¿ Por Qué Nada De Lo Que Hago Te Parece Suficiente?

::Cap 17:: Preguntas Sin Respuestas

[Narra Simón]:

- Estás bien Simón?
- Como me puedo sentir bien si le rompí el corazón dos veces y el mismo día.
- Pero Wille te ha hecho mucho más daño del que tú le hiciste o se te olvida que él se enojó contigo por el asunto del instagram o del cumpleaños de tu mamá cuando tu solo priorizaste tu felicidad y tranquilidad, le dijiste a tu novio de ese entonces que fue tu mamá la que no quiso que él fuera a su cumpleaños.
Creo que olvidé ese detalle pero tampoco él quiso escucharme pero sentí que eso fue para mejor.
No quería hacerle más daño, y a pesar que fui yo quien rompió con él, aún lo amaba.
- Ya verás como el tiempo hará que te olvides del príncipe y que volverás a sonreír, te quiero - Decía Marcus quien luego me abrazó e intentó besarme pero lo detuve.
- Qué haces, no porque ya no esté con Wille significa que vaya a correr a tus brazos Marcus, somos amigos y quiero que eso se mantenga así.
- O sea que solo soy tu hotel cada vez tu y él pelean, que bueno saberlo.
Acaba de terminar con quien creí que era el amor de mi vida como para tener otro tipo de drama con Marcus.
- Creo que volveré a dormir en casa con mamá, es mucho mejor para todos, gracias por alojarme estos días.
Y como dije irme de la casa de la Marcus fue la mejor desición que pude tomar.
Cuando regresé a casa le conté todo a mamá y exploté llegando a pensar que hice mal en terminar con Wille.
- Que es lo que sientes tú por ese chico, te lo haz preguntado Simón, que es lo que sientes por él?
- No lo se mamá, a veces siento que lo amo, otras veces quiero odiarlo, no lo se y quiero que este dolor que siento se vaya.
- Ya pasará ahora es normal que sientas pena acaban de romper oficialmente y ese chico también debe estar destruido pero si piensas que tomaste la desición correcta, te apoyaré y si piensas que no, también te apoyaré te amo.
Por qué ias mamás siempre tienen la razón o por qué siempre saben decir las palabras correctas? Creo que las mamás nacieron siendo sabías bueno, la mayoría de las madres si pero no todas ya que por la Wille es que estamos como estamos esa señora no supo ser mamá arruinándole la vida a su propio hijo.
Y nuevamente estaba pensando él, como diablos me quitaba a ese chico de la cabeza?
- Mamá por qué me pediste que no invitara a Wille a tu cumpleaños?
- No te parece obvio Simón pero desde que tú estás con él todo ha sido complicado para nuestra familia, no tengo nada contra ese chico pero... - Y luego se quedó callada, admitiendo que todas mis teorías eran ciertas.
Mi relación con Wille nunca debió haber ocurrido. Y con ese pensamiento me fui a acostar para tratar de no pensar en él pero fue totalmente imposible.
Eran las once de la noche de ese mismo día en donde finalmente decidí terminar oficialmente con él, una semana casi exacta desde que le pedí solo un tiempo. Pero esa noche de jueves el príncipe Wilhelm había decidido tener una última conversación conmigo.
Lo vi asomado por el frente de mi casa cuando fui a la cocina a prepararme algo para comer, su cara denotaba una inminente tristeza, sin embargo, su cuerpo parecía rígido y estoico por lo que decidí salir a pedirle que por favor se fuera. Pero él estaba muy decidido en querer decirme algo y opté por escucharlo.
En sus manos traía una carta con un sobre del mismo color de nuestros uniformes supuse que sería de esas cartas que escribimos el año pasado a nuestro "yo" del futuro que iba ser entregada cuando estuviésemos en tercero.
- Que es esto?
- Por favor léelo.
Le pregunté si podía hacerlo en voz alta y me respondió que esa era la idea.
"Querido Wille de 3ro, si es que llego a mi último año, no soy muy amigo de los estudios y aún así lo intento pero el motivo de esta carta es para contarte que este año conocí a una persona que hizo darme cuenta de quien soy, nunca antes pensé que me gustaría un chico, hasta hace muy poco pensé que seguiría un patrón establecido...
"... En el que solo me gustarían las chicas pero no hubo ninguna que me moviera el piso como este chico de cabello rizado, de color negro, ojos marrones y una gran voz de cantante, su nombre era Simón Ericsson, un chico claramente diferente a mí con otros ideales, otras costumbres pero muy valiente. Quise acercarme a él, al principio solo como mi mejor amigo ya que con él sentía esa confianza que ni con mi hermano sentía, con Simón podía hablar y reírme e incluso llorar. Poco a poco aquellos sentimientos fueron aumentando hasta darme cuenta de que estaba enamorado y a la vez aterrado de lo que podrían pensar en mi familia, en la corte o lo que podría pensar él pero decidí lanzarme a la piscina y decirle que me gustaba...

