Entre mundos: amor y guerra

Final de la primera parte.

Dos semanas antes del embarcamiento de la tripulación de Colette: 

Bradley estaba sonriendo con euforia, mientras Max, con el ceño fruncido, miraba preocupado—Bradley, por favor, ve despacio-- Bradley, con los ojos brillantes de emoción, conducía el carruaje en medio de la nieve. En cambio, Max observaba con seriedad, no por la velocidad, sino porque Bradley estaba aprendiendo a manejar una carreta con seis caballos veloces—A la izquierda —dijo Max con firmeza.

Bradley giró la carreta con una sonrisa confiada, y la pareja llegó a una mansión abandonada. Max fue el primero en bajar, ajustando su bastón en la nieve, y luego ayudó a su novio, sus ojos reflejando una mezcla de determinación y cariño:---¿Max, dónde estamos? —preguntó Bradley, su voz suave y curiosa.

Max solo sonrió, guiándolo hacia los terrenos cubiertos de maleza. Bradley, con una expresión de asombro, contemplaba la mansión en ruinas, sus ojos recorriendo cada rincón desgastado--¿Esto es...? —preguntó el omega, sus cejas levantadas en incredulidad.

—Bradley, este terreno es la casa ancestral de mi familia —dijo Max, con una mezcla de orgullo y melancolía, mirando la maleza que se adentraba por las ventanas rotas.Bradley dio un paso al frente, sin comprender del todo, y tocó la pared con suavidad, su expresión volviéndose pensativa:—No entiendo qué hacemos acá —dijo, girándose para ver a Max, que lo observaba con una mirada firme y decidida.

—Bradley Uppercrust Tercero, nos conocemos desde la infancia. Empezamos nuestra relación de una forma un poco inusual —dijo Max, con una mirada intensa y sincera—. Te empecé a querer desde mis once años, posiblemente... crecimos juntos, desarrollando sentimientos genuinos. No quiero perderte otra vez. Quiero que seas mi esposo omega. No quiero que te dobles a mi voluntad, tampoco quiero un esposo sumiso. Quiero que seas mi esposo en un trato igualitario. Quiero que tengamos cachorros, quiero pasar mi vida a tu lado, quiero seguir doblegando mi voluntad a tu merced... Bradley, cásate conmigo--Max sacó un anillo hecho en oro con la frase grabada "Eres mi fuerza", su semblante sereno mientras observaba la reacción de Bradley, cuyos ojos se llenaron de lágrimas.

—Max, yo... —dijo Bradley, agachando la mirada con voz suave—. No soy casto, he asesinado hombres... no soy un prototipo de omega ideal, fui criado para ser un alfa... Max, yo...- fue interrumpido por un beso de Max, quien luego dijo:—Bradley, no me importa. Solo me quiero casar contigo. Recuerda, soy un antiguo esclavo, mi linaje ante la sociedad no es aceptable, pero ¡que se joda la sociedad! Bradley, ¿tan mal partido soy que no quieres casarte conmigo?--- La voz de Max bajó un poco y agregó:—Cásate conmigo, prometo seguir siendo tu esclavo--

Bradley quería negar aquellas declaraciones, no amarlo, el castaño amaba al alfa, pero se quedó callado mientras veía a Max apagarse, su mirada llena de vulnerabilidad. Bradley lo miraba sin decir nada, su cuerpo no reaccionaba. De repente, Max rompió el silencio con una frialdad inusual:—Esta será la última vez que lo pediré. Será mejor volver--

Max comenzó a caminar, pero Bradley lo tomó por sorpresa desde atrás. Ambos rodaron en la nieve por la pequeña colina, quedando Max encima de Bradley. Ambos estaban adoloridos pero se miraron intensamente. —Max, yo... —murmuró Bradley, luchando por encontrar las palabras adecuadas. Sin embargo, antes de que pudiera terminar, Bradley tomó a Max de la nuca y lo besó apasionadamente. Max respondió con la misma intensidad, sus cuerpos se fusionaron en un abrazo salvaje, sintiendo el calor a pesar del frío que los rodeaba.

Finalmente, separaron sus labios, ambos jadeando por la emoción y el deseo. Max miró a Bradley con una mirada ardiente, y juntos, sin decir una palabra más, se dirigieron hacia el wigwam dentro de la mansión. Max tiró a Bradley sobre unas pieles que hacían las veces de cama, lo besó con ferocidad, y ambos se entregaron en cuerpo y alma.

Tres días pasaron en la mansión abandonada en las cuales, Bradley se quedaba en la wigwan  Max casaba y cocinaba dado que Bradley no sabía hacerlo, luego volvían hacerlo hasta que Max anuda en su interior, al cuarto día salieron Bradley caminando como pingüino mientras Max orgullo miraba la marca del cuello lo había reclamado ahora ya no se podrían alejarse.

--Max --Bradley dijo el mencionado lo miro para después el omega seguir hablando en un tono un poco ronco casi en susurro:-Casate conmigo -- el mencionado lo miro ofendido y respondió:-Se acaba de llevar mi castidad, Señor usted debe hacerse responsable, mañana mismo nos casamos --Ambos se tomaron de la mano, rumbo a la carreta sin saber los nuevos obstáculos preparados en su joven futuro. 

Fin.

Este capítulo es el cierre de la primera temporada,

El capítulo es corto, luego los recompensó.