—Estás muy distraído hoy, ¿todo está bien?
Preguntó mi mejor amigo mientras ponía su mano en mi hombro izquierdo.
—No lo sé, desde hace un par de semanas que no me puedo concentrar.
Dije con desesperación.
Y era cierto, había terminado la temporada anterior como uno de los mejores laterales del país.
Ahora estábamos a solo dos semanas de comenzar la nueva temporada y yo no era capaz de mantener el balón en mis pies.
Algo que claramente Brian ya había notado.
—Deben ser los nervios, no te preocupes, hemos sido el mejor equipo de la liga durante todo el año, vamos a estar bien.
Asentí con la cabeza, yo también quería pensar que solo estaba nervioso.
—Por cierto —continuó hablando mientras caminábamos hacia los vestidores— ¿dónde estuviste ayer? Te estuve tratando de llamar para que hiciéramos algo, aprovechando que tuvimos el día libre y nunca me atendiste las llamadas.
—Lo siento, estuve un lugar bastante feo y no quise sacar mi celular del bolsillo.
—¿Dónde?
Cuando le dije el nombre de aquel barrio de mala muerte, me miró muy sorprendido.
—¿Israel Reyes en un lugar como ese?
—Julián llegó ayer para poner su despacho contable y le gustó ese lugar, a decir verdad compró un local muy bonito, no combina para nada con los negocios de alrededor.
El uruguayo rió mientras negaba con la cabeza.
—Me da mucho gusto por tu primo, se ha esforzado muchísimo por tener lo que ahora tiene, espero que le vaya todo de maravilla.
Dijo él y yo asentí.
—Yo espero lo mismo.
°°°•°°°•°°°
—Listo, todo tuyo.
Dijo el antiguo dueño del local, estrechando la mano de mi primo, quien justo acababa de firmar el contrato por su nuevo espacio.
—Felicidades hermano, eres increíble, estoy muy orgulloso de ti.
Dije abrazandolo con todas mis fuerzas.
—Muchas gracias Isra, aún no puedo creer que lo compré, es un sueño hecho realidad.
Festejamos un rato, me había tomado el atrevimiento de llevar una botella de champagne.
Pensé que a Julián le molestaría, pero estaba tan contento que de seguro ni se dió cuenta de lo que estábamos tomando
Ahora, después de un par de horas y de que aquel señor se hubiera ido, estábamos sentados recargados en la pared, mientras mirábamos a la otra pared.
—¿Y ahora que hacemos?
Preguntó Julián mirándome, yo reí un poco.
—No tengo ni la menor idea, supongo que deberíamos comenzar a poner cosas aquí dentro.
Él asintió lentamente.
—Debo contratar a alguien que me ayude con eso, soy fuerte pero necesito un par de manos más.
Dijo y yo chasquee la lengua.
—No digas tonterías, yo te ayudaré.
—No me lo tomes a mal Isra, pero el trabajo físico nunca ha sido lo tuyo.
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Aprender a soñar. ||Israel Reyes||
FanfictionIsrael es un futbolista profesional, jugador de uno de los mejores equipos del país. Julieta es una mesera en el pequeño restaurante de sus abuelos. Israel es mimado. Julieta se ha tenido que ganar todo con el sudor de su frente. Israel está enamora...