En aquella penumbra de la tarde, donde el sol se despide,
Mis pensamientos se arremolinan, el corazón no decide,
Enfrentar la realidad de esta despedida amarga,
Donde los sueños rotos forman una daga.
Las palabras se ahogan en mi garganta,
Mientras la tristeza en mi pecho se agranda,
La última despedida se cierne sobre mí,
Un adiós que marca el fin, y el principio de mi sufrir.
Tus recuerdos son un eco en mi mente,
Como fantasmas que no encuentran su gente,
En cada rincón de mi ser resuenan,
Susurrando promesas que se desvanecen y queman.
El sol se oculta tras las montañas lejanas,
Mientras en mi interior, la pena se desgrana,
Las lágrimas caen, silenciosas y tenaces,
Formando un río de dolor en mis pálidas fases.
La última despedida, un momento eterno,
Un suspiro que se pierde en el invierno,
El frío envuelve mi cuerpo y mi alma,
Mientras te veo partir, sin un atisbo de calma.
Los sueños que construimos, ahora hechos pedazos,
Se esparcen como cenizas, se pierden en los ocasos,
La esperanza se desvanece, como el humo en el viento,
Dejando solo el vacío de este triste lamento.
Te llevas contigo una parte de mi ser,
Dejando un hueco que nunca podré volver a llenar,
La última despedida es un golpe cruel,
Un adiós que resuena como un eco en la piel.
Los días que compartimos, ahora son recuerdos lejanos,
Fragmentos de una vida que dejamos de lado,
Cada risa, cada lágrima, ahora son historia,
Capítulos cerrados en nuestra memoria.
En esta última despedida, miro hacia atrás,
Viendo el camino que juntos solíamos andar,
Pero ahora nuestros pasos se separan, desiguales,
Siguiendo sendas distintas, con destinos fatales.
El cielo se oscurece, las estrellas parpadean,
Mientras en mi interior, las emociones se debaten,
La última despedida, un final anunciado,
Donde los sueños rotos encuentran su legado.
Mi corazón late lento, cada golpe una tortura,
El dolor de tu partida es una herida que perdura,
La última despedida es un adiós sin retorno,
Un capítulo final en nuestro melancólico entorno.
Y así, en el ocaso de este día gris,
Te dejo ir, aunque mi alma sufra y grite,
La última despedida, un acto de valentía,
Donde dejo atrás los sueños rotos, y busco mi propia guía.
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Sueños Rotos
PoetryCada noche de tristeza las expresé en palabras, cada una de esas palabras las convertí en versos, y esos mismos conformaron poemas. Y es así que, aquí estoy dando a conocer al mundo, mi propia realidad a través de poesía. Aquellas noches en las que...
