Icy -Kv

11

Enero pasó rápido, estaban a uno de febrero y Jungkook no sabía cómo pedirle eso a Tae.

Taehyung no era consciente de lo rápido que pasaba el tiempo, de un momento a otro, había cumplido tres meses desde que empezó a salir con Kook.

Por su parte, en el comedor, Taehyung y Jimin hablaban de algunas cosas.

Pero por supuesto, no podía quitarle el ojo a Kook.

Lo guapo que estaba hablando con sus compañeros de hockey mientras comía, peinando su pelo negro con sus manos hacia detrás.

Oh, estaba tan enamorado.

Su cara se pone roja cuando se da cuenta de que Jungkook también le mira.

Kook se levanta de su mesa, atrayendo las miradas de todo el comedor, y camina hacia él.

-Buenos días…- Murmura Kook, sentándose a su lado. -Hola Jimin, ¿Qué tal?- Dice, para no ignorar al mejor amigo de su novio.

-Bien…- Dice Park, levantándose. -Os dejo solos, te veo luego Tete…-

-¿Tete?- Dice Jungkook, riéndose cuando Jimin se va.

Tae le da un golpecito en el brazo. -¿Qué quieres?-

-¿Qué pasa?, ¿Acaso no puedo comer con mi novio?- Murmura Kook, poniendo una mano en el muslo de Tae.

-Sí…, claro que puedes.- Tae le da un beso en la mejilla.

-Pero, quiero proponerte una cosa.- Jungkook acaricia el hombro de Tae.

Kim le mira, con una ceja levantada.

-El equipo de hockey va a jugar partidos en un pueblo a seis horas de la ciudad.- Comienza Kook, Tae frunce el ceño.

-¿Un pueblo?-

-Tiene el mejor estadio con pista de hielo del país.- Contesta Kook, con una sonrisa. -Vamos a jugar la NCAA, la liga de hockey, la semana que viene, nos vamos seis días, tres partidos, supongo que te suena por tu hermano, ¿No?-

-Sí, me suena.- Dice Tae, le coge la mano a Kook.

-Quiero que vengas conmigo.- Dice Kook. -Podemos llevar un acompañante, pagando un poco más, y me encantaría que vinieras…-

Taehyung mira a los ojos a Jungkook, y sonríe.

-Dormirías conmigo, vendrías a vernos a los partidos, haríamos fiestas…- Murmura Jungkook. -Seis días de desconexión, fiestas, alcohol-

-¿Sexo?- Dice Tae, y Jungkook abre la boca sorprendido.

El castaño suelta una carcajada, y Jeon traga saliva nervioso.

-Es broma…- Murmura Tae, y mira a los ojos a Jungkook. -¿Cuánto dinero vale…?-

-Descuida, yo lo pago.- Contesta Jeon.

-No. Jungkook, eso-

-Soy yo quien quiere que vengas, además, no es apenas dinero, de verdad.- Jungkook le coge las manos. -Por favor…, lo pasarás bien.-

Tae rueda los ojos, y le da un besito en la boca a Jungkook. 

Antes de darse cuenta Taehyung está metido en un autobús con veinte jugadores de hockey y otras tres chicas más.

Pensaba que iría mucha más gente, pero en cuanto llegaron a la estación de autobuses las miradas de los compañeros de Kook se dirigieron hacia él.

No podía mentir, era intimidante estar con tantos hombres, mirándote de arriba abajo, pero, en seguida Tae se dio cuenta de que no eran malas personas.