"... Quería saber su reacción pero terminamos juntos en la cama haciendo cosas de adultos, sin saber que del otro lado de la ventana nos estaban grabando y por supuesto, el vídeo salió a la luz y comenzaron un sinfín de problemas, peleas, decepciones pero también mucho amor. No se si al día de hoy voy a estar con él o no o quizás continúe solo el resto de mis días en Hillerska, un lugar al que obligaron a asistir y que ahora no me quiero ir. Pero solo que Simón ha sido lo más hermoso que me ha pasado desde que murió Erik y puedo decirlo que estoy enamorado"
Quedé helado, habían palabras que incluso no podía leer en voz alta, no pude evitar emocionarme lo que también me hizo preguntarme por que..?
Por qué me la estaba dando ahora y como es que la tenia en su poder?
- Nunca la entregué pero no es lo importante en este momento?
- Entiendo que la carta habla sobre mi pero, que querías decirme con esto o por qué me la muestras?
- Solo quería que supieras lo importante que eres para mi y lo mucho que esto aún me afecta, te amo demasiado que podría morir y si esto se acabó al menos quiero saber porque, pero tus verdaderas razones.
- Es mejor así y no trates de encontrar lo que, a lo mejor, ni siquiera estás buscando ya no vale la pena seguir luchando, esto se acabo de y espero que sea la última vez que te lo diga, no quiero que vengas a mi casa, borra mi número, olvídate de mí por favor.
Wille parecía estar decidido a recuperarme esa noche y que no se iba a ir sin dar la pelea.
- Al menos podrías darme un abrazo?
- No puedo, no corresponde.
- Pero si los amigos también se abrazan y si no quieres que seamos novios, seamos amigos.
No se como pero esas pocas palabras  lograron convencerme y terminé dándole el dichoso abrazo. El cual se sintió muy bien, y al sentir su aroma lo demás fluyó de manera espontánea.
Parecía que estuviéramos filmando un película ya que después de nuestros brazos se entrelazaron nos miramos a los ojos y casi como si fuese en cámara lenta nuestros labios se volvieron a conectar en un romántico beso que por segundo me hizo olvidar todo lo malo.
Sin embargo, mientras lo besaba también recordé todo lo que hemos pasado tantos buenos como los malos momentos que nos llevaron a terminar.
Afortunadamente pude reaccionar a tiempo separándome de inmediato.
- Espera,  acabamos de terminar y lo que pasó no está bien, no es correcto.
- Que?
Ya no quería seguir haciéndole más daño pero tampoco quería ilusionarlo por que tuve que ser bastante más duro.
Me preguntó, con su voz quebrada, si era real que no había sentido nada.
Y que ganas tenía tenía de decirle que en realidad era todo lo contrario. Quería explicarle que mientras lo abrazaba y besaba todo parecía ser surrealista incluso llegué a sentir mariposas en la guata, todavía lo amaba.