Nid de Chat | Chat Noir/Adrien x Tn

Volpina

Habían seleccionado los viernes como día de investigación para la operación "Atrapar a Hawk Moth", solían salir muy temprano por tener solo una o dos clases dependiendo si les cancelaba el profesor o no, hoy era uno de esos días en que les cancelaron la segunda clase así que llevaban desde que salieron de la universidad visitando todas las bibliotecas o librerías que tuvieran cerca. _______ le comentó a su mejor amigo sobre la existencia del grimorio, un libro que contenía información sobre absolutamente todos los miraculous, se excusó en que sabía mucho de ello porque tenía tiempo indagando en internet documentos sobre los héroes ya que no le podía hablar sobre el maestro, que él pensaba era su abuelo normal, quemando el templo hace muchos años logrando escapar con la caja de los prodigios y ese libro, rematando con que estaba extraviado.

Se decidieron en buscarlo, podría incluso existir una copia, si era algo antiguo debería haber alguna evidencia de que existía, aunque fuera en fragmentos, la exposición egipcia a pesar de ser de ayuda solamente tenía partes que ya eran de conocimiento popular, nada nuevo, ellos ocupaban conocer puntos clave que les ayudaran a llegar con la identidad del villano principal o conocer alguna debilidad. La castaña quería buscarlo por eso, pero en parte también para indagar sobre su propio miraculous, el libro podría tener las respuestas para desbloquear los poderes que les faltaban.

— ¿Estás segura de que existe? — preguntaba Luka, se rindieron por ese día, ahora caminaban rumbo a François Du Pont ya era hora de salida para su melliza y hora de entrada para la clase de esgrima —. Puede que solo haya sido información falsa que encontraste por ahí.

— Te juro que existe, pero todo este tema de los miraculous ha sido secreto desde hace siglos, tiene sentido que no encontremos nada.

El de puntas azules asintió pues también había investigado cuando tenía tiempo sobre esas cosas y su mejor amiga tenía razón respecto a que la información de los prodigios era sumamente escasa, abundaba un montón sobre los héroes actuales, así como del villano, pero todas eran cosas que todo Paris ya sabía porque lo veían casi a diario. Necesitaban algo único o nuevo, algo que solo portadores, guardianes o escoltas conociesen.

Llegaron a la institución donde Juleka ya les esperaba en la entrada acompañada de su amiga Rose, la castaña se despidió de los mellizos para correr a los vestidores a cambiarse sin escuchar lo que la chica bajita hablaba sobre una estudiante que parecía conocer a medio mundo, ella estaba llegando tarde.

Entró al mismo tiempo que Adrien, se saludaron apenados por casi chocar al estar corriendo para llegar a tiempo. Se pusieron su uniforme a la velocidad de la luz, sin saber que cada uno estaba dejando a sus kwamis en sus respectivas mochilas, al salir repitieron la escena de un principio por no decir quien saldría primero.

El entrenamiento comenzó como siempre, aunque notaba al rubio más tenso de lo usual, pensando que estaba teniendo un mal día la castaña se acercó a él en el descanso.

— Oye, Adrien, ¿tienes algo que hacer después? — se sentó a su lado en la banca, el mencionado dejó de tomar agua para prestarle atención —, podríamos retomar el plan de ir al cine sin que te escapes esta vez.

— Lo siento, la verdad es que tengo un compromiso muy importante. Es algo que aún estoy procesando.

Enarcó la ceja por la impaciencia con la que decía aquello, no planeaba preguntarle nada por no querer parecer muy metiche por suerte no se quedó con la duda cuando el rubio retomó la palabra en susurro como si estuviera por decirle un secreto.

— Hoy llegó una chica nueva a la escuela — se acercó más a la mayor —, dice que es muy amiga de Birella y quiere contarme sobre eso.

— ¿Amiga de Birella? — si _____ tenía menos amigos que dedos en sus manos, Birella estaba sola. Algo estaba raro en todo eso — ¿Cómo se llama?