ℂᴏ͙ɴ͙s͙ᴇ͙ᴊ͙ᴏ͙s͙ 𝐀͙ᴍ͙❦ʀ͙ᴏ͙s͙ᴏ͙s͙ 𝐴͙ʟ͙ 𝐄͙s͙ᴛ͙ɪ͙ʟ͙ᴏ͙ A͙ᴢ͙ʀ͙ᴀ͙ᴇ͙ʟ͙
Cᴀᴘɪ́ᴛᴜʟᴏ 45: Vɪᴠᴀʟᴅɪ's Wɪɴᴛᴇʀ, ᴍᴏᴠᴇᴍᴇɴᴛ 1★
➝『Gracias a @Vixxius por cierta idea, y también a @Lucia_Nagahiro por comentar lo mismo😃!』
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⋆⋰⊹⋱⋆ 𝐿as frías gotas conformadas de agua salada caían hasta el firme material del suelo con una notable rapidez, inundando los bellos ojos de color zafiro y otorgándoles una apariencia que se asimilaba a la de una enorme cascada. Además, la suave y delicada piel de porcelana se mojaba cada vez más por las inmensas lagrimas de frustración y enfado que brotaban de sus lindos ojos conforme todos los segundos que pasaban.
Sentado en el suelo y apoyando su espalda contra la pared, él abrazaba sus piernas con fuerza para poder ocultar su cabeza entre estas junto a la suave tela de su ropa, la cual se terminaba mojando por su llanto.
El ambiente se sentía espeso y era completamente incómodo, además de que este se mantenía en un total silencio, no importaba para nada si su hermano de cabello azabache se encontraba sentado a un lado suyo, con su pálida mano posada sobre el hombro derecho del rubio en una forma de demostrarle su apoyo y darle un vago consuelo al más bajo.
Azrael le daba una mirada apenada, con un brillo lleno de lamentos y, a decir verdad, un poco confundido.
Después de todo, tanto la situación actual como la causa detrás de esta le generaban un enorme desagrado en ese preciso instante.
Sobretodo por quien lo había hecho.
Aunque no era el tiempo de pensar en eso. Algo, o más bien, alguien, los terminó interrumpiendo.
¿𝙻𝚞𝚣𝚋𝚎𝚕, 𝚙𝚞𝚎𝚍𝚘 𝚙𝚊𝚜𝚊𝚛? Preguntó una voz después de tocar la puerta con su mano tres veces seguidas.
Y a juzgar por como sonaba la voz, esta le pertenecía a Galim.
Pero el rubio ni siquiera formuló una respuesta, solo le hizo un ademán al azabache para hacerle saber a este que tenía su permiso para abrirle la puerta a su otro hermano.
Y, después de pensarlo por un par de segundos, el más alto fue capaz de comprender la seña, por lo que se decidió levantarse del frío suelo y caminó hacia la entrada del cuarto para dejar que Galim estuviera en la habitación. Aquello sabiendo que él había tenido el consentimiento de Luzbel, porque no hubiera dejado al otro pasar de no ser así.
Pero daba igual.
Una vez que el otro ángel fue capaz de pasar, rápidamente se dirigió a Luzbel, corriendo hacia este con la mayor rapidez que pudo una vez lo vio sentado en el suelo; él sí que estaba bastante preocupado por el rubio, aunque quizás se debía a que es el hijo más grande en su familia.
𝙾𝚑, 𝙻𝚞𝚣𝚋𝚎𝚕... Su hermano mayor le llamó con tristeza, abrazándolo de manera inmediata para consolarlo.
Aunque al Querubín no le pareció la mejor idea posible, pero eso no fue un obstáculo para él, y tampoco le impidió corresponder el cómodo y reconfortante abrazo.
Al fin y al cabo, él lo necesitaba, de verdad que lo necesitaba.
Pero no era el único.⁽¹⁾
Azrael solo los observó desde lejos, comenzando a caminar hacia ellos con la intención de querer unirse al cálido momento familiar. Pero se detuvo al notar que había algo en el piso, cerca de Galim.
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ℂᴏ͙ɴ͙s͙ᴇ͙ᴊ͙ᴏ͙s͙ 𝐀͙ᴍ͙❦ʀ͙ᴏ͙s͙ᴏ͙s͙ 𝐴͙ʟ͙ 𝐄͙s͙ᴛ͙ɪ͙ʟ͙ᴏ͙ A͙ᴢ͙ʀ͙ᴀ͙ᴇ͙ʟ͙
Фанфик꒦꒷.˚𖤐☾•▴▵͡˖˚·°☆°·˚˖▵͡▴•☾𖤐˚.꒷꒦ A͎z͎r͎a͎e͎l͎: l͎o͎s͎ v͎o͎y͎ a͎ s͎h͎i͎p͎e͎a͎r͎ q͎u͎i͎e͎r͎a͎n͎ o͎ n͎o͎! D͎o͎n͎d͎e͎ n͎u͎e͎s͎t͎r͎o͎ án͎g͎e͎l͎ d͎e͎ l͎a͎ m͎u͎e͎r͎t͎e͎ e͎s͎ e͎n͎v͎i͎a͎d͎o͎ a͎l͎ i͎n͎f͎i͎e͎r͎n͎o͎ p͎a͎r͎a͎ s͎u͎p͎e͎r͎v͎i͎s͎a͎r͎ e͎l͎ H͎o͎t͎e͎l͎...