa que ya conocía muy bien.

-S-Si, pero que no se te olvide el trató- a pesar de los nervios debía asegurarse de que el cumpliera con lo dicho.

-Lo hare, tranquilo- depocito un suave beso sobre los labios ajenos.

Ese beso... tan suave y delicado, hizo que Sanemi se relajara de gran sobre manera, las caricias por su cuerpo lo fueron segando hasta llegar a la cama donde fue tumbado con delicadeza.

Lentamente toda su ropa fue retirada dejándolo completamente desnudo ante el demonio quien no dudo en empezar a prepararlo.

-Mngh~ Nnm~- gimió Sanemi al sentir como su entrada era abierta y estimulada por los dedos del demonio.

-Sanemi- lo llamo por su nombre, lo cual era raro.

-¿Q-Que pasa~?- sabia que queria pedirle algo ya solo lo llaba por su nombre cuando quería pedirle algo.

-Jurame algo- se quedó en silencio unos segundos antes de continuar -Jura que nunca te vas a ir de mi lado- más que un pedido se escucho como una orden.

-N-No puedo~- se negó.

-Vamos, puedes mentir si quieres, pero hazlo bien- empezó a estimular sus pezones -Aunque el juramento será eterno- pensó para sí mismo.

Mentira, entonces podía mentir y el juramento no significaría nada, o eso pensaba el pilar sin saber el problema en el que se metería por lo que estaba por decir.

-B-Bien~ so-solo sera por hoy~- respiro para luego decir su "falzo" juramento -Y-Yo ju-juro que~ ahh~- una presión en su punto dulce lo calló.

-Hazlo mejor, también di tu nombre- siguió presionando ese lugar para que se apurara.

-Y-Yo Shi-Shinazugawa Sanemi~ ju-juro que~ nu-nca me ire~ d-de tu lado~ lo juro~- termino de decir y miro al demonio notando como este sonreía.

-Bien hecho- saco sus dedos del interior del albino -Ahora eres mio Sanemi- con eso dicho, metió todo su miembro en la entrada del pilar de una sola estocada.

-¡AGH~!- grito el albino con gran fuerza arqueando su espalda.

Era suyo, ahora Sanemi le pertenecía por completó, y nadie se lo quitaría.