-POV Rubén-
La noche se cernía sobre la ciudad, y en el interior de mi apartamento, el ambiente era cálido y acogedor. La luz suave de las lámparas de mesa y el tenue resplandor de las velas que había colocado creaban una atmósfera íntima. Había estado preparando una cena especial, consciente de que Tn___ necesitaba sentirse segura y tranquila.Desde que Tn___ había decidido quedarse en el apartamento conmigo y Mangel, ambos hemos hecho todo lo posible por respetar su espacio y sus miedos. Conocía el secreto que la mantenía atrapada en un estado de constante vigilancia y temor: su padre, un hombre controlador y posesivo, había hecho de su vida un infierno. Mi deseo de protegerla chocaba a menudo con la barrera del miedo que ella levantaba para protegerse y para protegerme.
Esa noche, Mangel había decidido pasarla en casa de nuestro amigo Alexby, dejándonos solos por primera vez desde que Tn___ llegó aquí . Veía en esto una oportunidad para acercarme más a Tn___, no de manera física, sino emocionalmente, esperando que mi amor y paciencia pudieran finalmente abrir la puerta que ella mantenía cerrada.
Terminé de preparar la cena y me dirigí a la sala donde Tn___ estaba sentada en el sofá, mirando distraídamente una serie en la televisión. Sus ojos se encontraron con los míos y ella me sonrió, aunque la tensión aún seguía.
—La cena está lista,—anuncié con una sonrisa cálida, tratando de aliviar un poco la atmósfera cargada. —Espero que tengas hambre.
Tn___ asintió y se levantó, caminando hacia la mesa del comedor.
—Gracias por hacer esto, Rubén. Siempre te esfuerzas tanto.
—Para mí es un placer,—respondí, sirviendo las copas de vino con una leve sonrisa.—Quiero que te sientas bien aquí, que sepas que este es un lugar seguro para ti.
Nos sentamos a la mesa y comenzamos a comer, hablando de cosas triviales al principio: el trabajo, el clima, una película reciente. Noté que Tn___ parecía más relajada a medida que avanzaba la cena, el vino ayudando a suavizar los bordes de su nerviosismo.
—¿Sabes?—dije después de un rato, mirándola con seriedad pero con ternura en los ojos. —He estado pensando mucho en nosotros, en todo lo que ha pasado desde que decidiste quedarte aquí y después de la revelación que mencionó Max.
Tn___ dejó su cuchillo y tenedor, sintiendo que el momento crucial se acercaba. —Yo también he pensado mucho en eso,—admitió, su voz apenas un susurro. —Quiero que sepas que te pido perdón y aprecio todo lo que has hecho por mí, pero..."
—Pero tienes miedo,—completé, tomando su mano sobre la mesa. —Lo entiendo, Tn___. Sé que tu padre es una figura intimidante y que te ha hecho mucho daño. Pero quiero que sepas que estoy aquí para ti, para apoyarte y protegerte. Tienes el apoyo de Mangel, Max por desgracia—Alzo los hombros en forma de desagrado, ya que el tipo no me caía bien.—y el mío.
Las lágrimas comenzaron a llenar los ojos de Tn___, pero las contuvo, respirando profundamente.
—Mi padre... él es un hombre muy controlador. Me da miedo lo que pueda hacer si sabe que... que—Suspira cubriendo su rostro con sus manos.—que te amo.
Silencio.
Sentí un nudo en el estómago al escuchar las palabras de Tn___. Fueron unas palabras que nunca pensé que iban a salir de ella ya que ha sido lastimada de manera cruel por muchos años. Me quedé en silencio mirando como ella intenta de mantener la calma al fijarse de las palabras que salieron de su boca.
—Tn___ te lo voy a repetir y no me cansaré de decirlo. no estás sola. Podemos enfrentar esto juntos. Prometo que no dejaré que te haga daño. Pero necesito que confíes en mí.
Ella me miró con una mezcla de esperanza y desesperación.
—Quiero confiar en ti, Rubén, de verdad quiero. Pero cada vez que pienso en mi padre, en cómo puede reaccionar ese día, me paralizo de miedo.
