La multitud rugía cuando Lisa estaba de pie junto al banquillo con el árbitro, a punto de ser sustituida por primera vez. La mayoría de la gente en el estadio no la conocían pero cada sustitución traía nueva esperanzas para los fans; sobre todo si se trataba de un jugador completamente nuevo que no habían visto antes. Sólo quedaban veinte minutos para el final y el juego estaba muy empatado: 1-1. The PortlandThorns nos estaban dando un rato muy difícil en nuestro partido como dueñas de casa y su defensa era muy difícil de pasar. Habíamos tratado en múltiples ocasiones marcar pero nuestro atacante no pudo golpear la red con la pelota por alguna razón. Eso causó frustración. Moral bajó en la segunda mitad del juego. Eso cambió al instante como Lisa tocó el balón por primera vez y mostró sus habilidades descaradamente. La multitud estaba jadeando y aplaudiendo con sorpresa cuando la joven jugadora pasó al primer defensor y sólo fue detenida por el oponente tirando de su camiseta, lo cual nos dio un tiro libre.
Sus primeros segundos en el terreno de juego ya estaban dando frutos y los fans aplaudieron con admiración. Lisa y yo no necesariamente estábamos en un buen terreno desde que habíamos regresado de las Vacaciones de Primavera. Volvimos a ser cordiales, pero nada más. Había pasado una semana y no habíamos hablado en absoluto. Por mucho que me sintiera frustrada por nuestra situación, todavía me sentía culpable por lo que había pasado en Miami, estaba tratando de seguir el consejo de Joan para no acercarme a la morena. Pero eso no quería decir que no estaba impresionada con ella. Era evidente que ella estaba deseosa de hacer recuento de su tiempo y me acordé de lo nerviosa que yo había estado en mi primer partido con la liga profesional. Por desgracia, el tiro libre no sirvió de nada pero la nueva centrocampista izquierda estaba causando caos en el estadio y en la defensa del otro equipo. Ella parecía imparable y no pasó mucho tiempo hasta que se liberó en el lado izquierdo, envió la pelota hacia el otro lado y supe exactamente donde iría a parar. Me coloqué a la perfección, me arriesgué a chutear la pelota, lo cual funcionó y finalmente fue a parar en el fondo de la red. La pelota fue disparada con tanta fuerza que ni siquiera el arquero pudo reaccionar antes de que esta aterrizara en la esquina superior derecha.
Mis compañeros corrieron hacia mí para celebrar pero yo sabía que este logro no era sólo mío. Lisa había sido una pieza fundamental. Poco a poco me acerqué a ella y nos dimos los cinco en una forma de decir 'gracias' aunque me hubiera gustado abrazarla al igual que lo haría con cualquier persona. Ese fue el primer contacto que habíamos compartido en una semana. Desterré esos pensamientos, volví al modo de juego, ya que era hora del 'Show de Lisa'. Me sorprendí sonriendo varias veces cuando ella mostraba un truco tras otro y tenía a todo el mundo a sus pies; literalmente -un jugador quedó en ridículo cuando trató de quitarle el balón. Ella siguió haciendo su jugada individual en el tiempo de descuento y marcó un gol en su primer partido. Probablemente nunca olvidaría esa sonrisa en sus labios cuando la mostraron en la pantalla del estadio justo después. Su agotamiento era visible después de haber jugado como loca, pero la pura felicidad y satisfacción parecía valer más que cualquier otra cosa, mientras que todos la felicitaron.
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L-75
Hayran KurguLalisa y Roseanne son dos prometedores talentos futbolísticos del país. Las dos chicas juegan para la selección de la categoría C-17 y su meta es ganar el campeonato del mundo en Costa Rica. Su conexión en el campo es evidente pero.. ¿Qué pasa cuand...