Sentimientos de padres

945 113 2
                                    

Capitulo 14

-¡Llegué!...- gritó Becky apenas abrió la puerta de su casa ese jueves a la noche. Después de una despedida con Kirk, a pesar de que eran vecinos, por más de media hora, finalmente ingresó cuando el reloj daba casi las nueve- ¡Hola!... ¡Papá!... ¿dónde est... oh dios, dios!- dramatizó encorvándose para taparse la cara con sus brazos y salir de la cocina donde apenas había puesto un pie- No voy a poder sacar esa imagen por mucho tiempo.- aseguró al tirarse sobre el sillón y esperar a que sus padres se reunieran con ella.

-¿Por qué entras así? Al menos avisa.- se quejó Maik mientras llegaba a ella y terminaba de abotonarse la camisa.

-JA... ¿Y se puede saber desde cuándo tengo que hacer eso?- preguntó ella acostándose a lo largo del mueble y perdiendo su mirada en el techo para no tener que verlos aún.

-Becky tiene razón, Maik.- intervino Jesse apareciendo tras su marido y acomodándose el cabello- Ya no tenemos edad para montar espectáculos ni mucho menos deberías haberlo presenciado. Lo sentimos, hija.

-Ya, tranquila. Que las demostraciones de amor no le hacen mal a nadie.- dijo Becky con sinceridad debido a que le gustaba cuando ambos se susurraban cosas creyendo que ella no los escuchaba o se sonreían tímidamente como si recién se conocieran. Amaba verlos felices porque eso la hacía feliz a ella- ¿Ya puedo levantarme?

-Si, ya.- le dijo Maik quitando las piernas de su hija de un extremo y ocupando su lugar- ¿Cómo estuvo tu día?

-Mmm... ¿que hay para cenar?

-Esos "mmm", que sueltas de vez en cuando,- dijo Jesse sentándose en el piso frente a sus dos personas favoritas- poco me agradan... Cenaremos en unos momentos... ¿Qué tal el colegio?

-Bien.

-Tu padre me dijo que ayer a la tarde, muy tarde, una mujer te dejó frente a la casa.... Una mujer, no una muchacha... ¿Quién era ella?- Preguntó Jesse ignorando la mirada de reproche que su hija le dio a su esposo pero no el sonrojo en sus mejillas.

-Una profesora.- respondió Becky removiéndose en su lugar, producto de las caricias que Jesse le proporcionaba a sus pies mezclado con los nervios.

-¿Cómo?- preguntó Jesse quitándose por primera vez el papel de madre cumplidora de caprichos y tomando el lugar de Maik. El padre que ponía limites, aconsejaba a su hija y estudiaba sus acciones- ¿Una profesora?... ¿De tu escuela?

-Aja.

-¿Y por qué hizo eso?... Siempre te acompaña Kirk... o en el peor de los casos Nop.- dijo Jesse haciendo una mueca cuando nombró al chico e Maik la imitó.

-Ella no es de aquí. Tuvo cosas que hacer y me pidió ayuda. Como luego se hizo tarde me alcanzó a casa.

-¿De dónde es?- preguntó esta vez Maik al notar el silencio de Jesse.

-Es de Bangkok.

-¿Cómo es su nombre?- preguntó Maik.

-¿Para qué quieren saberlo?... Es una profesora más.- dijo Becky rogando porque sus padres no notaran su respiración entrecortada.

-¿Cómo es su nombre, Becky?- insistió Maik.

-Freen. Freen Sarocha.

-¿Es la profesora nueva?

-Dejó de serlo hace tres semanas, Jesse.

-Mamá...- la corrigió la mujer. No porque le molestara que la llamara así, pero le agradaba de sobremanera que Becky le dijera mamá. Becky rodó los ojos y luego se inclinó para dejarle un beso en la mejilla- Y... ¿qué tal es ella?... ¿Te agradan sus clases?

Lenguaje del amor Freenbecky Donde viven las historias. Descúbrelo ahora