Me levanté de mi silla y caminé hacia ella, arrodillándome a su lado. Tomé su rostro entre mis manos, obligándola a mirarme a los ojos. —Tn___, escucha. Estoy aquí para protegerte. No dejaré que nadie, ni siquiera tu padre, te haga daño. Te amo más de lo que puedes imaginar, y estoy dispuesto a hacer lo que sea necesario para que estés a salvo y feliz.
Las lágrimas finalmente rodaron por las mejillas de Tn___, y ella se lanzó a mis brazos, abrazándome con fuerza.—Perdón, Rubén,—susurró entre sollozos. —Te amo tanto, pero tengo tanto miedo...
La sostuve con ternura, acariciando su cabello y susurrando palabras de consuelo. —Todo estará bien, te lo prometo. Solo necesitamos esperar a ese día y que el plan funcione, ya verás, lo superaremos juntos.
Nos quedamos abrazados durante lo que pareció una eternidad, el tiempo perdido en la intimidad de ese momento. Podía sentir el latido acelerado del corazón de Tn___, y cada suspiro suyo resonaba en mi propio pecho. Lentamente, nos separamos, mirándonos a los ojos con una intensidad que hablaba de todas las palabras que aún no se habían dicho.
Me incliné hacia adelante, mis labios rozando los de Tn___ con suavidad. El beso fue lento, lleno de la promesa de amor y protección. Ella respondió con la misma ternura, entregándose a ese momento de conexión profunda.
Nos levantamos juntos, todavía tomados de la mano, y caminamos hacia el sofá. Nos sentamos, abrazándola, manteniéndola cerca. La tensión sexual entre nosotros era innegable, pero estaba teñida de una comprensión y respeto profundos. Sabía que no podía apresurar las cosas.
—Tn___,—murmuré, mis labios rozando el cabello de ella. —No voy a mentirte. Te deseo. Pero quiero que todo suceda a tu ritmo. No quiero que te sientas presionada ni incómoda.
Tn___ me miró con gratitud, sus ojos brillando con lágrimas contenidas. —Gracias, Rubén. Gracias por entenderme y por ser tan paciente.
Acaricié su mejilla con el dorso de la mano, disfrutando de la suavidad de su piel. —Eres todo para mí, Tn___. Solo quiero verte feliz.
Ella se acercó más, acurrucándose contra mí. —Es difícil, Rubén. Mi padre ha controlado cada aspecto de mi vida durante tanto tiempo. Me siento como si estuviera atrapada en una red de miedo y obligaciones.
—Lo sé— respondí suavemente. —Pero ya no estás sola. Juntos, encontraremos una manera de liberarte de esa red.
El silencio que siguió no era incómodo; era un silencio lleno de promesas y esperanzas. La calidez del cuerpo de Tn___ contra el mío, el ritmo de su respiración, todo parecía encajar perfectamente. Sabía que el camino por delante sería difícil, pero estaba dispuesto a recorrerlo con ella.
La noche avanzaba, y la ciudad fuera del apartamento seguía su curso, ajena a la lucha interna y las decisiones cruciales que se estaban tomando en ese pequeño rincón del mundo. Para Tn___ y para mí, esa noche era un punto de inflexión, un momento en el que el amor y la comprensión comenzaban a desafiar el miedo y la opresión.
Nos acurrucamos en el sofá, hablando en susurros de nuestros planes y sueños, la luz de las velas parpadeando a nuestro alrededor como testigos silenciosos de nuestro amor creciente. La noche nos envolvió en su manto, y por primera vez en mucho tiempo, Tn___ se sintió verdaderamente segura y amada.

ESTÁS LEYENDO
Doble vida-Rubius y tú-(Fanfic)
Fanfic¿Te gusta la musica electrónica? Ándale yo sé que si te gusta, es difícil de negar algo tan divertido de escuchar o bailar. Aunque a eso no vino yo sino a contar el problema de esta chica que está presente en la historia... Ella es DjBlue una chica...